El alcalde de Marinaleda se desdice de nuevo y permanecerá como regidor.
El alcalde de Marinaleda (Sevilla), Juan Manuel Sánchez Gordillo,
ha presentado a las 11.59 horas de hoy la renuncia a su acta de
diputado, un minuto antes de que comenzara la Comisión del Estatuto del
Diputado en la que se iba a adoptar la decisión de proponer su expulsión
del Parlamento andaluz por incurrir en incompatibilidad
. En virtud de la ley Electoral andaluza, Sánchez Gordillo tenía que escoger entre seguir al frente la alcaldía o como parlamentario.
El sábado pasado tenía previsto renunciar al primer cargo, pero en el último minuto suspendió el pleno municipal en que debía hacer efectiva su decisión por presiones de los concejales de su grupo.
Gordillo ha llegado bien temprano a la sede del Parlamento andaluz, sobre las ocho de la mañana, y ha permanecido reunido con algunos diputados de Izquierda Unida.
Poco antes de las once de la mañana ha acudido al Registro del Parlamento, pero cuando ha llegado al mostrador se ha limitado a preguntar cuánto tiempo disponía para presentar la renuncia.
Mientras tanto, todo estaba preparado para la celebración de la Comisión del Estatuto del Diputado, que tiene que dictaminar si los parlamentarios afectados por la incompatibilidad cumplían con la ley Electoral.
Una vez que ha registrado su baja, ahora deberá hacerla efectiva personalmente ante el presidente del Parlamento, Manuel Gracia.
Las indecisiones de Gordillo, que está enfermo desde hace muchos meses, ha puesto en una situación muy comprometida a su grupo parlamentario.
Hasta que finalmente ha presentado la renuncia -el documento lo selló el secretario del grupo parlamentario- nadie sabía que decisión iba a tomar, porque decía una cosa y al minuto la contraria. IU ha intentado por todos los medios evitar que el Parlamento tomara la decisión más drástica, la de su expulsión.
Hubiera sido la primera vez que la Cámara autónoma lo hubiera hecho.
Gordillo también tiene el dudoso honor de ser el primer parlamentario andaluz sancionado con un mes sin sueldo.
Ocurrió en octubre de 1996 por haber cobrado irregularmente dos salarios públicos, como profesor de EGB y como parlamentario durante un año y medio.
Él dijo que no sabía que tenía esos ingresos y consideró injusta la sanción porque "sin conocimiento no puede haber omisión".
El portavoz de IU, José Antonio Castro, visiblemente afectado por el sainete, ha dicho que Gordillo "ha reconsiderado su decisión tras un análisis con los concejales" y la asamblea de Marinaleda. Castro ha valorado la trayectoria de Sánchez Gordillo como diputado en favor "de los desfavorecidos y de las víctimas de la estafa" de la crisis económica.
El alcalde de Marinaleda, que luce hoy una camiseta deportiva, no ha querido hacer declaraciones a los medios de comunicación.
Cuando fue elegido diputado por primer vez en 1994, Gordillo ya dejó clara cuál sería su impronta desde el mismo momento en que prometió su cargo.
Vestido entonces con una camisa roja abierta hasta el ombligo proclamó su compromiso con "las criaturas humanas, la utopía, el pueblo andaluz, la nación andaluza, la insumisión y la libertad".
Pese a los vaivenes del peculiar alcalde, los grupos parlamentarios han evitado los trazos gruesos a la hora de valorar su despedida, por las circunstancias personales por las que atraviesa.
El presidente de la Cámara, Manuel Gracia, ha dicho una hora antes del desenlace final que el Parlamento no puede actuar "en función de decisiones variables una persona".
El portavoz socialista, Mario Jiménez, le ha afeado que no hubiera adoptado una decisión "más edificante y respetuosa" con la asamblea.
Y el popular Carlos Rojas ha mostrado su "respeto" por la decisión, aunque "ha tardado bastante" en comunicarla.
