Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

14 feb 2016

Psiquiatría sí, naturalmente............................................................ Miguel Gutiérrez Fraile

Los psicofármacos han dignificado la vida de los pacientes con trastornos graves.

 Su uso ha aumentado como en otras disciplinas médicas.

 


El domingo pasado leímos una entrevista publicada en EL PAÍS con el periodista estadounidense Robert Whitaker, titulada "La psiquiatría está en crisis", y quisiera presentar algunas objeciones a sus afirmaciones
. Al “falso relato histórico” sobre la psiquiatría norteamericana mencionado en la entrevista [el entrevistado sostiene que se ha hecho creer erróneamente a Occidente que la causa de la depresión y la esquizofrenia es biológica y que se pueden curar con fármacos], cabe hacer muchas matizaciones, especialmente en lo referido a los “efectos negativos”, como él los llama, de la medicalización de la psiquiatría.
La llegada a América en la posguerra de gran número de psicoanalistas atenuó la barrera entre “lo normal y lo anormal” y, como consecuencia, acudieron a sus terapias pacientes con un cierto estatus social.
 Los pacientes psiquiátricos graves quedaron relegados a la asistencia pública.
En estas circunstancias, el descubrimiento de la clorpromazina en Francia (1951) supuso la primera revolución psicofarmacológica e influyó de forma neta en la posterior desinstitucionalización del enfermo psiquiátrico, hasta entonces, mayoritariamente recluido en establecimientos asilares
. La enfermedad mental se consideraba prácticamente inmodificable y la sociedad excluía a estos enfermos de por vida. Los antipsicóticos supusieron un avance incontestable.
Esto marcó una modificación radical en la política asistencial americana y J. F. Kennedy (1962) arbitró cambios legales que permitieron nacer un nuevo modelo: la psiquiatría comunitaria, exportada posteriormente a todo el mundo y que supuso la externalización de los enfermos psiquiátricos más graves, el desarrollo de centros de salud mental, de servicios de psiquiatría en hospitales generales (comienzo de la medicalización de la psiquiatría en los años sesenta) y de recursos intermedios que mejoraron el tratamiento del enfermo.
Además, mejoró la formación de psiquiatras, psicólogos, enfermeras, trabajadores sociales…
 La relación entre los antipsicóticos y la desinstitucionalización de los enfermos mentales graves en EE UU es innegable.
Se pasa de una cifra de 34 personas ingresadas por cada 10.000 americanos en 1955 a 3 personas ingresadas por cada 10.000 en 1994.

