La
princesa de Asturias, que cumple 14 años el 31 de octubre, va teniendo
más protagonismo en la vida oficial aunque la Casa del Rey protege los
planes que tiene para ella.
Son pocas las noticias que facilita la Casa del Rey sobre la princesa de Asturias
y su hermana. Las hijas de don Felipe y doña Letizia, por deseo de sus
padres, llevan una vida bastante apartada de los focos. Lo dijo hace
años el Rey: “Ya tendrán tiempo”. Pero parece que el tiempo se acaba.
Leonor de Borbón cumple 14 años el 31 de octubre y la maquinaria del
palacio de la Zarzuela ya trabaja para que la heredera vaya asumiendo
poco a poco su papel. En los últimos tiempos ha habido claras señales. Comenzó con la imposición a la princesa del Toisón de Oro que Felipe VI decidió entregarle el día de su 50 cumpleaños. A este acto simbólico le siguió una visita a Asturias pasando por Covadonga y luego la lectura de la Constitución,
que fue la primera vez que se oyó la voz de Leonor en un acto público. La última comparecencia de la princesa fue el pasado día 19 en la
entrega de medallas de la Orden del Mérito Civil, al cumplirse cinco
años del relevo en la Corona. Salvo estas presencias puntuales la vida
de la heredera está blindada a la curiosidad. Hace una semana que Leonor terminó las clases en el colegio Nuestra
Señora de los Rosales, donde ha finalizado segundo de la Educación
Secundaria Obligatoria (ESO). Ha concluido el curso con buenas notas. La
hija mayor de los Reyes es una buena estudiante que, además de las
tareas ordinarias de su centro escolar, añade otras actividades e
idiomas. Habla inglés con mucha fluidez, como su padre ha contado, y
aprende francés. Comenzó a estudiar chino y algo de árabe, pero sus
padres quieren que esté familiarizada antes con las lenguas del Estado
español.
Leonor hace tiempo que sabe el papel que desempeña y entiende el
trabajo que hacen sus padres. Es habitual que don Felipe y doña Letizia
les cuenten a sus hijas la actualidad. En más de una ocasión, se ha oído
a la Reina explicar a sus hijas quién era alguien cuando estaban
saludando en un acto. Quienes están cerca de Leonor y de Sofía cuentan
que son dos niñas muy educadas. La mayor es más tranquila y reflexiva;
la pequeña, más inquieta. Sus padres quieren que en esta primera fase de
sus vidas no haya casi diferencias entre ellas, por eso siempre acuden
juntas a las convocatorias públicas. Pero en el futuro Leonor deberá de
asumir más protagonismo.
Todo lo que rodea a las hijas de los Reyes es alto secreto. “Todo en
su momento” es la frase que se pronuncia en el palacio de la Zarzuela
cuando se pregunta qué planes hay para Leonor. El hermetismo es tal que
ni tan siquiera se ha querido desvelar si la princesa de Asturias
pronunciará su primer discurso cuando debute en octubre en los premios a
los que da nombre. Pero si nos atenemos a los precedentes, es posible
que de alguna manera se escuche su voz. “Para la Reina y para mí va a
tener una significación muy especial y especialmente emotiva”, dijo el
Rey al anunciar que Leonor y Sofía estarán en Oviedo. “La presencia en el Teatro Campoamor de nuestras hijas no supone un
antes y un después, sino un hoy y un mañana no solo para nuestros
premios, sino para la vida de la propia fundación y un orgullo para la
Corona”, añadió. Hay algunas similitudes entre la trayectoria de Leonor y de su padre. Una de las más evidentes es que su asistencia a los premios de la
Fundación Princesa de Asturias llega a la misma edad en la que el
entonces príncipe pronunció su primer discurso. Tampoco son casuales sus viajes a Estados Unidos. El jueves la Casa
del Rey informó de que Leonor y Sofía se van de campamento de verano. El
destino elegido es de nuevo algún punto de Estados Unidos, país en el
que ya estuvieron el año pasado. Como en aquella ocasión, y para blindar
su privacidad, no se ha desvelado donde pasarán el mes de julio. Entonces, las llevó la Reina en un avión de línea regular de Iberia. A
su regreso a España, ya en Palma de Mallorca, Leonor contó que había
conocido a niños de muchos países y había practicado la vela. Poco más.
Si los planes de Leonor a los 13 años son todo un secreto, más lo son
los que se preparan para ella cuando termine sus estudios en Nuestra
Señora de los Rosales. Por su condición, la princesa de Asturias debe
tener formación militar porque está llamada a ser la jefa de los
ejércitos. Pero cómo recibirá esta instrucción es todavía una incógnita,
como también lo es qué estudios realizará. Leonor es una gran lectora a quien parece interesarle mucho las
Humanidades. Si sigue el guion de su padre, que estudió Políticas,
además de una carrera tendrá tutores de diversas materias que
complementarán su formación. El futuro de la Corona es suyo.
