Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

17 nov 2010

Florida quiere perdonar 41 años después a Jim Morrison por enseñar su pene en directo

Todo ocurrió en la noche del primero de marzo de 1969. The Doors, que ya se habían convertido en un fenómeno de masas en Estados Unidos, se subieron al escenario del Miami's Dinner Key Auditórium para dar un concierto. Jim Morrison, como otras muchas veces, se plantó frente al público absolutamente borracho y, probablemente, bajo el efecto de alguna de las drogas de las que era consumidor habitual. Sus tres compañeros de banda comenzaron a tocar y Morrison decidió darle un discurso a la audiencia. Un discurso sobre los derroteros que tomaba el movimiento juvenil de finales de los sesenta, sobre una masa dirigida y dominada... La cosa degeneró hasta el insulto: "Sois todos una panda de gilipollas", gritó el músico y supuestamente se bajó la bragueta y le mostró de manera desafiante y desdeñosa su pene a la concurrencia.






El concierto terminó como el rosario de la aurora tanto que el suceso desembocó en la detención del cantante que fue acusado de conducta lasciva y libidinosa, un delito grave, en el Estado de Florida.



Morrison fue juzgado y hallado culpable en 1970. La fiscalía presentó como pruebas unas fotos de aquella velada en las que se muestra al líder de The Doors pasado de rosca y tocándose su zona genital o a cuatro patas mirando fijamente y muy de cerca las cuerdas de la guitarra de su compañero Robby Krieger. La sentencia: multa de 500 dólares y seis meses de trabajos forzados. Una condena que nunca cumplió ya que sus abogados apelaron y la nueva vista no pudo celebrarse puesto que el músico ya había sido encontrado muerto en la bañera de su piso en París en 1971 a la edad de 27 años.:



El martes el gobernador de Florida, Charlie Crist, dijo que presentará oficialmente el nombre de Morrison a la junta de indultos de su estado como candidato para ser perdonado por las dos condenas de la estrella de rock. Crist dijo en una entrevista telefónica concedida a The New York Times : "He decidido hacerlo simplemente porque creo que es lo que hay que hacer. En cierto modo parece una conclusión trágica que el legado en la vida de un joven sean esas condenas. Y ni siquiera estamos seguros de lo que realmente ocurrió. Cuanto más he leído sobre el caso y más me ha informado sobre ello, más convencido estoy de que tal vez se haya cometido aquí una injusticia".



La cosa en la ultraconservadora América del Tea Party tiene lo suyo y, además, se une a la rabiosa actualidad ya que Tom Dicillo estrena el próximo 10 de diciembre en España su documental When you are strange , sobre The Doors y Jim Morrison en el que se cuenta de manera muy fiel y con gran derroche de imágenes lo ocurrido en Florida la noche de aquel concierto.

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