Se vendieron como adorables fábulas de superación, pero acabaron destruyendo toda esperanza.
Y todavía nos estamos recuperando.
Hay películas que son como una canción de Los Planetas:
empiezan con una melodía deliciosa, consiguen que menees la cabeza
poniendo una sonrisa tonta y acaban destruyendo todo en lo que crees.
Son historias que nos recuerdan que la palabra "entrañable" viene derivada de "entrañas", porque ahí es donde nos atacan.
Películas que se vendieron como adorables fábulas de superación, mediante pósters con estrellas felices abrazándose y poniendo caras de alegría como si acabaran de escuchar la frase: "Vayan pasando por esta caja en orden".
Y cuando estábamos con la guardia bajada, cuando habíamos asumido que la vida es un hermoso milagro, nos dieron una patada en la boca.
Todavía nos estamos recuperando.
Pero Una pareja de tres es mucho más de lo que su pizpireto póster promete.
El matrimonio con mejor pelo de toda América se enfrenta a la decepción y a los sueños truncados en un retrato de la inevitable crueldad de la madurez: sacrificios profesionales, reproches y complejos que sin embargo merecen la pena porque han construido un hogar idílico con tres hijos y Marley, el perro más desobediente de la historia.
Y de repente Marley se muere. Un giro que hizo que los espectadores llorasen (pero no silenciosamente, sino con hipo) y que algunos saliesen tan enfurecidos de ver la película que pusieron en marcha una iniciativa de boicot pintando con espray "el perro muere al final" en los pósters de la película.
Él era un implacable periodista, ella una torpe aspirante a presentadora que no valía nada sin su mentor: pocas cosas resultaban más sexys para el Hollywood de los noventa que una muñeca dependiendo de un anciano.
Íntimo y personal es una comedia simpática y predecible hasta que deja de ser ambas cosas a la vez cuando Robert Redford es cosido a tiros durante la grabación de un reportaje de guerra.
Ella lo ve todo por televisión. Y ya está. Así acaba la película.
Juntos aprenderán el significado de la palabra amor y se reconciliarán con sus respectivos demonios internos.
Tras el final feliz, la hermanita de Robert Pattinson asiste a la escuela como todos los días, orgullosa de haber superado el bullying al que sus compañeros la sometían, y el profesor empieza a escribir la fecha en la pizarra: once... de... septiembre (oh Dios) de dos mil... (oh Dios) uno (OH DIOS).
Así es. Resulta que el protagonista trabaja en una de las Torres Gemelas, y de repente mira por la ventana y ve un avión planeando a una altura extrañamente baja. Fin.
Irrumpe en un psiquiátrico (en el que ha ingresado voluntariamente para librarse de la cárcel) y revoluciona a todos los enfermos animándoles a vivir exprimiendo la vida al máximo.
Su antagonista es la enfermera Ratched (Louise Fletcher), la clásica gruñona que acaba recurriendo a la no tan clásica lobotomía para anular por completo la personalidad de los enfermos, incluido Jack Nicholson.
Un momento ¿qué? Un paseo para recordar se convierte en una versión perversa de Love story donde el chico mueve cielo y tierra para regalarle a su novia el deseo de cualquier chica antes de morir: casarse.
Esa boda a las puertas de la muerte resulta un ensañamiento despiadado contra el espectador, que no sabe si estar alegre, estar triste o quitar la película.
A veces, cuando le confiesas a tu mejor amiga que la amas, la atropella un camión y acabas atrapado en una espiral de depresión, alcoholismo y autodestrucción en la que te comportas como un capullo con todo el mundo
. One day nos lleva a concluir dos moralejas: dile a esa persona que la quieres antes de que sea demasiado tarde y nunca, nunca, jamás confíes en una comedia cuqui si la protagoniza Anne Hathaway.
La mujer, incapaz de vivir con la angustia, se suicida y va al infierno, así que su marido tiene que viajar desde el cielo hasta el inframundo para rescatarla.
El tráiler la vendió como una aventura familiar de fantasía con perro.
Cuando la gente fue a verla, se encontró con que a los 12 minutos Thelma está a punto de ser violada en un aparcamiento y Louise mata al agresor, empujándolas a una huida solo hacia adelante que incluye persecuciones, despertares emocionales y el descubrimiento de Brad Pitt como el mayor mito erótico masculino de su generación.
Para cuando las dos amigas (dos en la carretera, dos cabalgan juntas) aceleran hacia el vacío del cañón del Colorado, el público ya no sabía qué demonios acababa de ver.
Lo que sí sabía es que, como reflexiona Thelma cuando mira a las estrellas, "algo me ha atravesado, y ya no puedo volver atrás".
Son historias que nos recuerdan que la palabra "entrañable" viene derivada de "entrañas", porque ahí es donde nos atacan.
Películas que se vendieron como adorables fábulas de superación, mediante pósters con estrellas felices abrazándose y poniendo caras de alegría como si acabaran de escuchar la frase: "Vayan pasando por esta caja en orden".
Y cuando estábamos con la guardia bajada, cuando habíamos asumido que la vida es un hermoso milagro, nos dieron una patada en la boca.
Todavía nos estamos recuperando.
'Una pareja de tres' (2009)
¡Jennifer Aniston y Owen Wilson han adoptado un perrito! Las travesuras, los tropiezos y el enredo están asegurados.Pero Una pareja de tres es mucho más de lo que su pizpireto póster promete.
