Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

28 feb 2017

Los chicos de ‘Moonlight’, modelos sexis de Calvin Klein

Horas después de que la cinta lograra el Oscar a mejor película, sus protagonistas se muestran como modelos de ropa interior.

Mahershala Ali, Alex R. Hibbert y Trevante Rhodes.

 

El mundo se fue a dormir el domingo por la noche sabiendo que Moonlight ganó el premio a la mejor película en los premios de la Academia y amaneció está mañana descubriendo que el reparto de la película es protagonista de la campaña de publicidad Calvin Klein Underwear.
 La firma cuenta con el ganador del Oscar Mahershala Ali que aparece junto a Ashton Sanders, Trevante Rhodes y Alex Hibbert, los tres actores que compartieron el papel de personaje principal. Todos ellos se muestran en modelos en las imágenes captadas por Willy Vanderperre. Rodas, un exvelocista antes de convertirse en un actor, es quien ofrece la pose más provocativa.
 
Mahershala Ali, Alex R. Hibbert y Trevante Rhodes.

Es la primera campaña de moda para los tres actores, y es también la primera campaña de ropa interior de celebridades presentada para la marca emblemática desde que Raf Simons se hizo cargo del puesto de director creativo.
 En la campaña aparece el nuevo logotipo de Calvin Klein.
Ya sobre la alfombra roja de los premios de la Academia Sanders, Rhodes y Hibbert se presentaron con trajes de Calvin Klein, mientras que Ali optó por Zegnaa.
 Naomi Harris también llevó un diseño de Calvin Klein.


El primer premio de la ceremonia de los Oscar 2017 también supuso un hito en la historia de los galardones de la Academia de Hollywood: Mahershala Ali se convirtió el primer actor musulmán en ganar una estatuilla dorada. 
Moonlight, además de ganar en los Oscar triunfó en los galardones de Espíritu Independiente, donde se hizo con cinco estatuillas.
 La película se centra en la vida de un joven afroamericano que se cría en los suburbios de Miami, y lo sigue desde la infancia hasta la edad adulta.
 Con tres actores distintos para el mismo personaje (Alex Hibbert, Ashton Sanders y Trevante Rhodes, uno por capítulo), el protagonista, Chiron, pasa de ser un niño inseguro a un joven que se interroga sobre su sexualidad hasta finalmente convertirse en un adulto. 
Naomie Harris y Mahershala Ali también integran un reparto dirigido por el cineasta y guionista Barry Jenkins.
 El drama, producido por 1,42 millones de euros se rodó en tres semanas.

Qué final tan jocoso y cruel................................. Carlos Boyero.



Aunque los párpados supliquen que los cierres porque dentro de poco amanecerá y notes los primeros efectos del cóctel químico que garantiza tu sueño, percibo en un principio la llegada del estupor, después un ataque de vergüenza ajena y finalmente un estallido de risa que logra que me caiga del sofá.
 Posteriormente, me embarga cierta piedad hacia aquellos desdichados convencidos de que iban a tocar el cielo y a los que un equívoco surrealista les envió al infierno.
 Estoy hablando del gag más cruel que ha perpetrado la historia de los Oscar
. El apergaminado Beatty, sí, aquel hombre en cuyas afrodisíacas y saciadas yemas de los dedos quería reencarnarse Woody Allen, hace gestos raros al abrir el sobre que contiene el título de la gran triunfadora.
Pero ladinamente le pasa el marrón a Bonnie Parker para que se lo coma ella.
 Salen los eufóricos productores de La La Land, mogollón de gente con comprensible hambre de gloria y de pastón y cuando llevan siete minutos entonando el capítulo de múltiples agradecimientos y tributos les comunican que el sobre estaba equivocado, que el Oscar a la mejor película le corresponde a Moonlight.
  El productor Jordan Horowitz reacciona con elegancia.
 Asegura a sus rivales que no hay ningún problema, que suban al escenario y que disfruten de su galardón.
 Así lo hacen, pero estos no le dedican ni una palabra de consuelo, ni un detalle generoso a los damnificados por el hilarante equívoco. Cada uno a lo suyo.

Aunque la comicidad del final de la gala fuera insuperable, también han existido otros momentos graciosos en ella.
 Los guionistas se han esforzado y el presentador es tan natural como competente. 
Era muy divertido ver el alucinado careto de esos turistas de Los Ángeles a los que introducen sorpresivamente en la Academia, su pasmo y su regocijo al constatar que están al lado de sus dioses e incluso pueden tocarlos.
Esperaba que el tono y el ingenio de los asistentes al referirse a la mayor pesadilla que sufre su país (de acuerdo, se la buscaron ellos a través de las sagradas urnas) y que acabará afectándonos al resto del mundo sensato fuera más vehemente, e incluso incendiario, pero a excepción de Gael García Bernal, la portavoz del director iraní Asghar Farhadi y el irónico speech de Jimmy Kimmel, no hubo más noticias del gorila siniestro.
Celebro que a la perturbadora, arriesgada, honda y sutil Moonlight le correspondiera la parte del león.
 La estimable La La Land no puede quejarse: los premios que le otorgaron son justos, pero también suficientes. 
Y no le hicieron ni puñetero caso a Comanchería, la película norteamericana que más y mejor me ha hecho vibrar este año, junto a la insólita y poética Paterson. 
La también misteriosa y espléndida La llegada fue ignorada.
 Su calidad permanecerá intacta, pero los criterios de la Academia seguirán siendo discutibles.