Ha causado un gran frufrú y revuelo que la revista ¡Hola!
publicara esta semana tres bodas, consideradas exclusivas, en una misma
portada. Todo un récord. Si no estábamos ya hasta arriba con la megaboda futbolera y rockera de Pilar Rubio y Sergio Ramos,
ahora tres tazas más de lo mismo. ¡El romanticismo debe tener un
límite! Las tres bodas ofrecen un surtido de tipos de novia poco
usuales. Una es Belén Esteban, princesa del pueblo. Otra es Ainhoa Arteta, la gran soprano española. Y por última, María Pombo, la primera bloguera en tener boda retransmitida en streaming
y publicada en papel. Con ellas podría acercarse el fin de las
exclusivas, ese reportaje negociado con el cual la publicación se
garantiza fotos, declaraciones y anécdotas absolutamente propias
prometiendo a los novios ser portada, nunca hasta ahora taaan compartida. Afortunadamente, las tres bodas no repiten invitados pero las une el rito católico, el traje de novia y la bendición de ¡Hola! La primera sorpresa surge cuando la figura de Belén Esteban, vestida de novia
pero sin novio, ocupa la portada en soledad. Muchos lectores “de toda
la vida” de la publicación han aireado que les indispone verla en ese
altar que es esa portada. Belén está allí porque es la princesa del
pueblo y como aristócrata debe salir en ¡Hola!, con mucho más
motivo al contraer matrimonio. Esteban vuelve a demostrar así que
continúa siendo una figura femenina con la que se identifican miles de
españolas. Esa mayoría silenciosa que decía Mariano Rajoy. Esos millones de espectadores que nunca ves pero que siempre ven algo en Belén que les emociona.
Esta boda-reality es en cierto modo un caballo de Troya. Con ella, Esteban abre las puertas de ¡Hola!
a Mediaset, el poderoso grupo mediático para el cual trabaja. Una
cópula, perdón, una alianza quizás más excitante que la propia ceremonia
porque durante años se consideró más bien vulgares a los miembros y los
contenidos de esa comunidad televisiva. Y hoy les da todo el respaldo
posible, tanto que son más fotografiados sus compañeros de trabajo que
el novio o que su propia hija.
La siguiente boda de portada viene anunciada en un recuadro lateral. Es la de María Pombo, una joven bloguera
que se vuelve definitivamente conocida al figurar en la portada de la
edición impresa del semanario. Ella sí enseña novio y este, a su vez,
nos muestra un traje hiperclásico con los puños de la camisa medidos
para que dejen ver un reloj suizo carísimo, que usted puede financiar
cómodamente en unos grandes almacenes. Así fue como Belén Esteban
consiguió su primer Cartier, por ejemplo.
Lo que más moló de esta boda repleta de influencers es que fuese “transmitida en directo”. Un streaming
tan bien realizado por el equipo digital de la revista que pudimos
entender la cara de preocupación de la novia cuando en la iglesia empezó
a sonar el himno nacional a bombo y platillo. Pombo explicó que habían
pensado en usar “la parte menos fuerte del himno pero hubo un error y se
usó la fuerte”. Muy mona, muy bloguera y muy nacionalista, Pombo
confirma que puedes ser novia influyente y conservadora sin complejos. Ella misma, en su encanto de bloguera, llega a recordar que “en la
antigüedad todas las novias entraban con el himno”. ¿La antigüedad
quiere decir el franquismo? Ese discurso va envuelto por el peinado boho de
la novia y acompañado de los vestidos palabra de honor con pierna
derecha al aire de las amigas; los amigos del novio van todos de azul
marino, porque no existe el gris para los influencers.
Acudimos a la fiesta preboda de Ainhoa Arteta
y Matías Urrea en las bodegas Lustau de Jerez de la Frontera. De las
tres bodas de la histórica portada, me pareció la más fina y divertida. Ainhoa cantó varios éxitos de Rocío Jurado
junto al grupo flamenco; mientras recorríamos la bodega su virtuosa voz
nos seguía bajo los inmensos arcos construidos como si fuera un templo. Susana Díaz apareció con el pelo más corto y asegurando que la idea
había sido de Ana Rosa Quintana,
también invitada. Mientras tanto, los amigos del novio, miembros de la
Armada, se pavoneaban con sus uniformes blancos y sus esposas o novias
bien sujetas del brazo mientras pedían selfies para
fotografiarse junto a mi esmoquin color menta.
“Macho, me encantaría
vestirme así”, me confesaron, provocando algo parecido al amor.
