Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

9 jun 2017

Bigote Arrocet, desterrado en ‘Supervivientes ’ y más cerca de regresar a España

Ël estará en la Gloria.
 Fue a una Isla donde cada semana le pagan 24.000 Euros y no hace nada, así que estar en el "Palafito" es otra semana pagada y de turismo sin hacer nada. y no creo que le echen, ojala vaya esa impertinente de italiana que solo quiere comer pero no hace nada, encima si rie no sé que es peor, toda ella es tonta y se cree lista, va dando pena y es cansina ¿Por qué no la nominan? y de paso a esa otra Alba siempre está sentada.....Por cierte y quiten ya a Jorge Javier Vázquz de presentar de  realytis porque aburre mucho y echa reprimendas a los que no le hacen la pelota...Que lo quiten porfa...

Edmundo "Bigote" Arrocet, el pasado mes de abril en el aeropuerto de Madrid, antes de viajar a Honduras.
Edmundo "Bigote" Arrocet, el pasado mes de abril en el aeropuerto de Madrid, antes de viajar a Honduras.

Edmundo Bigote Arrocet se enfrenta al momento más delicado dentro del concurso de Supervivientes desde que llegara a Honduras.
 El humorista chileno ha sido desterrado de la isla donde conviven el resto de concursantes y, ahora, permanecerá siete días aislado hasta tener que enfrenarse con el siguiente nominado que menos votos reciba.
 De esta manera, Arrocet podría reencontrarse la próxima semana con su pareja, la presentadora Maria Teresa Campos, que sufrió un ictus el pasado 16 de mayo, noticia que el chileno desconoce por petición de la propia Campos.
Con el destierro de Arrocet, el reality aventurero marcó la noche de este jueves su mejor récord de audiencia (27,3% de share) superando la barrera de los tres millones de espectadores.
 Y es que la pareja de la presentadora es uno de los concursantes más cotizados de esta edición, donde el caché semanal que cobran las estrellas oscila entre los 20.000 y 24.000 euros.
 

El pasado domingo María Teresa Campos, que se recupera favorablemente, quiso intervenir en el programa y pedir el apoyo del público para Arrocet. “Él es, en el buen sentido de la palabra, bueno.
 Y por eso, queridos amigos, os pido que marquéis su teléfono”, dijo la presentadora sin mucho éxito, ya que su pareja sentimental fue el menos votado y solo el 24% de la audiencia intentó salvarle.
Sandra Bareda con Bigote Arrocet nominando el pasado 24 de abril.
Sandra Bareda con Bigote Arrocet nominando el pasado 24 de abril.
Ahora el humorista tiene que vivir solo durante una semana, algo que no le supondrá ningún esfuerzo ya que Arrocet fue muy criticado por sus compañeros durante las primeras semanas de concurso por aislarse y no involucrarse en la convivencia. 
El chileno, que vivirá en una casa árbol, asegura estar encantado con su nuevo hogar.
 “Me parece espectacular mi nueva ubicación, la encuentro muy bonita.
 A mí me gusta mucho el silencio”, dijo anoche en el programa.

El cabreo monumental de Ángel Garó contra 'Sálvame': "Dinero, eso es lo que quiero"

8 jun 2017

Te contamos en dónde está Isabel Preysler


¿Escondida? ¿Retirada? Te contamos en

dónde está Isabel Preysler.

Mucho se ha escrito en estos días sobre el supuesto retiro o la estudiada desaparición de Isabel Preysler.

 Pero la realidad es mucho más prosaica y menos grandilocuente de lo que se podía imaginar...ya que lo que de verdad ha ocurrido en estas semanas de aparente desvanecimiento de la escena social es, simplemente, que en los lugares que ha estado no había objetivos que inmortalizaran el momento.

 

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¿Escondida? ¿Retirada? Te contamos en ¡HOLA! dónde está Isabel Preysler


 

Eduardo Casanova: “Nunca nadie me ha parado”.......... Borja Bas

Creció ante España como el primer niño abiertamente gay de la tele en ‘Aída’. 

Con 26 años, desafía de nuevo las convenciones con su primer largo, ‘Pieles’.