Y encuentro dos notables disparates en los galardones más prestigiosos y rentables del cine. 
Uno es el Oscar al mejor guion a esa cosita atormentada y cansina titulada Manchester frente al mar, pretenciosa hasta el mareo detrás de su esforzado realismo, falsamente trágica, aburrida hasta la exasperación, planificada al gusto de paladares vanguardistas que se pretenden exquisitos aunque sean grotescos.
 Y tampoco puedo entender el Oscar al insoportable Cassey Affleck y su gestualidad permanentemente psicópata e intensa. 
Es un actor al que pagaría por no verle.
¿Y momentos emocionantes en esta edición? El mío está claro. 
Ver y escuchar a esa impresionante señora y actriz excelente llamada Charlize Theron rindiendo tributo de admiración y de amor a Shirley MacLaine en El apartamento. 
 La vejez ha tornado diminuto y frágil el aspecto de la señorita Kubelik.
 Da igual. La seguimos amando.
 La amaremos siempre. Aunque desde hace muchos años solo le interese la espiritualidad a mujer tan terrenal.

27 feb 2017

De una vez por todas: cómo repartir los hidratos, proteínas y grasas a lo largo del día

Distintos expertos en nutrición construyen la guía definitiva para saber qué hay que comer en cada momento de la jornada.

 
"Desayuna como un rey, almuerza como un príncipe y cena como un mendigo". 
Este es uno de los dichos del refranero español que nos dictan cómo tenemos que repartir la comida a lo largo del día. Otro: "De grandes cenas están las sepulturas llenas".
 Estas recomendaciones de la cultura popular nos dejan clara una tendencia a optar por cenas frugales, desayunos copiosos y almuerzos equilibrados.
 ¿Tiene algún sentido que el modo en que nos alimentamos dependa de la hora del día?
 
Juan Antonio Madrid, catedrático de Fisiología y director del laboratorio de Cronobiología de la Universidad de Murcia, una disciplina que entronca con la fisiología, la endocrinología y la medicina, asegura que sí: “No solo es importante controlar la cantidad y el tipo de alimento que ingerimos, sino también cuándo lo ingerimos. 
El momento del día o de la noche en el que nos alimentamos influirá en cómo vamos a aprovechar y metabolizar el alimento. Por un lado el apetito cambia a lo largo del día y la noche, de acuerdo con nuestros ritmos circadianos, determinados principalmente por factores externos como la luz solar, pero por otro, la ingestión de alimento a horas inadecuadas, puede alterar el funcionamiento de nuestro relojes biológicos".
“Estos ritmos son progresivos, no es darle a un botón”, matiza Rubén Bravo, experto en nutrición y portavoz del Instituto Médico Europeo de la Obesidad (IMEO), adelantándose a una de las críticas más habituales que se realizan a esta corriente de la nutrición.
 "Nuestro cuerpo no se reinicia a una hora en concreto convirtiendo, por ejemplo, todos los carbohidratos no utilizados en grasa".
 De hecho, a este respecto el dietista-nutricionista Aitor Sánchez cuenta en su libro Mi dieta cojea (Paidós):
 "Los hidratos de la cena repondrán el glucógeno gastado durante el día en nuestra actividad cotidiana.
 Es así, siempre y cuando hayamos practicado algo de actividad física durante el día y no lo hayamos repuesto en otras comidas. [...] Si tomamos un exceso de hidratos con las reservas medio llenas, guardaremos el exceso en grasa, independientemente de que sea por la noche o no".

“Todas las comidas deben tener un poco de proteína, un poco de carbohidratos y un poco de grasa, lo que cambian son los porcentajes”, asegura Bravo. 
Para Madrid, “queda aún mucho por estudiar en relación con la cronobiología de los diferentes nutrientes”, pero mientras tanto, expertos en nutrición nos dan algunas pistas sobre cómo combinar los alimentos en esos momentos del día en los que nos preguntamos: ¿y a esta hora, qué como?

Desayuno: priorice los hidratos integrales

Para Rubén Bravo, en el terreno nutricional hay dos fases diferenciadas durante el día: activación y recuperación.
 Ambas estarían marcadas por la luz solar y durarían aproximadamente unas 12 horas cada una: de 6 de la mañana a 6 de la tarde la primera y de 6 de la tarde a 6 de la mañana la segunda. Este experto afirma que los carbohidratos son preferibles por la mañana por una cuestión de “demanda energética: aportan más energía y más rápida que las grasas o las proteínas”: por ejemplo, tomar una tostada o unos copos de avena. 
El experto recomienda que provengan de productos integrales, es decir, los elaborados a partir del grano entero del cereal y que se encuentran en el pan, la pasta o los cereales integrales. 
Para Sánchez esta segunda parte es la más importante: "En lugar de centrar tanto la atención en el momento de consumo (mañana, tarde o noche), hemos visto que es más conveniente considerar la situación de partida de cada persona.
 Pero si tuviéramos que remarcar algo desde el punto de vista de salud, sería recordar que lo crucial es que esos hidratos de carbono sean de calidad".