El matrimonio con mejor pelo de toda América se enfrenta a la decepción y a los sueños truncados en un retrato de la inevitable crueldad de la madurez: sacrificios profesionales, reproches y complejos que sin embargo merecen la pena porque han construido un hogar idílico con tres hijos y Marley, el perro más desobediente de la historia.
Y de repente Marley se muere. Un giro que hizo que los espectadores llorasen (pero no silenciosamente, sino con hipo) y que algunos saliesen tan enfurecidos de ver la película que pusieron en marcha una iniciativa de boicot pintando con espray "el perro muere al final" en los pósters de la película.
'Íntimo y personal' (1996)
Por si la presencia de Robert Redford y Michelle Pfeiffer no te recordase constantemente que estás viendo una película, sus personajes tenían nombres de esos que solo existen en el cine (Warren Justice y Tally Atwater) y vivían un amor, efectivamente, de película.Él era un implacable periodista, ella una torpe aspirante a presentadora que no valía nada sin su mentor: pocas cosas resultaban más sexys para el Hollywood de los noventa que una muñeca dependiendo de un anciano.
Íntimo y personal es una comedia simpática y predecible hasta que deja de ser ambas cosas a la vez cuando Robert Redford es cosido a tiros durante la grabación de un reportaje de guerra.
Ella lo ve todo por televisión. Y ya está. Así acaba la película.
'Recuérdame' (2010)
En pleno fervor colectivo por Crepúsculo, Robert Pattinson protagonizó una historia de amor entre dos jóvenes traumatizados por la pérdida.Juntos aprenderán el significado de la palabra amor y se reconciliarán con sus respectivos demonios internos.
Tras el final feliz, la hermanita de Robert Pattinson asiste a la escuela como todos los días, orgullosa de haber superado el bullying al que sus compañeros la sometían, y el profesor empieza a escribir la fecha en la pizarra: once... de... septiembre (oh Dios) de dos mil... (oh Dios) uno (OH DIOS).
Así es. Resulta que el protagonista trabaja en una de las Torres Gemelas, y de repente mira por la ventana y ve un avión planeando a una altura extrañamente baja. Fin.
'Alguien voló sobre el nido del cuco' (1976)
Cómo es Jack Nicholson.Irrumpe en un psiquiátrico (en el que ha ingresado voluntariamente para librarse de la cárcel) y revoluciona a todos los enfermos animándoles a vivir exprimiendo la vida al máximo.
Su antagonista es la enfermera Ratched (Louise Fletcher), la clásica gruñona que acaba recurriendo a la no tan clásica lobotomía para anular por completo la personalidad de los enfermos, incluido Jack Nicholson.
'Un paseo para recordar' (2002)
El clásico primer amor: una chica indecisa, un chico asustado ante sus sentimientos, unos padres que se oponen al noviazgo y una agonía a causa de la leucemia.Un momento ¿qué? Un paseo para recordar se convierte en una versión perversa de Love story donde el chico mueve cielo y tierra para regalarle a su novia el deseo de cualquier chica antes de morir: casarse.
Esa boda a las puertas de la muerte resulta un ensañamiento despiadado contra el espectador, que no sabe si estar alegre, estar triste o quitar la película.
One day' (2011)
A veces el amor de tu vida está ahí, delante de tus narices, y tardas años en darte cuenta.A veces, cuando le confiesas a tu mejor amiga que la amas, la atropella un camión y acabas atrapado en una espiral de depresión, alcoholismo y autodestrucción en la que te comportas como un capullo con todo el mundo
. One day nos lleva a concluir dos moralejas: dile a esa persona que la quieres antes de que sea demasiado tarde y nunca, nunca, jamás confíes en una comedia cuqui si la protagoniza Anne Hathaway.
'Más allá de los sueños' (1998)
Robin Williams y Annabella Sciorra interpretan a una pareja que lo tiene todo: dinero, amor y unos hijos que sacan notas estupendas. Un día esos hijos mueren en un accidente de tráfico, y un par de meses después el marido también fallece atropellado.La mujer, incapaz de vivir con la angustia, se suicida y va al infierno, así que su marido tiene que viajar desde el cielo hasta el inframundo para rescatarla.
El tráiler la vendió como una aventura familiar de fantasía con perro.
Thelma y Louise' (1991)
Hoy todos sabemos de qué trata realmente esta película, pero en 1991 el tráiler presentaba solo instantes de sus primeros 10 minutos: Thelma y Louise fue promocionada como una comedia de amigas protagonizada por dos locuelas que se iban de fin de semana a pescar y bailar country en línea.Cuando la gente fue a verla, se encontró con que a los 12 minutos Thelma está a punto de ser violada en un aparcamiento y Louise mata al agresor, empujándolas a una huida solo hacia adelante que incluye persecuciones, despertares emocionales y el descubrimiento de Brad Pitt como el mayor mito erótico masculino de su generación.
Para cuando las dos amigas (dos en la carretera, dos cabalgan juntas) aceleran hacia el vacío del cañón del Colorado, el público ya no sabía qué demonios acababa de ver.
Lo que sí sabía es que, como reflexiona Thelma cuando mira a las estrellas, "algo me ha atravesado, y ya no puedo volver atrás".