En Babelia, Elvira Lindo, recrea la figura de Chejov, creo que lo leí con 23 años más o menos. Había que leer todo, y además estaba prohibido. Empezaba el ritual de leer obras de autores de peso, profundos de ideología comunista. y cogiamos creo que el 1º fue el Tio Vania.
Chéjov no tiene voluntad de explicar el mundo, sin embargo, cuando el lector se entrega a su literatura acaba teniendo la sensación de entender cuál era el estado de ánimo colectivo que precedió a la Rusia soviética.
Lo leíamos, lo comentábamos, aparecía Gorki y su madre, La Madre de Gorki, leía mucho, y quizás a algunos autores de forma adelantada.
Cierto que le poníamos empeño y nos lo creíamos. Eso tendrá su lado bueno y su lado malo.
Me pasó con Ibsen, "Su casa de Muñecas" me la leí varias veces y luego la vi en adaptación en el Cine, creo que era Jane Fonda la que la protagonizaba, ella tb en aquellos momentos estaba muy comprometida con la causa feminista y la en contra de la Guerra de Vitnam.
Pues más tardes de Domingo para comentarla.
Y ahora leyendo eso de Por qué amamos a Chejov, pues nunca lo amé y menos ahora, los leía claro y a Tolstoy creo que el Jugados casi con 12 años y no me enteré de nada.
Claro que con 15 ya me había paseado por los infiernos de Dante en la Divina Comedia,
Si, yo soy muy leída, pero será que no amo a Chejov, ni amo a Ibsen, ni a Gorki y si quieren detesto a Makarenco y su Poema Pedágogico, tengo que decir que ahora no me gustan, efan unos peñazos, y como no me tengo que justificar ante nadie, leo ahora a otros autores. no los releo, porque me ha pasado que luego me desilusionan, no quiero volver a leer el Ulises aunque tenga una foto en la puerta de la Casa donde la escribió. Vaya tela, pues eso que ahora y quizas porque no me caben más libros ladrillo en la cabeza, ""Confieso que he vivido".
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