Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

12 abr 2019

final María Jesús Ruiz, ganadora de la primera edición de 'Gran Hermano Dúo' en una reñida final La ex Miss España 'vuelve a coronarse' y se hace con el ansiado maletín tras una noche cargada de discusiones y con visita de Isabel Pantoja incluida

final

María Jesús Ruiz, ganadora de la primera edición de 'Gran Hermano Dúo' en una reñida final

La ex Miss España 'vuelve a coronarse' y se hace con el ansiado maletín tras una noche cargada de discusiones y con visita de Isabel Pantoja incluida.

 Después de tres emocionantes meses de concurso, Gran Hermano Dúo llega a su fin entre máxima expectación y con un desenlace inesperado para muchos.

 Kiko Rivera y María Jesús Ruiz, dos gigantes que han demostrado ser dignos merecedores del preciado maletín, se preparaban, esta vez sí, para conocer el nombre del vencedor del 'reality' repitiendo modelito después del 'gran engaño' que vivieron este miércoles.

 Los porcentajes ciegos estuvieron bastante igualados durante toda la noche: 53,3% frente a 47,7%.

 Las variaciones fueron mínimas y, la tensión por saber quién sería el vencedor, no dejó de crecer en ningún momento.

 

Antes de abandonar Guadalix de la Sierra, la ex Miss España recibió la especial visita de su madre Juani.
 Sin embargo, la entrada de Isabel Pantoja en la casa más famosa de la televisión y la reacción de su hijo al conocer la noticia de que la tonadillera participará en la próxima edición de Supervivientes, casi eclipsa el objetivo real del programa.
Los finalistas se despedían de la casa para ser recibidos en plató por Jordi González. Allí, tuvieron que revivir algunas de las polémicas más fuertes que han vivido en estos tres meses.
 La utópica relación que se creó durante las últimas horas de convivencia se rompió después de que se proyectasen los vídeos en los que la modelo criticaba en el confesionario a Kiko y a su esposa.
 "Es increíble el punto hasta el que puede llegar a actuar una persona. 
 Pero al final te tiene que doler lo que te diga la gente a la que quieres. Y a María Jesús yo no la quiero", espetaba Rivera a su enemiga.
 Haciendo autocrítica, la modelo reconoció que quizás no había sido siempre la mejor compañera, pero que, al menos, "lo había intentado". 
El Dj, por su parte, aseguró que siempre había sido "100% real" y que "en la realidad hay errores".

El momento de la verdad

Ambos continuaron discutiendo prácticamente que llegó el momento de la verdad. 
Los teléfonos se cerraron y el conductor del reality anunció segundos después el nombre del vencedor.
 "La audiencia ha decidido que el ganador o ganadora de GH Dúo sea… ¡MARÍA JESÚS"
La ex Miss España y ganadora del primer Gran Hermano por parejas se rompía de la emoción y empezaba a correr por todo el plató dando saltos de alegría ante la sorpresa de muchos de sus compañeros y del propio Kiko Rivera, que empezó a ser vitoreado por el público entre aplausos y gritos de "tongo".

La modelo no pudo contener las lágrimas de emoción y llegó incluso a tirarse al suelo, medio mareada por la euforia.
 "Agradezco de todo corazón a todas las personas que han hecho que hoy esté aquí. Gracias a todos vosotros. Le dedico esto a mi madre, que ha sufrido mucho y a mis hijas", decía la ganadora del concurso antes de despedirse y de recibir el maletín, que entregó a su madre diciéndo: 
"Esto yo no lo quiero, es para vosotros".
 

Angelina Jolie no logra rehacer su vida y busca un acercamiento a Brad Pitt

La prensa británica asegura que la actriz estaría dispuesta a una reconciliación, algo que descarta el actor.

Brad Pitt y Angelina Jolie, en 2014.
Brad Pitt y Angelina Jolie, en 2014. CORDON PRESS

Han pasado dos años y medio desde que Angelina Jolie solicitó el divorcio de Brad Pitt y todavía no han firmado la disolución de su matrimonio.