El sustituto de Sánchez Gordillo en el Parlamento será Álvaro García Mancheño, maestro y teniente de alcalde de Pedrera (Sevilla).
Es miembro de la Candidatura Unitaria de Trabajadores (CUT).
. En virtud de la ley Electoral andaluza, Sánchez Gordillo tenía que escoger entre seguir al frente la alcaldía o como parlamentario.
El sábado pasado tenía previsto renunciar al primer cargo, pero en el último minuto suspendió el pleno municipal en que debía hacer efectiva su decisión por presiones de los concejales de su grupo.
Gordillo ha llegado bien temprano a la sede del Parlamento andaluz, sobre las ocho de la mañana, y ha permanecido reunido con algunos diputados de Izquierda Unida.
Poco antes de las once de la mañana ha acudido al Registro del Parlamento, pero cuando ha llegado al mostrador se ha limitado a preguntar cuánto tiempo disponía para presentar la renuncia.
Mientras tanto, todo estaba preparado para la celebración de la Comisión del Estatuto del Diputado, que tiene que dictaminar si los parlamentarios afectados por la incompatibilidad cumplían con la ley Electoral.
Una vez que ha registrado su baja, ahora deberá hacerla efectiva personalmente ante el presidente del Parlamento, Manuel Gracia.
Las indecisiones de Gordillo, que está enfermo desde hace muchos meses, ha puesto en una situación muy comprometida a su grupo parlamentario.
Hasta que finalmente ha presentado la renuncia -el documento lo selló el secretario del grupo parlamentario- nadie sabía que decisión iba a tomar, porque decía una cosa y al minuto la contraria. IU ha intentado por todos los medios evitar que el Parlamento tomara la decisión más drástica, la de su expulsión.
Hubiera sido la primera vez que la Cámara autónoma lo hubiera hecho.
Gordillo también tiene el dudoso honor de ser el primer parlamentario andaluz sancionado con un mes sin sueldo.
Ocurrió en octubre de 1996 por haber cobrado irregularmente dos salarios públicos, como profesor de EGB y como parlamentario durante un año y medio.
Él dijo que no sabía que tenía esos ingresos y consideró injusta la sanción porque "sin conocimiento no puede haber omisión".
El portavoz de IU, José Antonio Castro, visiblemente afectado por el sainete, ha dicho que Gordillo "ha reconsiderado su decisión tras un análisis con los concejales" y la asamblea de Marinaleda. Castro ha valorado la trayectoria de Sánchez Gordillo como diputado en favor "de los desfavorecidos y de las víctimas de la estafa" de la crisis económica.
El alcalde de Marinaleda, que luce hoy una camiseta deportiva, no ha querido hacer declaraciones a los medios de comunicación.
Cuando fue elegido diputado por primer vez en 1994, Gordillo ya dejó clara cuál sería su impronta desde el mismo momento en que prometió su cargo.
Vestido entonces con una camisa roja abierta hasta el ombligo proclamó su compromiso con "las criaturas humanas, la utopía, el pueblo andaluz, la nación andaluza, la insumisión y la libertad".
Pese a los vaivenes del peculiar alcalde, los grupos parlamentarios han evitado los trazos gruesos a la hora de valorar su despedida, por las circunstancias personales por las que atraviesa.
El presidente de la Cámara, Manuel Gracia, ha dicho una hora antes del desenlace final que el Parlamento no puede actuar "en función de decisiones variables una persona".
El portavoz socialista, Mario Jiménez, le ha afeado que no hubiera adoptado una decisión "más edificante y respetuosa" con la asamblea.
Y el popular Carlos Rojas ha mostrado su "respeto" por la decisión, aunque "ha tardado bastante" en comunicarla.
El sustituto de Sánchez Gordillo en el Parlamento será Álvaro García Mancheño, maestro y teniente de alcalde de Pedrera (Sevilla).
Es miembro de la Candidatura Unitaria de Trabajadores (CUT).
No hay comentarios:
Publicar un comentario