Mata a su mujer y después se suicida tras avisar a su hijo.
El cuerpo sin vida de la mujer, apareció a primera hora de la tarde dentro de un coche aparcado en la calle.
Agentes de Policía retiran el cuerpo sin vida de una mujer de 42 años / kiko delgado (EFE)
Disparó a su mujer tres veces en la cabeza porque ella quería
dejarlo
. La abandonó muerta dentro de un coche aparcado en una céntrica calle de Ferrol y regresó a su casa en Fene para pegarse un tiro con la misma pistola.
Antes de suicidarse, el agresor llamó por teléfono a un hijo para anunciarle que había matado a su madre y que iba a quitarse la vida.
El cadáver de la mujer, M.M.B.H, de 42 años, apareció ayer a las 14:00 horas dentro de un Peugeot gris prácticamente nuevo estacionado en la calle Breogán, en el barrio de Ferrol Vello.
Fue su hijo quien lo encontró y llamó a la policía para contarles que el asesino era su padre.
El agresor, J.R.T, de 47 años, le disparó tres veces a su esposa en la cabeza y el cuello con un pistola parabellum semiautomática para la que no tenía licencia.
Los agentes recogieron en la acera los casquillos de las balas, lo que prueba que la tiroteó allí mismo, a primera hora de la tarde en plena vía pública a pocos metros de un colegio. Apenas una hora después, la policía local de Fene confirmaba el hallazgo de un segundo cadáver, el del presunto asesino y marido de la mujer asesinada en el municipio vecino, al otro lado de la ría ferrolana.
Los investigadores creen que huyó del lugar del crimen en coche, regresó a la casa familiar, en el número 30 de la calle Gerardo Díaz, y se pegó un tiro con la misma arma en una especie de cobertizo.
Un vecino que oyó el disparo alertó a la autoridades, que ya iban de camino para tratar de arrestarlo.
El hijo, de poco más de veinte años, contó a los agentes que no sabía que su padre tuviera un arma, aunque él ya no vivía en la casa familiar.
El hombre no era militar ni había pertenecido a los cuerpos del seguridad del Estado así que los investigadores presumen que la pistola era ilegal.
La relación de la pareja fue muy tormentosa con separaciones de idea y vuelta y varias denuncias por medio. Ella pidió protección en 2005, la anuló un mes más tarde y volvió a solicitarla en 2006.
Logró una orden de alejamiento que estuvo vigente hasta el 2008 y después, retomó una relación con su agresor que terminó hace unos tres meses
. En los últimos cinco años no constan denuncias por violencia o maltrato
. El juez de guardia, titular de la sala de Instrucción número dos de Ferrol -que juzga los casos de violencia de género en la comarca-, autorizó el levantamiento del cadáver de la mujer y la grúa municipal retiró el vehículo de la vía.
Se trata del tercer crimen de esta naturaleza que se comete en la comarca este año, dos de ellos en Narón. En junio, un hombre con antecedentes por narcotráfico acabó con la vida de su exnovia, Iria García, a cuchilladas en plena calle.
La chica tenía 28 años y él está en prisión.
En noviembre, un hombre de 73 años prendió fuego a la casa de Sedes que compartía con su mujer.
Ella murió asfixiada y él se ahorcó en el alpendre
Sigan matando, las mujeres estamos en manos de psicopatas assinos y les dan pistolas. .
. La abandonó muerta dentro de un coche aparcado en una céntrica calle de Ferrol y regresó a su casa en Fene para pegarse un tiro con la misma pistola.
Antes de suicidarse, el agresor llamó por teléfono a un hijo para anunciarle que había matado a su madre y que iba a quitarse la vida.
El cadáver de la mujer, M.M.B.H, de 42 años, apareció ayer a las 14:00 horas dentro de un Peugeot gris prácticamente nuevo estacionado en la calle Breogán, en el barrio de Ferrol Vello.
Fue su hijo quien lo encontró y llamó a la policía para contarles que el asesino era su padre.
El agresor, J.R.T, de 47 años, le disparó tres veces a su esposa en la cabeza y el cuello con un pistola parabellum semiautomática para la que no tenía licencia.
Los agentes recogieron en la acera los casquillos de las balas, lo que prueba que la tiroteó allí mismo, a primera hora de la tarde en plena vía pública a pocos metros de un colegio. Apenas una hora después, la policía local de Fene confirmaba el hallazgo de un segundo cadáver, el del presunto asesino y marido de la mujer asesinada en el municipio vecino, al otro lado de la ría ferrolana.
Los investigadores creen que huyó del lugar del crimen en coche, regresó a la casa familiar, en el número 30 de la calle Gerardo Díaz, y se pegó un tiro con la misma arma en una especie de cobertizo.
Un vecino que oyó el disparo alertó a la autoridades, que ya iban de camino para tratar de arrestarlo.
El hijo, de poco más de veinte años, contó a los agentes que no sabía que su padre tuviera un arma, aunque él ya no vivía en la casa familiar.
El hombre no era militar ni había pertenecido a los cuerpos del seguridad del Estado así que los investigadores presumen que la pistola era ilegal.
La relación de la pareja fue muy tormentosa con separaciones de idea y vuelta y varias denuncias por medio. Ella pidió protección en 2005, la anuló un mes más tarde y volvió a solicitarla en 2006.
Logró una orden de alejamiento que estuvo vigente hasta el 2008 y después, retomó una relación con su agresor que terminó hace unos tres meses
. En los últimos cinco años no constan denuncias por violencia o maltrato
. El juez de guardia, titular de la sala de Instrucción número dos de Ferrol -que juzga los casos de violencia de género en la comarca-, autorizó el levantamiento del cadáver de la mujer y la grúa municipal retiró el vehículo de la vía.
Se trata del tercer crimen de esta naturaleza que se comete en la comarca este año, dos de ellos en Narón. En junio, un hombre con antecedentes por narcotráfico acabó con la vida de su exnovia, Iria García, a cuchilladas en plena calle.
La chica tenía 28 años y él está en prisión.
En noviembre, un hombre de 73 años prendió fuego a la casa de Sedes que compartía con su mujer.
Ella murió asfixiada y él se ahorcó en el alpendre
Sigan matando, las mujeres estamos en manos de psicopatas assinos y les dan pistolas. .
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