El último
informe policial incorporado al sumario la sitúa en las reuniones en las
que se decidió favorecer con contratos públicos a una empresa que hizo
campañas electorales al PP.
La expresidenta madrileña Esperanza Aguirre
participó en reuniones de altos cargos de su Ejecutivo en las que
supuestamente se acordó favorecer con contratos públicos a una empresa
de publicidad que trabajó en sus campañas electorales de 2003 y 2007, según un informe de la Guardia Civil incorporado al sumario del caso Púnica
el 25 de marzo. Es la primera vez que un documento policial implica a
la exlíder popular en amaños de la trama. A preguntas de este diario,
Aguirre negó su participación en actos ilegales. En la causa ya están
imputados sus dos hombres de confianza: Ignacio González y Francisco
Granados.
El informe, de 205 folios y 14 tomos de anexos, analiza
exhaustivamente “las relaciones comerciales de la Comunidad de Madrid y
otras administraciones públicas madrileñas” con las sociedades de marketing
y publicidad del empresario argentino Daniel Horacio Mercado. Los
agentes concluyen que el Gobierno regional que encabezaba Aguirre
utilizó “la publicidad institucional [...] con el único objetivo de
encumbrar la gestión de dirigentes autonómicos del PP regional al frente
de las instituciones, todo ello sufragado con fondos públicos”. Mercado, imputado tanto en el caso Púnica como en el sumario
sobre la financiación irregular del PP balear en la etapa de Jaume
Matas, fue el principal beneficiado de esas supuestas irregularidades. Su entramado de empresas recibió contratos por un valor superior a los
7,4 millones de euros. El documento policial destaca que, para beneficiar a Mercado, el
Ejecutivo de Aguirre modificó en 2006 varias leyes autonómicas para que
cualquier adjudicación, tanto de las consejerías como de empresas
públicas y órganos autónomos de la Comunidad de Madrid, necesitase la
“autorización previa” de la Vicepresidencia del Ejecutivo regional, que
entonces ocupaba Ignacio González, también imputado en la causa. Una vez
modificado el marco legal, supuestamente se impartieron “instrucciones
precisas” a varios consejeros para que las empresas Over Marketing
Comunicación, Traci Comunicación, Abanico de Comunicación y Marketing, y
Link América, todas ellas propiedad de Mercado, fueran favorecidas con
adjudicaciones. Esas instrucciones surgieron de varias reuniones celebradas en fechas
que la Guardia Civil no ha podido concretar, en las que participó
Esperanza Aguirre junto a Ignacio González y Francisco Granados. También
intervinieron en ellas el viceconsejero de Presidencia, Alberto López
Viejo,—actualmente en prisión condenado por el caso Gürtel— y
el consejero de Sanidad Manuel Lamela, así como la responsable de
comunicación de la Comunidad, Isabel Gallego, y el propio empresario. Aguirre fue situada en estas reuniones por dos de los participantes:
Lamela y el propio Mercado. El entonces consejero admitió ante los agentes que, tras recibir estas
indicaciones, dio instrucciones en ese sentido a su asesor técnico. A
partir de ese momento, las cuatro empresas de Mercado se hicieron con
los contratos para la promoción de la construcción de una decena de
hospitales y centros médicos, así como para otras campañas publicitarias
del departamento. Los agentes aprecian delitos de prevaricación,
financiación ilegal, delito electoral, malversación, cohecho, falsedad
documental y tráfico de influencias.
Según recoge el informe de manera destacada, Lamela confirmó en su
declaración como testigo ante la Guardia Civil que en estas reuniones
“se impartieron instrucciones precisas para que se incluyera a Over en
el conjunto de posibles empresas para ser contratadas en materia de
publicidad y comunicación”.
