Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

31 ago 2014

Siempre quedará La Habana............................ Gregorio Belinchón

Llega a Venecia ‘Retorno a Ítaca’, la película que el francés Laurent Cantet ha rodado en Cuba con el escritor Leonardo Padura de coguionista.

 

El director Laurent Cantet. / ricardo gutiérrez

Han pasado 16 años desde que Amadeo se fue de Cuba a España.
 Dejó atrás a sus amigos, a su esposa y una incipiente carrera de escritor. No volvió ni cuando el cáncer devoró a su mujer.
 Ahora sí, ahora ha retornado, tras un viaje interior que esconde a sus amigos, reunidos en una azotea en La Habana, el mismo sitio donde montaban sus fiestas de adolescentes, en la terraza en la que bebieron, bailaron y fantasearon con cambiar el mundo.
 Hoy reciben al hijo pródigo, pero también es momento de echarse en cara todo lo que no se dijeron porque eran jóvenes o porque estaban ausentes.
 Y de fondo, Cuba, su isla, su dictadura, los miedos y las privaciones que atenazan a sus habitantes. Retorno a Ítaca, estrenada en el Festival de Venecia, demuestra que los Ulises de turno no tienen por qué ser felices cuando pisan de nuevo la tierra prometida.
Laurent Cantet, Palma de Oro en Cannes con La clase, ya había rodado en ese país uno de los episodios de Siete días en La Habana, y así conoció al escritor Leonardo Padura, convertido ahora en coguionista de su nueva película.
El francés era uno de los pocos que se salvaba de aquella apuesta mostrando un conocimiento asombroso del paisaje y del paisanaje cubano… o se había asesorado bien. En Retorno a Ítaca ocurre lo mismo.
 Su arranque provoca cierto miedo, ante la posibilidad de devenir en otra película que pareciera teatro filmado.
 Lo que vamos a ver va a ser una noche de amistad y añoranzas, de lingotazos de whisky y frijoles negros, de reproches, mentiras y confesiones, de una oscuridad emocional que puede que solo aclare el amanecer
. Cantet no se permite fruslerías visuales.
 Sí, hay alguna escapada, aunque solo sea para mostrar otras terrazas, parecidos mundos, atmósferas similares.
 Sin embargo el drama está en la charla entre esos cinco amigos –cuatro hombres y una mujer- que ven acercarse a pasos agigantados la tercera edad, que empiezan a hacer cuentas sobre sus decisiones vitales –esto suma, esto resta-, y que en resumen simbolizan a los habitantes de Cuba hoy en día, con un régimen político, aseguran en uno de los diálogos, que no sabe hacia dónde virar, con una cotidianeidad sepultada por el manto de la desesperanza.
Ellos querían crear arte y acabaron trapicheando.
 Deseaban construir un mundo mejor y ahora ni siquiera su propia ciudad se tiene en pie.
 Padura habla de la marca del miedo, pero ante todo de cinco personas
. Los actores –el más conocido, Jorge Perugorría, que aporta un detalle reseñado en los títulos de crédito: el cuadro del que se enorgullece uno de los personajes en realidad lo ha pintado él en la vida real; también está Isabel Santos- van creciendo con las palabras de Padura y Cantet (el cineasta ha aprendido castellano para esta experiencia).
 Y al final queda el placer de ver cómo dos artistas como esta extraña pareja han sabido sacar partido de sus diferencias y de sus similitudes.
 Es injusto que ‘Retorno a Ítaca’ haya tenido su estreno en una de las secciones menores de la Mostra, en Venice days.
Cosas de los agentes de ventas internacionales.

Veo veo.....Pablo Neruda .......................... Agua sexual

Pablo Neruda





Agua sexual







Rodando a goterones solos,
a gotas como dientes,
a espesos goterones de mermelada y sangre,
rodando a goterones,
cae el agua,
como una espada en gotas,
como un desgarrador río de vidrio,
cae mordiendo,
golpeando el eje de la simetría, pegando en las costuras del
alma,
rompiendo cosas abandonadas, empapando lo oscuro.

Solamente es un soplo, más húmedo que el llanto,
un líquido, un sudor, un aceite sin nombre,
un movimiento agudo,
haciéndose, espesándose,
cae el agua,
a goterones lentos,
hacia su mar, hacia su seco océano,
hacia su ola sin agua.

Veo el verano extenso, y un estertor saliendo de un granero,
bodegas, cigarras,
poblaciones, estímulos,
habitaciones, niñas
durmiendo con las manos en el corazón,
soñando con bandidos, con incendios,
veo barcos,
veo árboles de médula
erizados como gatos rabiosos,
veo sangre, puñales y medias de mujer,
y pelos de hombre,
veo camas, veo corredores donde grita una virgen,
veo frazadas y órganos y hoteles.

Veo los sueños sigilosos,
admito los postreros días,
y también los orígenes, y también los recuerdos,
como un párpado atrozmente levantado a la fuerza
estoy mirando.

Y entonces hay este sonido:
un ruido rojo de huesos,
un pegarse de carne,
y piernas amarillas como espigas juntándose.
Yo escucho entre el disparo de los besos,
escucho, sacudido entre respiraciones y sollozos.

Estoy mirando, oyendo,
con la mitad del alma en el mar y la mitad del alma
en la tierra,
y con las dos mitades del alma miro al mundo.

y aunque cierre los ojos y me cubra el corazón enteramente,
veo caer un agua sorda,
a goterones sordos.
Es como un huracán de gelatina,
como una catarata de espermas y medusas.
Veo correr un arco iris turbio.
Veo pasar sus aguas a través de los huesos.

Aunque lo digan , no es el nuevo guapo del cine español, podría serlo, es aún muy pibe, un alumno de FP, vaya que estudiaba electricidad y fue a hacer un casting....el resultado ya lo ven...

Los que han trabajado con él le describen como un tipo “tranquilo, sereno, calmado, adulto… No es el típico andaluz con el que te mueres de risa, es mucho más reservado”. Un chico que se ha lanzado al proyecto de lleno y que “no ha pedido que le doblen en ninguna las escenas de la película”, algunas de ellas entrañan riesgo. Esto, sumado a su porte, le ha valido para ganarse el apodo de Steve McQueen entre sus compañeros.

En cuanto a su belleza, es algo que salta a la vista: piel bronceada, barba de tres días y unos ojos azul grisáceo de los que no se olvidan con facilidad. Su cara está impresa en los cárteles de la película y el tráiler comienza a hacer que te familiarices con él, así que en cuestión de un mes –la película se estrena el próximo 29 de agosto- este chico anónimo de 21 años se convertirá en uno de los rostros más conocidos de nuestro país.

Actores en el panorama cinematográfico español Ojos Verdes, Ojos azules....guapos y pibitos...