Eduardo Casanova
Eduardo Casanova posa para ICON mientras tiñe la capa de ozono de rosa. Lleva camiseta y pantalón de Levi's y zapatillas Converse.
Viajemos por un segundo en el tiempo.
 Vemos a Eduardo Casanova (Madrid, 1991) correteando por un estudio entusiasmado por su primera portada, para la revista Vanidad.
 Tiene 14 años y es, de pronto, el niño de España. O, más bien, el primer niño gay de la tele española. 
Su rompedor personaje en la serie Aída le trajo una fama salvaje. “Yo no sé qué es no ser famoso”, repite hoy como un mantra.
 Aquel día, mientras tratábamos de captar su revoltosa candidez, él reclamaba cosas impublicables, como posar maquilladísimo con unos plataformones de Carlos Díez aliviando la vejiga en el retrete. Incluso le pillamos en un descanso fumando a escondidas (hoy supera el paquete diario).
Doce años después, se ríe cuando se le recuerda que tuvimos que echarle el freno.
 “No deberíais haberme parado. Al menos, con la foto con los tacones. 
Nunca nadie me ha parado.
 La verdad es que a veces no soy consciente de lo fuerte que he sido y lo fuerte que soy. 
No sé si es muy soberbio esto que acabo de decir, pero yo lo siento así”.

Edu nos recibe para hablar de Pieles, su primer largometraje, producido por Álex de la Iglesia y Carolina Bang, en cines el 9 de junio.
 Entrar en su casa es como meterse en su peli o en sus cortos: todo está teñido de rosa y pastel, la estética prima sobre la comodidad y el orden y la pulcritud no logran enmascarar lo que bulle bajo sus cimientos.
Su mélange incluye cuadros de enfermedades venéreas en el comedor y de Kim Jong-il y Kim Jong-un presidiendo la cocina, una Hello Kitty gigante junto a una bañera en mitad del dormitorio y hasta un aseo temático dedicado a los Kennedy.
 “¿Sabes de dónde viene mi obsesión por el rosa y lo oscuro a la vez?
 De una de las imágenes que más me han perturbado: Jackie O con el vestido rosa de Chanel manchado con la sangre de su marido”. Incluso sus dos gatos, el persa Tokio, que le regaló Ana Polvorosa, y la esfinge Costra, escenifican los mundos contrapuestos que conviven en el imaginario/hogar de Edu.
Nos sentamos junto al balcón y se pone a fumar compulsivamente. “Mi vida no es de color rosa tal y como la sociedad entiende el color rosa. 
Y espero que no lo sea nunca, porque entonces sería Mr. Wonderful, y no hay nada que deteste más que lo blanco y lo naif. Yo soy un gótico de alma”. 

Detesta la categorización en general y que se le tilde de provocador en particular.
 “Es de lo primero que me dicen: ‘Qué ganas de epatar, de transgredir, de shockear’.
 Nada más lejos de mi intención.
 Cuando ves Pieles no ves a alguien intentando provocar, sino a alguien tratando de expresarse libremente. 
Pero ese ejercicio de libertad muchos lo reciben como si les estuvieras agrediendo.
 Es algo a lo que me he tenido que enfrentar siempre en mi vida en general, porque hago pocas concesiones”.
Y recordamos el primer corto que escribió, con 14 años, y que nunca llegó a realizar, El chocho asesino. “Trataba sobre una muñeca andaluza que cobraba vida y se comía a la gente por el coño”.
 Ya estaba ahí su fijación con los orificios y la escatología. “Nada más liberador que defecar.
 Pieles habla de eso: de liberarse o no. Y una manera es acudir a lo fisiológico; anulando o variando partes del cuerpo que nos sirven para comunicarnos o liberarnos.
 Debería psicoanalizármelo con mi terapeuta”. Y se ríe.

El germen de Pieles fue el corto Eat my shit, en el que Ana Polvorosa se plantaba un ojete protésico por boca y sufría por su diferencia. 
Su amiga repite ese rol en este largo, un compendio de historias con protagonistas malformados por dentro y/o por fuera que reivindica la disidencia de los cánones estéticos consensuados.
En definitiva, el derecho a ser en tu propia piel. Enciende otro cigarrillo. 
Pieles reclama que desaprendamos lo aprendido. Nos han dicho qué es un color para mujeres y cuál es para hombres, qué da asco y qué no, qué es algo bonito y qué es feo… 
Yo no sé qué es algo malformado, no tengo ni idea. 
Hay gente normativamente muy guapa que a mí me puede parecer horrible. 
Todo tiene que ver con una extraña conspiración que nos dice: ‘Tienes que ir por aquí, piensa esto’. Lo que quiero es reventar la cabeza con todos estos conceptos, invitar a cuestionarlo todo”. Calada final.
Ya prepara su segunda película.
 Tan solo desvela que “tiene que ver con el poder”. Comenta que anda fascinado con Orwell, así que le pregunto por otras obsesiones e influencias recientes. 
“¿Quieres que te conteste como una diva para concluir la entrevista?”. Por favor. “La realidad”.