Pedro Sánchez (nacido en Madrid hace 47 años) camina lanzado hacia su primera victoria electoral después de dos durísimas derrotas, una destitución al frente de su partido,
un regreso triunfal en sus segundas primarias y una moción de censura
exitosa. El presidente se prepara para gobernar con Podemos y otros
aliados pero no lo da ni mucho menos por hecho y trata de movilizar para
evitar que la derecha dé el vuelco y sume como en Andalucía. Pregunta. Decenas de miles de jóvenes se manifiestan
en toda Europa y en España porque creen que sus políticos no hacen
frente a un problema gravísimo que es el cambio climático. ¿Por qué no
se habla de temas como este en la campaña electoral ni en los debates? Respuesta. Suele ser un debate que no entra dentro
de las prioridades de la conversación mediática. Pero este Gobierno ha
sentado las bases para esa transición ecológica de la economía. Hemos
aprobado un plan nacional integrado de energía que ha situado en el año
2050 que nuestra economía sea neutra en carbón. En el año 2030 vamos a
tener en torno a un 47% de utilización de energías limpias, frente al
17% que tenemos ahora. P. ¿Cree que los debates fueron espectáculos edificantes? R. Yo creo que todo debate es positivo porque das a
conocer tu proyecto político. Es evidente que la derecha está viviendo
unas primarias. Hay una batalla campal para a ver quién compite por la
medalla de plata, por el segundo puesto. Pero también hay un riesgo
real. Nadie daba que Trump iba a ser presidente de EE UU y lo ha
conseguido. Nadie pensaba que Bolsonaro pudiera ser presidente de
Brasil. Nadie pensaba que en Andalucía iba a gobernar la derecha con la
ultraderecha y lo está haciendo. Tenemos un riesgo real, que sume la
derecha con la ultraderecha y puedan hacer en España lo que están
haciendo en Andalucía. El único partido que puede frenar el paso a la
derecha y a la ultraderecha es el PSOE.
P. ¿Por qué crece tanto Vox? ¿Puede ser una respuesta a la moción de censura? R. No. En las conversaciones que yo tuve con Mariano
Rajoy cuando era presidente del Gobierno, una de las cosas que más me
llamaba la atención es que él ya me hablaba de la ultraderecha en
España, de Vox. Esto no lo he dicho nunca. Cuando Rajoy era presidente,
Vox ya estaba en el radar de la derecha, en sus estudios demoscópicos. Eso tiene mucho que ver con el fracaso del proyecto político de la derecha en cuanto a la regeneración democrática,
en cuanto a la lucha contra la desigualdad, que es uno de los
principales males que tiene nuestro país. Y también su fracaso en evitar
la crispación territorial que se vivió en 2017. La ultraderecha siempre
ha existido en nuestro país, fuera o dentro del PP. Es una amenaza
real, y es una ultraderecha temible, porque estamos hablando de gente
que lleva a franquistas confesos en sus listas, que niega el Holocausto,
que piensa que esto de la violencia de género es un camelo, que el
cambio climático es algo que no existe y que las autonomías tienen que
ser suprimidas. Y resulta que aquellos que se tachan de
constitucionalistas a quien le ponen un cordón sanitario es al PSOE. Con independencia de que en otros momentos, incluso en las próximas
elecciones municipales y autonómicas, haya gente que vaya a votar a
otros, el próximo 28 de abril nos estamos jugando si gana el bloque de
la involución o lo frenamos votando al PSOE.
P. En los debates se le ha visto muy cómodo con Pablo Iglesias. R. Yo con el señor Iglesias y con Unidas Podemos
solamente puedo tener palabras de gratitud. Hay una lección de estos
diez meses y es que la izquierda puede entenderse cuando quiere y hacer
cosas buenas por la mayoría social de este país. Esa es la enorme
oportunidad que tenemos a partir del próximo 28 de abril: dar respuestas
desde la izquierda a los nuevos desafíos de la España del siglo XXI.
P. ¿Y Ciudadanos? R. Hay una enorme decepción. Ciudadanos ha abrazado a la ultraderecha y ha empezado su declive como proyecto político. P. ¿Qué le pasa con Albert Rivera? ¿Es personal? En los debates parece que hay más que política. R. No, en absoluto. P. Estuvieron a punto de hacer un Gobierno y ahora todo el mundo da por imposible… R. Es muy decepcionante. Rivera apareció como un
líder político que venía a regenerar la vida democrática de este país y
acabó votando en contra de la moción de censura. El señor Rivera dice
‘hay que echar a Sánchez, es una emergencia nacional’. Pero también pone
un cordón sanitario en la Comunidad Valenciana o en Madrid. ¿Ángel
Gabilondo también es un peligro público?