La psiquiatría continuaba, afortunadamente, su medicalización.
El enfermo psiquiátrico empezó a ser tratado como el resto de los enfermos.
 Tomó conciencia de su dignidad, de sus derechos.
 Surgieron las asociaciones de familiares de enfermos psiquiátricos y asociaciones específicas de enfermos, a imagen y semejanza de otras asociaciones de pacientes somáticos.
El libro que quiere vender el entrevistado en España alude a la ineficacia de la psiquiatría por el aumento progresivo de enfermos psiquiátricos, lo que no resiste un mínimo análisis racional
. El aumento bruto de trastornos mentales en 30-40 años con toda probabilidad no es distinto porcentualmente del de cáncer de páncreas o artritis reumatoide en el mismo periodo
. Para sustentar sus confusas opiniones, el periodista cita un artículo publicado en aquella época con claros problemas metodológicos, como que la medida —“buen resultado”— varía mucho según época y sociedades.
 Por ejemplo, entonces vivir con los padres a los 30 años era considerado “mal resultado” social en EE UU, cuando en España resultaba “normal”.
Tenemos el dudoso honor de ser la única especialidad con un movimiento ‘anti’
Otro sesgo es el que se refiere a trastornos de ansiedad.
 La ansiedad es consustancial con el ser humano, pero la ansiedad patológica no.
 El periodista no contempla el sufrimiento que presentan muchos enfermos que hasta hace pocas décadas no eran tratados, salvo en el restrictivo ámbito de la psiquiatría privada americana
  En lo que se refiere al Valium, pocas veces en la historia un medicamento ha beneficiado a tanta gente y de tan diversas patologías.
Plantea este señor que la enfermedad mental no es una enfermedad cerebral
. Cree al parecer que el cerebro es el único órgano del cuerpo que nunca se pone enfermo y siempre presenta un perfecto funcionamiento.
 Y que las enfermedades mentales se curan con palmaditas en el hombro. ¿Desde cuándo la actividad mental no está determinada por el cerebro? Diremos más, prácticamente todos los tratamientos psicosociales que se aplican en psiquiatría hoy se basan en pruebas de eficacia que descansan en modelos procedentes de la neurociencia cognitiva, que postula que el cerebro humano tiene capacidad de neurogénesis y plasticidad neuronal hasta su muerte, lo que le permite adquirir y consolidar nuevos hábitos que compensan funciones perdidas por la enfermedad mental. Y esto es algo más que “pastillas”
. Es la parte nuclear de la psiquiatría moderna basada en modelos antitéticos a los que se proponen en esa entrevista.
Los psiquiatras no somos los únicos médicos que tratamos síntomas mentales: el dolor o el llamado mal estado general es tan mental como la ansiedad, la tristeza o el delirio
. Prácticamente nadie discute que el dolor debe ser tratado y suprimido como sea.
 Ahí están las modernas unidades del dolor. Sin embargo, la ansiedad patológica no
. Esta discrepancia es acientífica.
El entrevistado considera que hay un “excesivo” consumo de psicofármacos. Efectivamente, ha habido un aumento global del uso de psicofármacos, aunque en EE UU esto se produce en menor medida en población negra e hispana. Poblaciones que cuando enferman tienen más probabilidades que los anglosajones de suicidarse o acabar en una prisión que ir al hospital o a la consulta privada de un psiquiatra. Las cifras son sobrecogedoras. Esto no parece importarle al señor Whitaker. Los enfermos ricos toman medicaciones y los pobres son excluidos socialmente, a la cárcel o al cementerio.
Los psicofármacos han permitido el desarrollo de terapias no coercitivas, no farmacológicas, destinadas a aliviar los déficits sociales de los enfermos así como a controlar sus síntomas más disyuntivos.
La tendencia al aumento de consumo de fármacos es un fenómeno global: la farmacoterapia analgésica sigue parecida evolución (y nadie hace un movimiento ideológico en contra de tratar el dolor con química). En EE UU, el porcentaje de usuarios de analgésicos más potentes que la morfina pasó del 17% al 37%, y lo mismo pasa con los antibióticos, cuyo consumo aumentó un 36% en la década de los años 2000
. Ocurre lo mismo con hipocolesterolémicos, antihipertensivos, antidiabéticos y antineoplásicos. Han aumentado las intervenciones de cataratas, de cirugía digestiva, los trasplantes y en general toda la actividad médica.
Esta tendencia global se relaciona con el acceso a mejores servicios médicos. ¿Hay que corregir esto? Es posible, pero afecta de manera transversal a todas las especialidades médicas. Focalizar el discurso en exclusiva sobre la psiquiatría no es otra cosa que contribuir a perpetuar su rechazo social y los prejuicios antipsiquiátricos. ¿Qué otra especialidad médica ve tan cuestionada la validez científica de su disciplina? Tenemos el dudoso honor de ser la única especialidad médica con un movimiento anti. Hay un movimiento contra la psiquiatría.
Ustedes nunca oirán hablar de un movimiento anticardiología o de un movimiento antidermatología. Entrevistas como esta contribuyen a la estigmatización de la psiquiatría y a la exclusión de muchos enfermos
. Presentar la ciencia médica adecuadamente para un público informado debe ser una exigencia ajena al oportunismo.
Miguel Gutiérrez Fraile es presidente de la Sociedad Española de Psiquiatría y catedrático de Psiquiatría de la Universidad del País Vasco.


Solo los náufragos eligen puerto................................................................ Manuel Jabois

Pocas mujeres en España dimiten más y mejor que Esperanza Aguirre.

 

Pocas mujeres en España dimiten más y mejor que Esperanza Aguirre.
 Nadie consigue lo que ella en cuanto a puesta en escena: convocatoria relámpago, secretismo absoluto y a la hora del cocido.
 Así se hacen las cosas en la política pop.
 Uno de sus colaboradores más cercanos la recuerda dictando decisiones descomunales en sus días libres, sentada al borde de una piscina y con los pies chapoteando en el agua.
 Ordenando cambios de Gobierno sujetando una lista de nombres colocados en orden según su grado de discreción para evitar filtraciones.
Deambulando por el despacho de la Comunidad con aire grave mientras pronuncia expresiones que se creían desterradas del castellano ante lo que consideraba la traición de un amigo o algo peor: el amor de un enemigo.