Ángela Quintas, química y experta en Nutrición Química, explica detalladamente el proceso por el que, tras el consumo de hidratos, nuestro organismo normaliza los niveles de glucosa en sangre: “Cuando estos se elevan, después de desayunar, las células beta del páncreas secretan insulina para volver a normalizarlos.
 Para conseguirlo, una parte de esa glucosa se almacenará en el hígado y en el músculo en forma de glucógeno para ser utilizado más adelante, cuando sea necesario. 
El resto se convertirá en grasa mediante la lipogénesis”. Por eso Quintas recomienda además acompañar estos hidratos con algo de proteína. "Estas estimulan la secreción de una hormona llamada glucagón que tiene un efecto antagónico a la insulina, lo que atenúa el pico de insulina que se produciría al ingerir los hidratos de carbono solos”.

Para picar por la mañana: carbohidratos con proteínas

Además del desayuno, la comida y la cena, es recomendable adaptar lo que tomamos a media mañana y a media tarde a nuestros ritmos.
 Bravo recomienda: "A mitad de mañana, una pieza de fruta, que es un aporte sano de carbohidratos, acompañada de un yogur". 
 Según Ángela Quintas, un yogur natural (o cualquier otro lácteo) contiene hidratos y proteínas, que atenúan la elevación repentina de la insulina (el subidón de azúcar).

 

Miguel Bosé a México: “Tengo una gran deuda con este país”

El cantante ha visitado un centro de menores en Yucatán donde presenció un ritual religioso típico y habló de la importancia de la formación para el desarrollo de la nación.

Miguel Bosé, en el Zócalo de la Ciudad de México. AFP

 Miguel Bosé se encuentra en México de gira. El cantante siempre ha declarado su amor por el país azteca y su cultura por eso no sorprende que, durante su visita a Yucatán, haya dedicado algunas horas para inaugurar formalmente la Casa del Niño Indígena Miguel Alemán Valdez.

Tengo una deuda muy grande con este país y creo que jamás voy a poder pagarle, pero esta es una manera de hacer algo por su historia, sus raíces, su diversidad y su riqueza.

 Cada vez que inauguro un albergue voy curioso, entusiasta y expectante de ver qué es lo que va a pasar”, dijo Bosé a medios locales mexicanos. 

Bosé acudió como presidente honorario de la Fundación Patrimonio Indígena MX, y aprovechó el espacio para declararse gran admirador de la cultura maya.

 Como parte del recorrido el intérprete tuvo la oportunidad de presenciar una ceremonia religiosa típica, también jugó con los niños, intentó aprender a colgar una hamaca: “Tengo una hamaca hecha en Venezuela, suelo acostarme en ella, pero no aprendí a guindarla”, dijo entre risas.

 También probó los antojitos típicos regionales y recorrió los dormitorios y estancias de la Casa del Niño Indígena Miguel Alemán Valdez.

 El músico, además, conoció el proceso de purificación de agua y la elaboración de panes en hornos de piedra y gas.

El intérprete de Como un lobo se mostró feliz con el avance del centro y habló de la importancia de trabajar para dejar un mundo mejor: “Quiero dejarle un mundo mejor a mis hijos, desgraciadamente en estos años ha habido actos que han deteriorado el estado de las cosas. 

 No les voy a dejar el mundo que hubiera querido, pero voy a intentar dejarles el mejor posible, por eso trabajo todos los días y contagiar a la gente”, añadió. 

El centro acoge a 80 niños de primaria, y jóvenes de secundaria y bachillerato. Es más, uno de los avances más significativos de la Casa del Niño Indígena es el aula tecnológica.

 Durante su discurso Bosé le pidió a los niños que se apoderaran de los espacios, y aprovecharan la oportunidad para crecer y mejorar. 

"De los millones y millones de personas que viven en las comunidades indígenas de este país, muy pocos tienen la posibilidad de acceder a estudios, formación en oficios, trabajo y un futuro, por lo que es algo que deben de tomar muy en cuenta", indicó.

 

"Me tienen que prometer que van a estudiar mucho y lo harán bien, porque son niños y niñas muy privilegiados porque hoy tienen cosas que muchos otros quisieran tener y que no tienen, por ello cuiden sus hamacas, sus armarios, sus libros, sus juguetes, las cocinas, los baños, a sus profesores y cuidaos los unos a los otros", añadió.
Los niños del centro aprovecharon la visita de Miguel Bosé para darle una sorpresa. 
El coro interpretó en maya las canciones Te Amaré y Aire Soy. El cantante pidió que le hicieran llegar la letra en este idioma indígena para que en una próxima visita pueda cantarlas junto con ellos.