 Hasta ahora la última noticia que se tenía de las negociaciones de la pareja era que estaban hartos de ser una pareja separada pero no divorciada, por lo que, mientras establecen la división de sus propiedades y el régimen permanente de custodia de sus seis hijos, estaban elaborando un acuerdo que oficialmente los declarará solteros y no legalmente casados.

 Pero ahora la prensa británica asegura que Jolie ha cambiado de opinión.

Según esta nueva versión aportada por el diario The Sun y recogida por otros medios del país,  "Angelina le ha dejado claro a Brad que quiere volver a tener una relación con él".
 La actriz, según esta informaciones, está "alargando" las negociaciones de divorcio con la esperanza de una reconciliación. "A ella le gustaría que volvieran a ser una familia y no parece ser capaz de seguir adelante", afirmó una fuente. 
"Es por eso que le está haciendo tan difícil a Brad cada detalle de su divorcio".

Sin embargo, fuente próximas al actor aseguran que Pitt no está interesado en volver a reunirse con su ex, pero desea mantener una relación amistosa con Jolie por el bien de sus hijos:
 "Él solo quiere que todo esté arreglado, en realidad, esto podría haber sido hace más de un año, pero ella no se decide".
Después de buscar la custodia completa de los seis hijos de la pareja, ahora Jolie quiere que "sean una familia otra vez". Últimamente Jolie ha sido vista en público con Maddox (de 17 años), Pax (de 15), Zahara (de 14), Shiloh (de 12) y los gemelos de 10 años de edad Knox y Vivienne de forma bastante regular, mientras que las visitas de Brad Pitt a sus hijos se llevan a cabo de manera privada.


Angelina Jolie, con sus hijos Knox y Zahara en el estreno de 'Dumbo' en Los Ángeles (California).
Angelina Jolie, con sus hijos Knox y Zahara en el estreno de 'Dumbo' en Los Ángeles (California). CORDON PRESS
Fue en diciembre pasado cuando la pareja logró al fin establecer los términos del acuerdo sobre Maddox, Pax, Zahara, Shiloh, Vivienne y Knox. 
Fue la abogada de Jolie, Samantha Bley DeJean, la que, a través de un comunicado confirmó el pacto. 
"El acuerdo, que se basa en las recomendaciones del evaluador de custodia de menores, elimina la necesidad de un juicio", comentó la letrada, quien no quiso revelar los detalles del mismo "para proteger los mejores intereses de los niños". 
La revista People reveló posteriormente y citando a una fuente cercana a las dos estrellas de Hollywood que se trata de un acuerdo temporal y no permanente, que tiene como objetivo "que las cosas sigan avanzando en la dirección correcta".
La liquidación final del matrimonio de los actores probablemente todavía tardará varios meses, ya que hay muchos detalles financieros que se deben analizar por ambas partes.
 La última vez que Jolie y Pitt se enfrentaron para negociar su separación no fue bien.
 Este tipo de documento que ahora pretenden es habitual en los grandes divorcios de Hollywood y se hace cuando la división financiera es muy complicada.
La actriz, productora y directora habló por primera vez de su separación el pasado mes de febrero de 2017 durante un viaje a Camboya, escenario de su última película como directora.
 Con el estreno de First They Killed My Father, Angelina Jolie inundó revistas y periódicos con sus declaraciones y confesiones como “no ha sido un proceso fácil” (a The New York Times), “prefiero llorar en la ducha que delante de mis hijos” (a Vanity Fair) o “no me gusta estar soltera, no es algo que yo quisiera” (a The Sunday Telegraph).
 También ha confesado que el motivo de sus primeros meses de desaparición fue porque su familia la necesitaba y ha explicado por qué se mudó con sus hijos a una gran mansión de 25 millones de dólares en Los Ángeles: “Necesitábamos otra base libre de todo”.
 Desde su separación se ha relacionado a Pitt con varias mujeres aunque no así a Jolie.