P. Si la opción es acuerdo PSOE-Ciudadanos o repetir las elecciones, ¿cambiaría de opinión Rivera? R. El lunes será el lunes, pero antes está el 28 de abril. P. ¿Está utilizando a Vox para movilizar a la izquierda? R. Es evidente que existe una amenaza real y yo no puedo ocultar algo que me parece que es importante que conozcan los españoles.Si el bloque de la involución triunfa, aquí habrá más desigualdad,
volverá la corrupción, porque el PP no se ha regenerado, y se enquistará
la crispación política y la confrontación territorial. Este país
necesita un horizonte de concordia nacional en torno a estos desafíos,
el de la transición ecológica, el de la desigualdad, el del empleo
digno, el de la protección de los autónomos, el de una contribución
positiva de España al proyecto europeo, que está debilitado.
P. ¿Qué le dice Macron sobre Ciudadanos? R. Es evidente que yo tengo buena relación con el
presidente de la República Francesa. No puedo desvelar mis
conversaciones privadas con los líderes europeos. Lo que sí le puedo
garantizar es que en la familia liberal europea hay auténtico estupor
con la actitud de Rivera, no lo comprenden. P. ¿Hay preocupación en los líderes europeos porque exista una fuerza antieuropea potente dentro del Parlamento Europeo? R. Sin duda. Los enemigos de Europa no solamente
están fuera. Están dentro. Hay un movimiento reaccionario. Uno de los
datos que más me ha llamado la atención es que, según una encuesta que
leí hace pocos días, España es el segundo país del mundo donde se es más
pesimista respecto al futuro de nuestros hijos. Ese caldo de cultivo,
ese miedo al futuro, es precisamente lo que alimenta la reacción. Tenemos que luchar todos juntos contra ella.
P. ¿Por qué se niega a una coalición con Podemos?
¿Por qué hay tanta resistencia en España a las coaliciones que es lo más
normal en Europa? R. No me he negado nunca. P. Bueno, ha dicho que quiere gobernar en solitario. Podemos quiere una coalición. R. Los españoles han podido ver que en estos diez
meses nosotros con 84 diputados hemos puesto en marcha el pacto de
Estado contra la violencia de género, hemos regularizado más de 240.000
empleos que eran precarios y ahora mismo son contratos indefinidos,
hemos recuperado el subsidio al desempleo para los parados de más de 52
años, hemos recuperado la cotización a la Seguridad Social de las
mujeres cuidadoras de los dependientes, hemos revertido los recortes
educativos... P. ¿Pero si Podemos le pide entrar en el Gobierno, es un problema para usted? R. ¿Para mí? Vamos a ver. ¿Cómo va a ser un problema para mí gobernar? P. Que entre en el Gobierno Podemos. R. No es ningún problema. La extraordinaria noticia el próximo domingo sería que España continúa avanzando. Yo no tengo un sentido patrimonialista ni tampoco monopolístico del
poder. Pero, insisto, es que el problema no es ese, el desafío que tiene
España no es el 29 de abril, es el 28 de abril. Por eso le decía a
Iglesias, vamos a hablar de que se movilice toda la ciudadanía
progresista.
P. ¿Es inviable gobernar con los independentistas? R. No son de fiar. Ellos saben que la independencia
no es posible. Los líderes independentistas están metidos en su
laberinto, cuando salgan ahí estaremos esperando para poder encontrar un
espacio de diálogo dentro de la Constitución que sirva para resolver un
conflicto de convivencia. Es un laberinto que han creado a base de
mentiras. No podemos hacer descansar el futuro y la estabilidad de
nuestro país en líderes que han demostrado todo menos coherencia. P. Pero si ellos no son de fiar y con Ciudadanos ya
nos ha explicado la situación tan difícil, si con Podemos no le da, ¿con
quién va a gobernar? R. Eso será el 29 de abril. Lo más importante es que el 28 este país siga mirando al futuro. P. ¿Es posible un diálogo en Cataluña sin Ciudadanos?
R. No, pero por eso es importante que también ellos
sientan el reproche de la ciudadanía catalana y de la ciudadanía
española, que les digan por ahí no, no podemos continuar con la
confrontación y la crispación territorial. P. ¿Convocará usted, si es presidente, una mesa para la reforma del Estatuto e invitará a Ciudadanos y al PP a participar en ella? R. El único partido ahora mismo que está defendiendo
el Estado de las autonomías es el PSOE. Ciudadanos, el PP y la
ultraderecha quieren recentralizar competencias. El independentismo y,
desgraciadamente, también Unidas Podemos defienden un referéndum de
autodeterminación en Cataluña, que me parece una enorme equivocación,
porque lo que hace es fracturar aún más la convivencia.
