Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

3 ene 2017

Teresa Romero: “Sentía que la muerte me acechaba, un ente apoyado en mi hombro”



La auxiliar de enfermería española, primer caso de ébola adquirido fuera de África, describe ahora su "calvario".

La auxiliar Teresa Romero, tras recibir el alta médica, en el Hospital Carlos III.
El último brote de ébola mató a 11.323 personas, el 40% de las afectadas.
 La inmensa mayoría se infectó en África occidental.
 El virus provocó en ellas su letal rutina: fiebre, dolores de cabeza insoportables, vómitos, diarrea incontenible, hemorragias por la boca y el recto e incluso sangrado por los ojos.
La española Teresa Romero es una de las 17.323 personas que sobrevivieron a la enfermedad.
 “Sentía que la muerte me acechaba, un ente apoyado en mi hombro me esperaba tranquilo. 
Algo que no se puede explicar con palabras. Todavía hoy en día no sé cómo pude salir de ahí”, rememora ahora.
Los recuerdos del calvario de Romero aparecen en un artículo científico publicado en la revista Enfermería Clínica.
 En el trabajo, firmado por tres especialistas de la Unidad de Aislamiento de Alto Nivel para enfermedades altamente contagiosas del Hospital Universitario La Paz-Carlos III de Madrid, se detallan los cuidados de enfermería en el primer caso de ébola adquirido fuera de África.
Romero comienza su relato el 7 de octubre de 2014, cuando fue trasladada en una cápsula hermética al hospital madrileño, donde pasaría 25 días en aislamiento estricto en la habitación 6008. 
Dos meses antes, como auxiliar de enfermería, había atendido al religioso Miguel Pajares, de 75 años, el primer español infectado por el virus del Ébola, repatriado desde Liberia.
El 23 de septiembre, Romero cambió el pañal a un segundo enfermo, repatriado desde Sierra Leona: el sacerdote Manuel García Viejo, de 69 años. 
El 26 de septiembre, tras la muerte del misionero, la auxiliar entró de nuevo en la habitación para limpiarla. 
Se desconoce en qué momento se infectó. 

Aquel 7 de octubre, Romero, de 44 años, llegó al hospital tumbada boca arriba, con el cuerpo cubierto por entero por un buzo blanco, unos guantes y una capucha. 
“Apenas podía respirar en tan pequeño habitáculo”, recuerda. “Aquella situación me imponía porque iba empapada en mis propios fluidos.
 Era un momento muy angustioso, sentía humedad por todas partes”.
Cuando llegó al ala norte del hospital, la esperaban tres compañeros vestidos con los equipos de protección. “Teresa, venga para adelante, que este fin de año tenemos que cenar juntos”, le dijo uno.
“Era inevitable pensar en los dos pacientes con enfermedad por el virus del Ébola repatriados de África que había atendido y de su triste final.
 Me veo en el mismo destino, el pánico se apodera de mí, no quiero dormir, sentía que si lo hacía ya no volvería a despertar”, rememora en la revista Enfermería Clínica.
 
El 8 de octubre, su situación empeoró. “Mis pulmones estaban empezando a fallar, sentía que me ahogaba y me costaba respirar, era una situación de agonía.
 Entraron dos compañeros para aumentar el caudal de oxígeno. Les miré y les supliqué que me ayudaran a morir”, confiesa. 
 Entonces comenzó la fase crítica de la enfermedad. Sus recuerdos se borran.
Hasta 108 personas, 87 mujeres y 21 hombres, entraron en la habitación de Teresa Romero aquellos días, jugándose la vida. Fueron 352 entradas, el 82% de ellas realizadas por el equipo de enfermería, según subrayan los autores del estudio, encabezados por la enfermera Alicia Cerón.

Incluyendo a los dos pacientes anteriores, 165 trabajadores del hospital se expusieron en 762 ocasiones al ébola.
 El único contagio fue el de Teresa Romero, pese a que “vestía adecuadamente el equipo de protección individual”, recalcan los firmantes. “Es fundamental que se creen unidades especializadas para enfermedades altamente contagiosas con entrenamiento y formación periódicos”, afirman.
A pesar del ejército de profesionales que no quitaban el ojo las 24 horas del día a la habitación 6008, y con media España pendiente de su salud, Romero se sentía sola. 
“El resto del mundo no existía, solamente era yo luchando por sobrevivir.
 Me confortaba saber que tenía conectada una bomba de perfusión donde se podía leer la palabra morfina”, narra. 
 En la otra vía en sus brazos, estaba conectada al suero de la religiosa Paciencia Melgar, que se infectó junto al misionero Miguel Pajares en Liberia y sobrevivió.
 Romero también recibía por vía oral un fármaco experimental antiviral, el favipiravir. Era uno de los mejores momentos del día. “Me gustaba mucho tomarlo porque tenía buen sabor y como iba disuelto en agua y pasaba mucha sed, ansiaba el momento de tomarlo”, recuerda.