En ese contexto se entiende la rueda de prensa de este domingo, elaborada a su imagen y semejanza: una: una despedida con zarpazo que ni siquiera es tal, ni la despedida ni el zarpazo.
 Continúa siendo la jefa de la oposición a Carmena, y recogió las uñas cuando tuvo a tiro el cuello de Rajoy, al que prefirió dejarle la marca antes que desangrarlo en su propia casa
. Salvo sus razones, el resto de su intervención no la escribió para ella sino para el presidente.
 Que la leyese Esperanza Aguirre antes se debió a que confía más en su discreción que en la de Rajoy, por eso se puso ella delante en la lista.
Todo, todo ese discurso que por ratos abría teatralmente las carnes (“la corrupción nos está matando”) parecía estar pronunciándolo mientras impostaba la voz del presidente del Gobierno.
 Solo hay que fijarse en cómo abría de vez en cuando los ojos en señal de estupor y las ganas que tenía, en el fondo, de fumar un puro y pedir el Marca cuando pronunció una frase estratégicamente llena de eses: “Este no es el tiempo de los personalismos, sino de los sacrificios y las cesiones”
. Un asesor la detuvo en medio del pasillo cuando se dirigía a la sala de prensa con una barba postiza. Todo un aviso para navegantes si hubiese agua debajo de Rajoy.
 Un remedo, en realidad, de aquello de Jacinto Benavente: “Solo los náufragos eligen puerto”. Si no se ahogan antes.
No se va, porque mujeres así no se van nunca, pero hay que reconocerle pasión en sus dimisiones
. Ha terminado tan rodeada de corrupción que la única salida que empezaba a quedarle era decir que a sí misma no se conocía de nada y que si había ido a su propia boda fue porque no le quedaba más remedio.
Su anuncio es más ruidoso que efectivo (le quedaba poco tiempo) , pero la coloca de nuevo en el pret a porter de la dimisión preventiva. Con la cúpula financiera de Génova acusada de organización criminal, y las costuras del PP de Madrid a punto de reventar en mil pedazos (hay que reconocerle resistencia), Aguirre ha encontrado el momento adecuado para marcharse y concentrarse en una misión más peliaguda: la desarticulación municipal de titiriteros y Reyes Magos.
Lo hizo con una razón humana, la corrupción, que podría resumirse así: “Empiezo a recordar de qué me suena Francisco Granados”.

Muere la actriz Concha Goyanes a los 69 años

La intérprete, que pertenecía a una larga dinastía teatral, protagonizó películas, series de televisión y espectáculos.

Fotografía de archivo, tomada en marzo de 2010, de la actriz Concha Goyanes. EFE
La actriz Concha Goyanes, perteneciente a una de las dinastías teatrales más conocidas, ha fallecido en Madrid a los 69 años a consecuencia de una enfermedad, según han informado a Efe fuentes del Ayuntamiento de Coín, localidad malagueña de donde era natural.
Goyanes participó hace unos años en el reparto de la serie Arrayán de Canal Sur, lo que le permitió reencontrarse con su niñez y, al jubilarse, decidió quedarse unos años a vivir en esta localidad malagueña, en la que cuenta desde 2010 con una calle con su nombre.
El pasado noviembre, a raíz de la enfermedad, decidió mudarse a Madrid, donde reside su familia, para recibir tratamiento médico.
En Coín, donde los vecinos la veían a menudo pasear, la recuerdan como una mujer "muy amable, afable y cariñosa". Concha Goyanes debutó en 1952 en la obra Fuenteovejuna con la compañía de Adolfo Marsillach y cuatro años después protagonizó su primera película, Un fantasma llamado amor, dirigida por Ramón Torrado.

En Coín, donde los vecinos la veían a menudo pasear, la recuerdan como una mujer "muy amable, afable y cariñosa". Concha Goyanes debutó en 1952 en la obra Fuenteovejuna con la compañía de Adolfo Marsillach y cuatro años después protagonizó su primera película, Un fantasma llamado amor, dirigida por Ramón Torrado.
Ese mismo año ingresó en el cuadro artístico de RNE en Madrid e inició trabajos para Televisión Española, medio en el que hizo novelas y obras dramáticas y también fue presentadora de espacios musicales.
En 1962 intervino en la película Canción de juventud, junto a Rocío Dúrcal.
 En teatro, ha destacado su interpretación en El sueño de una noche de verano, El Rey ciervo y El corazón en la mano, y en televisión ha participado en series como El heredero o Arrayán

 

Vargas Llosa, el Nobel que da exclusivas en ‘Hola’..............................

