Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

30 ene 2012

Irán, La Tormenta Solar.......

Irán, la tormenta solar, los cataclismos...


Nos había dicho que 2012 iba a ser un año complicado, tanto que algunos incluso anunciaron el fin del mundo. Ahora resulta que no, que lo del calendario maya es el final de una manera de contar el tiempo, y que el 21 de diciembre el mundo no va a acabarse. Pero no dejan de atormentarnos con amenazas, unas reales y otras posibles. El pulso que la UE está echando a Irán con el embargo es uno de los problemas, porque en Teherán dicen que van a dejar de suministrar petróleo a Europa. Estas cosas me confunden, porque si cortas el comercio con un país no entiendo cómo es que sigues comprándole petróleo.
zzvtttttt.JPGLuego está la supuesta tormenta solar, que por lo visto no ha sido para tanto, pero los cientificos se empeñan en anunciarnos que como se produzca una como la que hubo en el siglo XIX esto va a ser el caos porque hoy dependemos más de las tecnologías de la comunicación. Miras los canales de pago que contratas para huir de la telebasura, y te cuecen a documentales sobre exterminadores nazis, volcanes apocalípticos que pueden reventar en cualquier momento, oscurecer el Sol con sus cenizas y finiquitar la vida, asteroides o meteoritos que pueden impactar contra La Tierra con efectos devastadores, ciudades en guerra urbana tomadas por las bandas, historia-ficción sobre los efectos de un ataque terrorista a centros de energía que nutren grandes ciudades... Vaya, que parece que existe la consigna de repartir miedo. Y, mira, yo estoy seguro de que no va a ocurrir ningún desastre bíblico porque las cadenas de televisión no están pujando por los derechos para televisarlo.

29 ene 2012

La vida es un disfraz

La actriz estadounidense Glenn Close protagoniza y da vida a 'Albert Nobbs', una mujer que se ve forzada a hacerse pasar por hombre para poder ganarse la vida en el Dublín de la poca victoriana.

Consciente del poderío de un personaje cargado de matices, Glenn Close lleva agarrada a Albert Nobbs desde 1982, año en el que lo interpretó por primera vez en el teatro.
Sin embargo, la actriz ha tenido que esperar casi 30 años para llevarlo al cine, tras muchos esfuerzos, en una película en la que ella lo es todo: actúa, produce y participa en el guion. Close es Nobbs
. Nobbs es Close. No hay más, quizá porque la historia, de inmensas posibilidades, se queda a mitad de camino de todo.
De la profunda reflexión moral o social. También de la emoción de una de esas historias más grandes que la vida: la de una mujer que durante años se hace pasar por un hombre para poder ganarse el sustento en el Dublín de la época victoriana; una especie de mayordomo de un pequeño hotel que, atrapado en un cuerpo ficticio, comienza a dudar de su propia condición.
Apariencia de poder masculino frente a la opresión social femenina.
Apariencia de convención afectiva frente a la represión (homo)sexual.
Un pedazo de personaje cuyo disfraz se ha convertido en una prisión. Sin embargo, Albert Nobbs, la película, no tiene el fuelle de su criatura.
ALBERT NOBBS




Da la impresión de que por el largo proceso de preproducción han pasado demasiadas manos. Según los créditos, se supone que István Szabó, especialista en vidas artificiales, en existencias de doble capa (Mephisto, Taking sides), creó un relato basado en la novela original, La vida singular de Albert Nobbs, de George Moore, publicada en 1928, y que de ese relato partió Gabriella Prekop, su colaboradora habitual, para confeccionar un guion que, más tarde, han variado Close y John Banville. Pero el resultado, adocenado por una puesta en escena de Rodrigo García cercana a un lujoso telefilme, pero poco más, es un tanto alicorto. Aunque se aborden temas tan singulares para la época como el matrimonio homosexual, no hay un verdadero análisis y Albert Nobbs se convierte en una obra casi conceptual, de pincelada impresionista, que en última instancia pide ayuda al melodrama al ser consciente de su propia frialdad.

 

¿Qué fumó Demi Moore la noche en que fue ingresada?La grabación de la llamada recibida en los servicios de emergencia revela la gravedad del estado

La grabación de la llamada recibida en los servicios de emergencia revela la gravedad del estado.