 

Kiko Rivera versus María Jesús Ruiz, el desigual futuro fuera de ‘GH Dúo’

El hijo de Isabel Pantoja y la ganadora del 'reality' de Telecinco salen del concurso con sus finanzas saneadas pero con diferentes proyecciones de cara al público y a sus expectativas profesionales.

María Jesús Ruíz y Kiko Rivera durante la primera parte de la final de 'Gran Hermano Dúo'.
María Jesús Ruíz y Kiko Rivera durante la primera parte de la final de 'Gran Hermano Dúo'.

 

11 abr 2019

Violaine Huisman: “Contar la historia de mi madre se convirtió en una dolorosa necesidad”

La escritora francesa afincada en Brooklyn ha irrumpido con fuerza en el mundo literario con 'Fugitiva y reina', un retrato descarnado de su fascinante y problemática progenitora.

 

La escritora Violaine Huisman, en su casa en Brooklyn en febrero pasado. 
La escritora Violaine Huisman, en su casa en Brooklyn en febrero pasado.
Violaine Huisman (París, 1979) acabó en Brooklyn por puro azar. Su padre, Denis Huisman, profesor de Filosofía en La Sorbona, fue invitado a dar un ciclo de conferencias en la Universidad de Nueva York, comenzando así una larga relación con la ciudad.
 Sus dos hijas sucumbieron también al hechizo, y se instalaron allí a finales de los años noventa.
 “Como académico”, señala la escritora evocando su figura, “mi padre era un tanto atípico.
 No creía que la alta cultura tuviera que estar alejada de la gente.
 En ese sentido hizo una labor importante publicando libros que hacían accesible la filosofía al público en general.
 Se movía entre el mundo del éxito, los negocios y el pensamiento, algo que en Francia no estaba bien visto, pero en Nueva York funcionaba”.
Tras terminar los estudios de secundaria, decidió eludir la trayectoria académica a la que se sentía predestinada.
 “Quería tener una vida real en el mundo real. Era ambiciosa y, como sucede cuando se pone el corazón en lo que se hace, tuve suerte”. 
Tenía 19 años cuando encontró trabajo como editora en un sello independiente, Seven Stories, con el que colaboró por espacio de seis años.
 “Era un sello de izquierdas, muy comprometido”, puntualiza. Como todo lo que hizo después, su siguiente paso profesional también guardaba relación con el mundo de los libros: decidió hacerse agente literaria independiente. 
“Mi idea era ayudar a que se abrieran camino escritores de talento que nadie conocía. 
Tuve cierto éxito pero es un trabajo realmente difícil. Estaba sola y no ganaba nada.
 Después de un tiempo decidí trabajar para una agencia establecida con el fin de dominar las claves del oficio. 
Fue una experiencia sumamente interesante pero comprendí que el trabajo de un agente literario tiene que ser lucrativo. 
Las obras que hay que representar tienen que dar dinero, y no era el caso de las que me gustaban. 
No me interesaba en absoluto el mercado. Mi proyecto no era realista, y yo me negaba a serlo”.

Tras su experiencia en el mundo editorial, coordinó durante años los encuentros literarios organizados por la prestigiosa Academia de Música de Brooklyn (BAM), y tomó parte en el lanzamiento de la revista Autodafe. 
 “La editaba el Parlamento Internacional de Escritores.
 Publicamos a autores como Bei Dao, Salman Rushdie, Rick Moody, Mary Gaits­kill, Enrique Vila-Matas o Antonio Tabucchi, pero el objetivo principal era apoyar a talentos poco conocidos procedentes de todo el mundo”.

