El organismo pide que las alzas del petróleo no se trasladen a los márgenes y los sueldos para preservar la competitividad.
Al
la izquierda, el presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi,
conversa con el gobernador del Banco de España, Luis LindeEFE
El Banco de España
recomienda que se contengan las subidas de los márgenes empresariales y
los salarios. Solo que una vez observado cuál ha sido el comportamiento
de unos y otros, la institución destaca que los convenios siguen
recogiendo aumentos moderados de los sueldos incluso en los de firma más
reciente. En cambio, tras un periodo de moderación entre 2014 y 2015,
en 2016 se produjo un repunte de los beneficios por encima de la evolución de los costes laborales, según revela el informe anual del Banco publicado este martes.
Durante
la crisis era normal que los excedentes empresariales aguantasen porque
las compañías necesitaban sanearse. Sin embargo, el año pasado
registraron un crecimiento que, en opinión del organismo, "puede ser
indicativo de un insuficiente grado de competencia en algunos mercados
en un contexto de aumento de la demanda". "Los indicadores de
competitividad-precio han seguido mejorando, a pesar del comportamiento
expansivo de los márgenes empresariales", concluye el estudio del Banco
de España. Eso sí, alerta de que estas ganancias de competitividad
fueron menores que otros años. El Banco de España prevé unas perspectivas favorables para la economía española,
en parte empujadas por las reformas y la corrección de desequilibrios
como las ganancias de competitividad y la reducción de deuda privada. No
obstante, apunta que buena parte del extraordinario crecimiento
registrado obedece a elementos coyunturales como el precio del petróleo,
los bajos tipos de interés o una política fiscal relajada. "El impacto
de estos factores transitorios habría sido mayor en España que en el
conjunto del área del euro", indica. Según los propios cálculos del
supervisor, dos tercios del crecimiento mayor de lo esperado se deben a
esos factores temporales que pueden agotarse y que, por lo tanto,
podrían convertirse en riesgos que "interactúen" con las "fragilidades"
que aún persisten en la economía española. Es decir, la entidad sostiene
que el crecimiento económico continuará, pero que este se irá
ralentizando conforme se vayan disipando los vientos de cola. Además, el Banco de España advierte de que "el elevado
endeudamiento de la economía española supone una vulnerabilidad ante
eventuales aumentos adicionales de los tipos de interés". Los tipos solo
pueden ir hacia arriba. Y la deuda pública ronda el 100% del PIB. "Esta
situación subraya la necesidad de trazar un plan de consolidación
presupuestaria a medio plazo, en un contexto en el que en 2016, por
segundo año consecutivo, la política fiscal adoptó un sesgo expansivo",
recalca el texto. A pesar de la reducción de deuda en el sector privado, el
informe resalta que los niveles de deuda en relación con la renta siguen
siendo muy elevados. Sectores ligados a la construcción y el
inmobiliario, pequeñas empresas y familias con rentas bajas aún dedican
una proporción muy alta de sus ingresos a devolver deudas. Y de igual
modo que los bajos tipos han impulsado las rentas españolas, un aumento
de los tipos "tendría un impacto contractivo sobre las rentas" de
empresas, familias y Administraciones, subraya.
No hay comentarios:
Publicar un comentario