 

Demi Moore sufrió convulsiones después de fumar una sustancia no revelada.

Así se desprende de la llamada efectuada desde el domicilio de la actriz en Los Ángeles a los servicios de emergencia en la madrugada del pasado lunes y ahora desvelada.


La persona informante describió a Moore, de 49 años de edad, como "semi-consciente y con problemas para respirar"
. A preguntas de los servicios de emergencias, la mujer que da información sobre la actriz identificada como Ru- podría ser una de las hijas de Moore llamada Rumer-, añade:"La respiración no es normal. Tiene convulsiones, mucha agitación, está ardiendo"
Cuando la operadora le pregunta si Moore ha ingerido o fumado alguna sustancia, la mujer responde: "Fumaba algo que no era marihuana, pero es similar al incienso.."
"Ella ha tenido algunos problemas últimamente con otras cosas", añadió la informante.
Preguntada por el operador si Demi Moore había vivido una situación similar antes, la voz femenina respondió: "Ha habido algunas cosas recientemente que todos estamos descubriendo."
Al final de la llamada, el estado de Moore parece mejorar. Entonces un hombre le dice al operador desde el otro lado del teléfono:
"Parece que se han calmado ahora ella está hablando."
El agente de la actriz aseguró el pasado miércoles al conocerse el ingreso de la actriz, que se había producido horas antes que se debía a "una crisis de agotamiento".
Ayer llegó a Los Ángeles, procedente de Braisl, Asthon Kutcher, el ex marido de Demi Moore del que se separó en noviembre pasado.
"Él está apoyándola aunque su relación ha terminado", ha informado un portavoz del protagonista de Dos hombres y medio. Moore estuvo casada antes con el actor Bruce Willis, con quien tuvo tres hijas Rumer, Scout y Tallulah Belle.

Brad Pitt habla de sus planes de boda

Brangelina, ese binomio tan rentable para las revistas rosas formado por los actores Angelina Jolie y Brad Pitt, podría por fin dejar de vivir en pecado. Aunque llevan siete años juntos y tienen seis hijos en común, la pareja no está casada. Fue una decisión que tomaron para demostrar su compromiso hacia aquellas parejas, las homosexuales, que pese a amarse no pueden sellar su relación legalmente en EE UU. Cuando comenzaron a convivir afirmaron que no intercambiarían anillos hasta que todos, sin excepciones, pudieran hacerlo. Pero según la larga entrevista con Pitt que lleva en su portada la revista Hollywood Reporter, la pareja está ansiosa por sellar su relación.
"Nos gustaría hacerlo y además significa mucho para nuestros hijos.
Declaramos hace tiempo que no lo haríamos hasta que todo el mundo pudiera. Pero no creo que podamos aguantar mucho más. Significa mucho para los niños y nos lo preguntan constantemente.
Y también significa mucho para mí, comprometerme de esa manera". En la entrevista Pitt se niega a decir si ya se lo ha pedido oficialmente, pero apostilla: "Estar enamorado de alguien y formar una familia con esa persona y querer casarse y no poder hacerlo es absurdo, simplemente absurdo", exclama. Además, en la entrevista no descarta la posibilidad de adoptar otro hijo
. "En casa ahora hay mucho equilibrio, pero si vemos que se ilumina la bombilla y vemos que podemos ayudar a una persona, lo haremos".
Se trata de una entrevista inusual por la cantidad de información privada que desvela: entre otras cosas confiesa como la fama le llegó a afectar y deprimir hasta tal punto en los noventa que lo único que hacía era "fumar porros sin parar, tirado en un sofá mientras me transformaba en un donuts".
Consiguió salir de aquella depresión después de varios viajes que le hicieron darse cuenta de las condiciones infrahumanas en las que se vive en diferentes partes del mundo. "Decidí dejar completamente la hierba, más o menos, levantarme del sillón".
Ahí comenzó su interés por el trabajo humanitario, algo que fue fundamental para unirlo a Angelina Jolie.
El actor, que atraviesa un momento dorado de su carrera, es candidato a dos Oscar, uno como protagonista de Moneyball y otro como productor del mismo filme, y aún podría ser candidato a un tercero como productor de El árbol de la vida.