Almeida
respeta la tradición que instauró Carmena con la enseña arcoiris, pero
en un lateral de la fachada central, junto a una nueva rojigualda que
Vox había pedido que instalasen.
La bandera arcoíris ha vuelto al palacio de Cibeles. La enseña, que representa al colectivo queer
(lesbianas, gais, transexuales, bisexuales...), vuelve a colgar de la
sede el Ayuntamiento como lo viene haciendo desde 2015, cuando la
entonces alcaldesa Manuela Carmena (Más Madrid) mostró el compromiso del
gobierno municipal con las reivindicaciones del colectivo. Pero en esta
ocasión es diferente. En lugar de aparecer en medio de la fachada
principal, donde ha ondeado estos años, el nuevo Ayuntamiento, gobernado
por el Partido Popular en coalición con Ciudadanos y con el apoyo del partido de ultraderecha Vox, ha colocado la bandera en la zona izquierda de la entrada. Este no ha sido el único cambio . La enseña arcoíris de José Luis
Martínez-Almeida es diferente de la que hubo hasta ahora: elaborada por
los madrileños y de 26 metros de largo. Ahora se ha encargado una nueva,
que es más corta. Aunque el Ayuntamiento explicó que la otra estaba
“muy deteriorada”, en Cibeles había voces que defendían usar esa enseña
así como colocarla en el lugar que había ocupado desde el 28 de junio de
2015, día internacional del colectivo en homenaje a los disturbios de Stonewall, que este año cumplen medio siglo. "No voy a patrimonializar el Orgullo Gay como se hace desde la
izquierda, pero no voy a dejar de colocar esa bandera", ha asegurado el
alcalde. "Me critican por un lado y me critican por el otro, por tanto
creo que estamos acertando con lo que estamos haciendo", ha añadido.
La tradición del Orgullo que inició Carmena
“Fuimos los primeros y estoy muy orgullosa de ser la alcaldesa de una
capital que dio un paso tan importante”, dijo Carmena ese año. Era la
primera vez que se colgaba la bandera arcoíris en el Consistorio. También la primera ocasión en 24 años que no gobernaba el PP la ciudad
de Madrid. Las asociaciones Cogam y Felgtb describieron el momento como
“un hito después de tantos años de lucha”: “Un momento único, histórico,
que jamás se borrará de nuestros corazones”. Con la llegada del nuevo gobierno a Cibeles, el 15 de junio,
surgieron las dudas de si el Consistorio iba a colgar la bandera
arcoíris al asociarse para la investidura de Almeida con un partido que
en campaña pidió que el Orgullo se moviera del centro de la ciudad a la Casa de Campo. Tanto Ciudadanos como el PP insistieron en que sí que se iba a hacer. Vox, cuyos votos son indispensables para que las derechas gobiernen,
criticó la idea y recomendó al alcalde Almeida que colgara mejor una
bandera de España. Dicho y hecho: el jueves apareció una enseña en el
mismo lugar donde el año pasado se colgó la del Orgullo (donde también
estuvo la de Refugees Welcome); justo debajo de otra rojigualda que
ondea en un asta.
Almeida se ha mostrado "extrañado porque exista malestar al colocar
la bandera de España en la fachada del Ayuntamiento, más aun cuando en
el Ayuntamiento de Barcelona, gobernado por Ada Colau con el apoyo del
PSOE, hay unos lazos amarillos que lo que hacen es insultar al Estado de
Derecho y a la democracia diciendo que hay presos políticos, cuando lo
que son es políticos presos". Según el alcalde, Madrid tiene claro su
"compromiso con España como capital de la nación". “Hay un intento de ocultación de la bandera LGTB. Es bastante
evidente la maniobra. Hay que recordar que en nuestra etapa había diez
banderas de España en el propio Ayuntamiento y en la fuente de Cibeles. Ahora añaden esta otra en el lugar que tradicionalmente ha ocupado la
bandera LGTB, que es el lugar más visible, en la fachada de Cibeles”,
ha dicho José Manuel Calvo, concejal de Más Madrid. “La ponen en un
lugar mucho menos visible, en un momento en que tenemos que reivindicar,
creo, los derechos de las personas LGTB, y eso es lo que el
Ayuntamiento de Madrid tiene que priorizar. No esperábamos eso de este
gobierno, claro. Tiene que seguir haciendo guiños a Vox y al final vemos
que es la ultraderecha, con esos cuatro concejales, quienes están
marcando la agenda del gobierno”, ha añadido Calvo. A pesar de que la
capital es una ciudad abierta y tolerante, las agresiones lgtbfóbicas no
cesan: el Observatorio Madrileño contra la Homofobia registró 345 agresiones en 2018, un 7,5% más que el año anterior.