“Ahora me ha tocado vivir la peor cara del periodismo…
Sabía que con esta nueva relación habría cierta repercusión de tipo periodístico, pero nunca en la vida imaginé que tendría esa repercusión continental, que hubiera semejante especulación periodística en torno.
 Tanto para Isabel (Preysler) como para mí ha sido muy, muy pesada en estos últimos meses…. Ahora me ha tocado vivir la peor y comprobar que el periodismo como espectáculo no sólo está presente en el periodismo especializado en el escándalo, en la chismografía, sino que el periodismo más serio se contamina también”, explicaba Mario Vargas Llosa hace no tanto tiempo.
portada hola
La fama no es mala, pero si uno la busca no tan disimuladamente y luego critica el negocio que la sostiene, mal vamos. Es lo que pasa, a mi humilde entender, al Premio Nobel, al menos en cierto sentido.
Se criticó duramente a Lucía Etxebarria cuando fue a participar en un reality show. Lucía explicó que tenía serios problemas económicos, pero nadie le hizo caso.
 ¿Qué hace una escritora participando en ese tipo de programas?, decían escandalizados. Pero ahora ocurre un hecho insólito:
 Mario Vargas Llosa, millonario, escritor serio y venerado por los suplementos culturales del país, el mismo que arremete contra la prensa del corazón calificándola de todo menos bonita, es portada en rigurosa exclusiva

¿Qué quieren conseguir, más fama, más dinero, estar en boca y alimentar la prensa que él deplora?, ¿Llega tan lejos el poderoso influjo de la reina de corazones para convencer a un hombre tan inteligente para que participe en el mismo circo que deplora?
 Parece que sí, pero aún así seguiremos sin entender que necesiten hacer tantísimas exclusivas seguidas: por si no fuera poco todas esas portadas que han protagonizado como quien no quiere la cosa (previo cheque, of course) desde que se descubrió el romance, ahora lo hacen mirando a cámara: sin complejos.
“¿Celosa? ¡No hay comparación! Mario es muchísimo más celoso que yo”, declara Isabel Preysler en esta no tan jugosa entrevista.



“Este ha sido el año más feliz de mi vida”, declara Mario, como contaba ayer este periódico
 . “Esto que nos sucedió a nosotros fue inesperado. No era algo que nos imaginábamos que fuera a ocurrir, pero ocurrió. Estamos en una etapa muy bonita, muy feliz, dando los pasos que se van dando, cuando se han de dar”
Se trata de una entrevista quizá algo almibarada: “No voy a hablar de su inteligencia y su talento porque eso ya lo sabe todo el mundo.
 Cada conversación suya es enriquecedora. Pero si tengo que hablar de una cualidad suya que sobresalga entre las demás es su humildad y lo mucho que de verdad le preocupan los problemas sociales”, explica Isabel.
Mario también aclara que el proceso de su divorcio va viento en popa: “Ya está casi resuelto, y de manera amistosa, felizmente… para la familia no ha sido fácil.
La situación los tomó por sorpresa. No esperaban que surgiera algo como esto a estas alturas de mi vida. Así que ha habido que limar las cosas
. Pero el divorcio va resolviéndose poco a poco, de manera amistosa y bien”

Se trata de una entrevista quizá algo almibarada: “No voy a hablar de su inteligencia y su talento porque eso ya lo sabe todo el mundo. Cada conversación suya es enriquecedora.
 Pero si tengo que hablar de una cualidad suya que sobresalga entre las demás es su humildad y lo mucho que de verdad le preocupan los problemas sociales”, explica Isabel.

Y ojo, que una está muy a favor del Amor a según qué edades, pero eso no quiere decir que pueda apoyar determinadas actitudes.
Así están las cosas, queridos lectores, y así se las hemos contado. Próxima parada de la parejita: los premios Goya.  Robarán protagonismo a Penélope Cruz y a las bellísimas actrices del cine español. Pero, ¿pasará Isabel Preysler por la alfombra roja reservada a los actores o entrará por la puerta de atrás?
Sí apoyo, por cierto, al gran Manuel Díaz El Cordobés, que tras muchos años tratando de entender a su padre se ha decidido a ir a por todas.
 Siempre presentí que ése no podía ser un capítulo cerrado.