Bill Gates, el empresario tecnológico segundo hombre más rico del
mundo, no se encuentra solo ante la tarea de mejorar el mundo a través
de su fundación. A su lado —que no detrás de él— está Melinda Gates, con la que comparte objetivos, vida y familia desde hace ahora un cuarto de siglo. Una figura quizá más desconocida, la de Melinda, pero cuyo discurso inclusivo, feminista y claramente antiTrump genera gran interés Bill, de 63 años, y Melinda, de 54, tienen tres hijos en común (Jennifer, de 22 años; Rory, de 19; y Phoebe, de 16) y han pasado 25 años juntos. Esas son algunas de las cifras que marcan sus vidas, pero las hay más
mareantes: amasan una fortuna de 86.200 millones de euros, lo que les ha
hecho ser durante 12 años los más ricos del planeta. A lo largo de su vida, han donado 36.000 millones de dólares en acciones a la Gates Foundation. La familia vive en una mansión en Seattle (al noroeste de Estados Unidos) con 24 baños y un gimnasio de 230 metros cuadrados.
Pero los números no lo son todo. Melinda viene de un entorno normal. Nacida en Texas, de padre ingeniero y madre ama de casa, trabajó desde
muy joven para ayudar en casa y contribuir a pagar sus estudios. Por
eso, quizá, no le ha bastado con una gran fortuna, un puñado de lujos y
una retirada a pronta edad para cumplir sus expectativas vitales. Un
viaje a África poco antes de casarse con Bill les abrió los ojos para descubrir lo que era la desigualdad
y ver que había que invertir en todo lo que han invertido. Pero, ¿cómo
se sobrelleva vivir en una casa con cine privado un día y estar al
siguiente ayudando a mujeres a sacar agua sucia de un pozo en un poblado
africano? Melinda Gates trata de tomárselo con filosofía, meditación y
alguna que otra lágrima.
Ella misma contó en una reciente entrevista con el diario británico The Times
que son lecciones que se aprenden. “El mejor modo de llevarlo es vivir
la vida familiar que te gustaría”, explicó. Sin concesiones absurdas.
Sus tres hijos tampoco le dan cancha en ese aspecto. “Si dices algo un
poco fuera de tono o escribes un buen discurso y llegas a casa un poco
hinchada, te van a llamar la atención a la hora de cenar. No creen que
seas tan estupenda”, aseguró.
La educación de sus hijos
Criar a sus chicos así no ha sido fácil. Ha tenido que luchar contra
ella misma (“He trabajado mi perfeccionismo. Ahora lo dejo correr. Sé
que no soy perfecta. Ni siquiera me acerco. Tengo días buenos, días
malos y no pasa nada”), pero también contra los fantasmas de su marido. Él no tenía claro si casarse con ella, pero no por su relación, sino por
ser capaz de “lograr el equilibrio entre trabajo y vida familiar”.
Parece que lo han logrado.
Han educado a sus hijos en la igualdad, la unión familiar, la desconexión
— los móviles, apagados a partir de cierta hora de la noche— y una
herencia de apenas 10 millones de dólares. Han decidido exponerlos lo
justo ante el ojo público. Hay pocas fotos de los cinco juntos y los
escolarizaron bajo el apellido de soltera de su madre, French. “Sueles
darte cuenta pronto de cómo es la gente. Les he enseñado a tener un
radar rápido para saber quien les quiere por sí mismos y quien está
interesado en ver su casa, conocer a su padre…”, aseguró. Melinda Gates se vio sola con el nacimiento de su hija mayor. Invisible. Lo cuenta en su reciente libro (No hay vuelta atrás: el poder de las mujeres para cambiar el mundo,
Editorial Conecta). Pese a que reconoce que convivir con su marido es
fácil, también adaptó sus dinámicas en pos de la igualdad. Por ejemplo,
cansada de ir y venir al colegio de su hija Jennifer
y tardar 45 minutos en el trayecto, le pidió a él que se encargara un
par de veces por semana. Entonces, notaron que cada vez más padres se
responsabilizaban de esa tarea. Ella preguntó a una madre, que
respondió: “Cuando le vimos conduciendo, les dijimos a nuestros maridos:
‘Bill Gates está llevando a su hija al colegio, tú también puedes”. No hay como el ejemplo, más si viene del poderoso. Por eso habla sin
tapujos en libros y entrevistas de repartir la riqueza, de empoderar a
la mujer o del daño que está haciendo Donald Trump. Ella, que lleva 25 años trabajando con demócratas y republicanos, se
dice “terriblemente decepcionada con esta Administración”. “Buena parte
de los servicios de contraconcepción que existen en EE UU han sido
desmantelados”, cuenta a The Times. “Es increíble”. En una época en la que los magnates tecnológicos se han convertido en
las nuevas estrellas cuando se codean con actores, cantantes y políticos
en las fiestas de Hollywood, y sus divorcios llenan las páginas de los
tabloides, Melinda Gates y su familia están en un lugar muy distinto de
todo ese ruido. “Hemos llegado a un punto de nuestra vida en el que Bill
y yo podemos reírnos de las mismas cosas. Y créeme, hubo días muy duros
en nuestro matrimonio en los que te planteabas: ‘¿Podremos con esto?”.