Cronología de la reivindicación del Orgullo en Madrid
El primer Orgullo se celebró en Madrid en el año 1978. Un año
después, se legalizó la homosexualidad en España aunque no hasta 1995 no
se eliminaron todas las leyes homófobas. Aquí puedes ver un recorrido histórico en fotos.
El matrimonio igualitario se aprueba en España en 2004 gracias al
impulso del PSOE y con Rodríguez Zapatero como presidente.
El PP
recurrió la norma al Tribunal Constitucional y organizó manifestaciones
en contra de la misma en Colón.
En 2007, Madrid se convirtió en la capital europea del colectivo
LGTBIQ al acoger el Euro Pride.
El Orgullo de Madrid se convierte en un
referente.
La bandera arcoíris no lució en las instituciones hasta 2015. Tras
24 años de alcaldes del PP, Manuela Carmena (Ahora Madrid) se hizo con
la alcaldía y colocó la enseña. La Comunidad, gobernada por la popular
Cristina Cifuente (PP), también lució bandera.
En 2017, Madrid acoge el Orgullo Mundial (World Pride).
El Tribunal de Casación francés ha abierto la vía este viernes a que
los médicos puedan desconectar a Vincent Lambert. Consideran que el
tribunal de apelaciones de París, la instancia previa que había frenado
esta opción, no tenía competencia para ordenar el mes pasado la reanudación de sus cuidados. El fallo de la máxima instancia judicial de Francia da de nuevo la
opción de que este enfermero psiquiátrico francés de 42 años, en estado
vegetativo y tetrapléjico desde hace más de una década, pueda ser
desconectado de las máquinas de alimentación e hidratación que lo
mantienen con vida. Eso, una muerte digna para dejar de vivir “como un vegetal”,
es lo que su mujer y tutora legal, Rachel Lambert, así como buena parte
de sus familiares y amigos aseguran que era la voluntad de Vincent. El
problema es que no lo dejó por escrito en un testamento vital. Y sus
padres, católicos tradicionalistas, se oponen frontalmente a lo que
consideran una eutanasia “encubierta” y llevan años intentando impedir
en los tribunales que se ponga fin a sus cuidados.
“Se anula la sentencia del tribunal de apelaciones sin
remisión del caso a un nuevo juicio”, dijo el Tribunal de Casación en un
fallo ampliamente esperado.
La orden judicial obligó a los médicos de
Lambert a volver a conectarlo a las máquinas que le habían retirado esa misma mañana
y a interrumpir también la sedación profunda a la que había sido
sometido conforme al protocolo de fin de vida que establece la
legislación francesa para que no sufriera hasta su muerte, que se
calculaba sucedería en los días siguientes.
Con la decisión ahora del máximo tribunal francés, que no entra en
cuestiones de fondo —ni tampoco sobre si la petición del comité de la
ONU es vinculante o no, como dice el Gobierno de Emmanuel Macron— “se ha
llegado al final del camino” judicial, afirmó a las puertas del
tribunal Patrice Spinosi. Es el abogado de la mujer del enfermero,
Rachel Lambert, quien no acudió a París a escuchar el fallo. “Esto es el final de este litigio, ya se ha recurrido a todos los jueces franceses y europeos
(…) ya no queda ningún recurso que pueda hacerse para suspender la
desconexión” de Vincent Lambert, insistió. Y estimó que el hospital de
Reims, donde se encuentra el paciente, puede decidir desconectarlo en
cualquier momento “a partir de ahora”. “Si el doctor Sanchez pretende volver a iniciar el proceso para
asesinarlo, además de medidas disciplinarias y de medidas penales por no
asistencia a una persona en peligro, también deberá afrontar una
demanda civil por asesinato con premeditación sobre una persona
vulnerable”, advirtió Triomphe, quien adelantó que la madre de Vincent
Lambert, Viviane, hablará el próximo lunes ante el Consejo de Derechos
Humanos de la ONU en Ginebra.
Sin embargo, los abogados de los padres de Lambert aseguraron que no
tirarán la toalla en lo que definieron como un “combate político”. “Claro que es un combate político.
Cuando vemos que todo un Estado desencadena sus considerables recursos
humanos, financieros, políticos para ensañarse contra un hombre (…) yo
digo que Francia no merece más llamarse el país de los derechos
humanos”, afirmó Jérôme Triomphe, un letrado vinculado a movimientos de
extrema derecha y ultracatólicos como los padres de Lambert. Junto con el otro abogado de los padres, Jean Paillot, Triomphe
amenazó al jefe del equipo médico encargado de Lambert, Vincent Sanchez,
con acusarlo de “causar la muerte” de Lambert si vuelve a iniciar el
protocolo de fin de vida del enfermero.