Entretanto, y desde el principio de su peripecia transatlántica, se había ido forjando muy lentamente en su cabeza un proyecto de naturaleza íntima: contar en clave de novela la historia de su madre, una mujer fascinante y problemática.
 “Mamá”, escribe, “nunca ocultó a sus amantes, y el desfile permanente de especímenes improbables le daba a nuestra casa un aire de barraca de feria. No podía evitar liarla por donde quiera que fuese”.
Todo empezó, según hace constar en el arranque mismo de Fugitiva y reina, como acabó titulándose, cuando tenía 10 años, un día en el que mientras daban por televisión la noticia de la caída del muro de Berlín, le comunicaron que su madre había sido internada en un psiquiátrico.“Fue un shock que tardé años en comprender.
 Más adelante, cuando descubrí que quería ser escritora, contar la historia de mi madre se convirtió en una dolorosa necesidad. 
Era una mujer de mil facetas, dulce, dura y difícil, a la que estaba muy apegada”. 
Escribir la novela de su vida pasó a ser una pulsión que la dominó por completo, pero Violaine Huisman no sabía bien cómo afrontar el reto. 
“Quería reflejar con fidelidad su voz, una voz fuerte, sucia, descarnada, pero sobre todo veraz”. 
Cuando terminó el manuscrito, llamó a su madre por teléfono para leérselo: “Se sintió profundamente conmovida. Por una parte estaba avergonzada, sí, pero también estaba orgullosa del retrato que trazaba de ella.
 La mostré al desnudo, mucho más de lo que ella misma hubiera sido capaz de hacerlo, pero se reconoció en lo que le leí”.

Lo que hubiera debido ser el final resultó no ser más que el principio de un proceso agónico:
 “Le enseñé lo que tenía a un editor y le gustó, pero el material en bruto tenía tal fuerza que era preciso desbrozarlo sin desvirtuar nada.
 Lo malo es que mi madre falleció poco después y el texto se convirtió en algo tóxico y doloroso a lo que me resultaba imposible acercarme. Me quedé paralizada”.
Siguió un largo compás de espera durante el cual Violaine Huisman desarrolló una intensa actividad profesional y tuvo dos hijos. 
“Ser madre después del golpe que supuso para mí perder a la mía fue una experiencia catártica pero me ayudó a dar con la voz que buscaba”. 
El momento determinante tuvo lugar de manera inopinada, en la boda de su hermana, a quien está dedicado el libro. 
“Las dos estábamos muy unidas a ella. 
Después de vivir muchos años juntas, mi hermana y su compañera decidieron casarse y me pidieron que dijera unas palabras durante la ceremonia. 
Escribí un texto en el que sin darme cuenta había dado con una voz que supe inmediatamente que era la que tenía que usar en la novela”.
Cuando se le pregunta a Violaine Huisman quiénes han influido más en ella como escritora invoca los nombres de Annie Ernaux, Marie NDyae y, entre sus lecturas más tempranas, a Marguerite Duras.
 Habla con particular énfasis de su afinidad con Ben Lerner, poeta y novelista norteamericano contemporáneo exacto suyo de quien ha traducido al francés el enigmático volumen titulado El odio a la poesía.
  La expresión le cambia cuando se le pide que lo reduzca todo a un solo nombre: “Proust. Representa el opuesto absoluto del mundo en que vivimos, sometido al poder de los mercados y a la masificación de la cultura.
 Vivimos inmersos en un ruido de fondo que lo desdibuja todo.
 El gran reto de la literatura es dar coherencia a la realidad a través de la ficción. 
La verdad que se encuentra en la reconstrucción narrativa del pasado, ése es sin la menor duda el gran legado de Proust: la luz de la escritura es lo que logra que el pasado sea algo nuevo, real y verdadero”. 


Lo demás sucedió vertiginosamente. Al cabo de unos meses, la editorial Gallimard aceptaba el manuscrito de Fugitiva y reina, que ha tenido una recepción muy favorable, y ha sido galardonada con dos premios de signo casi opuesto (el Marie Claire y el Françoise Sagan), lo cual da una idea de la amplitud de su alcance.

Fugitiva y reina. Violaine Huisman. Traducción de Irene Aragón. Hoja de Lata, 2019. 240 páginas. 19,90 euros.