Según las imágenes que publica Europa Press, el presentador llegó solo al aeropuerto vestido de sport y cargado con dos maletas y allí le esperaba un conductor que le acompañó hasta la salida de la terminal.
A mediados de este mes se supo que el presentador estrella de Mediaset se pondría definitivamente al frente del reality después de recibir el alta de los médicos
que le tratan tras sufrir un ictus. Vázquez tuvo que ser operado de un
aneurisma cerebral el pasado 18 de marzo, tras ser ingresado de urgencia
el fin de semana anterior a causa de fuertes dolores de cabeza. Previamente, como contó él mismo, había sufrido un desmayo estando de
viaje en Marrakech, donde perdió el conocimiento durante unos minutos. A
ello le siguieron varios mareos, incluso presentando la gala de Gran Hermano Dúo, e intensos dolores de cabeza que le llevaron a plantarse un día en urgencias, donde se quedó ingresado. “Ha sido leve. Podría haber sido peor. Muchísimo peor. Me desperté en
la UCI tranquilísimo: todo había ido bien. A falta de uno me han
colocado dos stent”, explicó el también actor. Durante el mes que ha durado su convalecencia, el presentador se ha visto obligado a cancelar su gira teatral Grandes Éxitos
—obra que protagoniza y también produce— y se ha dedicado a su familia,
a hacer ejercicio, cuidarse y pasear a sus perros. "Ha sido un período
de tiempo muy, muy emocionante", contó por teléfono a sus compañeros de Sálvame, quienes junto a su madre y su expareja, no se han separado de su lado en este tiempo. "No he tenido miedo en ningún momento. No soy un inconsciente y cumpliré a rajatabla lo que indiquen los médicos, pero cuando me digan ‘adelante’, lo haré", añadió.
Y así ha sido. Como se ve en las fotografías el presentador ya puede
volar, aunque se desconoce el destino elegido para estas mini vacaciones
que ha decidido tomarse antes de comenzar con Supervivientes, en la que va a ser una edición muy esperada por muchos con la participación de Isabel Pantoja. Además de la expectación de la tonadillera en la isla,
muchos de los seguidores del programa desean ver también el encuentro
entre Vázquez y Pantoja, después de años de enfrentamientos y
reconciliaciones. Sin embargo, años después, fue motivo de uno de sus múltiples enfados cuando la tonadillera aseguró en una entrevista en El Hormiguero
tras su salida de la cárcel que amaba a su mascota “aunque viniera de
donde vino”. Algo que molestó mucho al presentador de Telecinco que sin
dudarlo, respondió en el plató de Sálvame: “Espero no volver a
cruzármela en la vida”.
Un rifirrafe que ya se había producido en otras ocasiones,
especialmente cuando Jorge Javier Vázquez presentaba el programa de
Telecinco Aquí hay tomate e Isabel Pantoja era carne de cañón de todas las secciones.
La relación entre ambos comenzó cuando el presentador daba sus primeros pasos en televisión de la mano de Ana Rosa Quintana en Sabor a ti.
Fue siendo colaborador de ese programa cuando Vázquez entregó un regalo
muy especial a Isabel Pantoja, una perrita que se llamó Sisi.