En el contexto del cruce de acusaciones por el controvertido reparto de
la herencia del político, Vanitatis desvela todos los detalles de sus
últimas voluntades
La guerra Preysler-Boyer no
ha hecho más que arrancar. Los hijos del 'superministro', que nunca se
llevaron bien con la viuda, Isabel, denuncian que esta les ha puesto
impedimentos a la hora de hacer recuento de los bienes en herencia de su
padre y están dispuestos a acudir a los tribunales antes de que se
organice el reparto de lotes. Al menos, Laura. Hasta ahora, han hablado
tanto
Miguel Boyer Jr. como la propia
Isabel Preysler a través de sus abogados. La una niega, claro, lo que el otro afirma. Pero, ¿qué deseaba el propio Boyer?
¿Qué estipuló en su testamento?
[Vea aquí: Miguel Boyer Jr. sobre Preysler: “Dejó a mi padre pelado en vida”] Vanitatis está en disposición de desvelar hoy algunas de las últimas voluntades testamentarias de
Miguel Boyer .
El exministro de Economía de la primera era González quiso testar para
que su patrimonio fuera repartido entres sus legítimos herederos. De las
tres partes en las que se divide una herencia en el régimen general (el
tercio de legítima, el tercio de mejora y el tercio de libre
disposición), la voluntad del último marido de Isabel Preysler fue que
el tercio de legítima y de mejora fuera para sus tres hijos a partes iguales.
Miguel Boyer e Isabel Preysler en una imagen de archivo (Gtres) Nuestras leyes recogen que la legítima tiene que recaer a partes
iguales entre sus descendientes.
Distinto es para la mejora. Para este
segundo tercio, la ley permite más flexibilidad a la hora de disponer
entre los herederos. Bien se puede dejar a todos los hijos o bien a
parte de ellos. Este tercio también facilita que el tercio recaiga en
los nietos. En el caso de Miguel Boyer ha utilizado la máxima de "todos iguales".
El tercio de mejora es también para sus tres hijos: Laura y Miguel,
nacidos de su matrimonio con la ginecóloga Elena Arnedo, y para Ana,
única hija en común con Isabel Preysler.
Miguel Boyer dejó escrito que el periodo para resolver su herencia y distribuirla podría llegar hasta los cinco años A
Isabel Preysler le corresponde por ley el usufructo del tercio de
mejora.
Es decir, Preysler será la poseedora del tercio de mejora, pero
los propietarios serán los tres hijos.
La opción de testar de Miguel le
ha permitido mejorar a su viuda con el tercio de libre disposición , del que se llevará una buena parte.
[Vea aquí: Isabel Preysler contraataca: responde a las acusaciones de los hijos de Miguel Boyer]
La incógnita de los legados
Este tercio de libre
disposición, según ha podido conocer Vanitatis, se ha dividido en
legados.
El legado es una institución de nuestro Código Civil que
permite testar a herederos directos o también indirectos parte de la
masa hereditaria. Isabel Preysler será propietaria de varios de estos legados ,
la forma en la que su marido la habría querido compensar ante la poca
generosidad que tiene la ley para los viudos y las viudas
. Otros legados
caerán en sus hijos y también familia directa.
La guerra Preysler-Boyer no
ha hecho más que arrancar. Los hijos del 'superministro', que nunca se
llevaron bien con la viuda, Isabel, denuncian que esta les ha puesto
impedimentos a la hora de hacer recuento de los bienes en herencia de su
padre y están dispuestos a acudir a los tribunales antes de que se
organice el reparto de lotes. Al menos, Laura. Hasta ahora, han hablado
tanto Miguel Boyer Jr. como la propia Isabel Preysler a través de sus abogados. La una niega, claro, lo que el otro afirma. Pero, ¿qué deseaba el propio Boyer? ¿Qué estipuló en su testamento?
[Vea aquí: Miguel Boyer Jr. sobre Preysler: “Dejó a mi padre pelado en vida”] Vanitatis está en disposición de desvelar hoy algunas de las últimas voluntades testamentarias de Miguel Boyer .
El exministro de Economía de la primera era González quiso testar para
que su patrimonio fuera repartido entres sus legítimos herederos. De las
tres partes en las que se divide una herencia en el régimen general (el
tercio de legítima, el tercio de mejora y el tercio de libre
disposición), la voluntad del último marido de Isabel Preysler fue que el tercio de legítima y de mejora fuera para sus tres hijos a partes iguales.
Miguel Boyer e Isabel Preysler en una imagen de archivo (Gtres)
Nuestras
leyes recogen que la legítima tiene que recaer a partes iguales entre
sus descendientes. Distinto es para la mejora. Para este segundo tercio,
la ley permite más flexibilidad a la hora de disponer entre los
herederos. Bien se puede dejar a todos los hijos o bien a parte de
ellos. Este tercio también facilita que el tercio recaiga en los nietos.
En el caso de Miguel Boyer ha utilizado la máxima de "todos iguales".
El tercio de mejora es también para sus tres hijos: Laura y Miguel,
nacidos de su matrimonio con la ginecóloga Elena Arnedo, y para Ana,
única hija en común con Isabel Preysler.
Miguel Boyer dejó escrito que el periodo para resolver su herencia y distribuirla podría llegar hasta los cinco años A
Isabel Preysler le corresponde por ley el usufructo del tercio de
mejora. Es decir, Preysler será la poseedora del tercio de mejora, pero
los propietarios serán los tres hijos. La opción de testar de Miguel le
ha permitido mejorar a su viuda con el tercio de libre disposición , del que se llevará una buena parte.
[Vea aquí: Isabel Preysler contraataca: responde a las acusaciones de los hijos de Miguel Boyer]
La incógnita de los legados
Este
tercio de libre disposición, según ha podido conocer Vanitatis, se ha
dividido en legados. El legado es una institución de nuestro Código
Civil que permite testar a herederos directos o también indirectos parte
de la masa hereditaria. Isabel Preysler será propietaria de varios de estos legados ,
la forma en la que su marido la habría querido compensar ante la poca
generosidad que tiene la ley para los viudos y las viudas. Otros legados
caerán en sus hijos y también familia directa.
Cristian Boyer, hermano de Miguel, será
muy probablemente uno de los beneficiarios de alguno de los legados.
Cristian ha tenido una excelente relación con su hermano, hasta el punto
que fue el propio marido de Isabel Preysler quien designó en su
testamento a Cristian para que ejerciera la figura de albacea (persona
que administra) y también de contador-partidor (encargado del reparto)
de su bienes. La polémica nace precisamente en esta figura, porque los
hijos del desaparecido político aseguran que su tío Cristian no ha hecho
nada todavía y que además se lleva 'demasiado' bien con Preysler y
Vargas Llosa.
En este momento la herencia de Miguel Boyer se encuentra en pleno
proceso de inventariado para después llegar a realizar el cuaderno
particional. Miguel Boyer fue previsor hasta en los tiempos de ejecución
del reparto de su herencia y dejó escrito que el periodo para resolver
su herencia y distribuir podría llegar hasta los 60 meses.
Cinco años desde la fecha del fallecimiento del ministro para conocer
qué le corresponde a cada uno de los herederos y legatarios. Miguel Boyer murió el 29 de septiembre de 2014 ,
por lo tanto, el reparto se podría retrasar incluso hasta 2019 si así
lo estipula el albacea. Un plazo de tres años aún para la polémica.
Fuentes cercanas a los hijos del exministro indican a Vanitatis que
esperan que sea un proceso largo, pues ellos están decididos y muy
seguros de lo que hacen
No hay comentarios:
Publicar un comentario