Pese a todos estos esfuerzos médicos y científicos, Romero revela otra versión sobre su curación.
 “Factores condicionantes para superar la enfermedad: infundir esperanza, dar cariño y positividad, poder comunicarme, no sentir dolor, no sentir emociones negativas, poder respirar, poder dormir, disponer de tratamiento antiviral y suero de convaleciente, pero esto puesto en duda si es realmente efectivo en la enfermedad”, escribe.
Finalmente, el 19 de octubre, un análisis para detectar el material genético del virus da negativo.
 Romero está limpia. Se lo comunican dos médicos vestidos todavía con el equipo de protección individual.
“Yo, lejos de alegrarme por tan esperada noticia, rompo a llorar por el recuerdo de mi perro, ejecutado por las autoridades sanitarias el 8 de octubre de 2014”, lamenta la auxiliar, en referencia a Exkalibur, su mascota sacrificada por el equipo del Centro de Vigilancia Sanitaria Veterinaria (Visavet) de la Universidad Complutense de Madrid, para evitar riesgos.
“Quizá me haya dejado muchos detalles sin escribir, nadie puede imaginar lo que yo viví en octubre de 2014 exceptuando los supervivientes de ébola”, concluye Romero.
 

 

el momento exacto en el que un rayo impacta sobre una mujer

La víctima, de 25 años, sufrió una parada respiratoria en una playa de São Paulo.

 

Un fotograma del momento en el que el rayo impacta a la joven. EPV
Taline Campos, de 25 años, caminaba sola por la orilla del mar, en Praia do Sonho, São Paulo (Brasil), cuando un rayo impactó sobre ella.
 Los servicios de emergencia tardaron menos de 15 minutos en atender a la joven, que tuvo que ser sedada y entubada, según informa Eduardo Martos en su cuenta de YouTube, donde subió el vídeo. 
 A continuación, fue trasladada al hospital con un paro cardíaco.
 
Un fotograma del momento en el que el rayo impacta a la joven. EPV

Inmediatamente después, la mujer, residente en Guarulhos, al norte de São Paulo, fue atendida en el centro de atención primaria de Jardim Sabaúna en estado grave. 
La mañana del lunes fue trasladada a un hospital.
 Al menos diez personas caminaban alrededor de la chica en el momento del accidente, pero ninguna resultó herida.

2 ene 2017

No hay cadáver pero sí libro........................... Jorge A. Rodríguez

Fàtima Llambrich desmenuza un doble crimen por el que cumple condena Ramón Laso.

 

Ramón Laso y Fátima Llambrich, en uno de sus encuentros en prisión.
Ramón Laso no es inocente, aunque nada demuestre lo contrario. Está en la cárcel por matar a dos personas, su esposa y su cuñado, de quienes se tiene la certeza de que no están vivos, aunque no haya pruebas directas de que estén muertos.
 Los cuerpos nunca se han encontrado, Laso jamás confesó, no hay arma del crimen, ni rastros biológicos ni testigos. 
Nada. La periodista Fàtima Llambrich ha construido sobre este caso –histórico en España aunque pasó casi inadvertido- la obra Sin cadáver (Now Books, 2016), con los cimientos de la investigación de los Mossos d’Esquadra, las 50 entrevistas que tuvo con su protagonista en presidio, un cuaderno azul en letra apretada que el condenado escribió solo para ella y una profunda búsqueda en su pasado.
 Y en sus secretos.


El libro de hechos reales novelados de Fàtima Llambrich (L’Ametlla de Mar, Tarragona, 1980) desconcierta.
 No toma partido. Deja abierta al lector la decisión de si Ramón Laso (Quesada, Jaén, 1955) es un asesino psicópata, un lobo con piel de cordero, o una víctima de una investigación prejuiciosa. “Claro que yo tengo una opinión sobre él, pero no quiero decirlo para no contaminar al lector, para que no juzgue a Ramón solo por etiquetas sino como si lo hubiera conocido”, explica.
 Como ese detenido de quien sus vecinos dicen que siempre saludaba
Llambrich desmenuza la investigación que la Unidad Central de Personas Desaparecidas de los Mossos llevó a cabo hasta convencerse (y convencer al jurado) de que Ramón Laso, sepulturero y conductor de ambulancias, había matado en 2009 a su segunda esposa, Julia Lamas, y a Maurici Font, su cuñado, que habían desaparecido de Els Pallaresos (Tarragona).
 Los investigadores llegaron a la conclusión de que los eliminó porque le estorbaban, ya que Laso mantenía una relación sentimental con Mercedes Lamas, hermana de Julia y esposa de Maurici.
Llambrich, periodista de TV-3, trufa la investigación con sus anotaciones de las entrevistas con Ramón Laso en la cárcel (50 encuentros desde 2012, con mampara de por medio), una inmersión en el pasado del criminal y un cuaderno azul que el condenado escribió tras su encarcelamiento.
 “Él lo redactó para mí porque sabía que estaba escribiendo el libro”, admite. 
Laso no hace ni una confesión: lo niega todo y parece más molesto por el hecho de que no le hayan probado de forma directa sus crímenes que por que realmente le acusen de ellos.
La autora mezcla periodismo e investigación criminalística (es licenciada en Criminología) para presentar un caso que hizo historia en España, montado por cadenas de indicios, analogías y antecedentes, pero sin pruebas directas: ni una, de hecho. 
Algo inédito aquí pero relativamente habitual en Estados Unidos.
En sus 357 páginas va presentando a un Laso amable con sus conocidos, colaborador con los investigadores, trabajador, concienzudo y minucioso.
 Un hombre que tiene su celda de la cárcel de Barcelona en la que pena 30 años (la sentencia confirmatoria del Tribunal Supremo es de julio pasado) impoluta, ordenada de forma tan obsesiva que tapa con plásticos los mandos a distancia de sus aparatos electrónicos. Pero un ser despiadado a ojos de los investigadores. 
Quien no conozca la historia de Laso tiene que transitar la mitad del libro para llegar al secreto que guardó durante años, del que sus dos víctimas (sin cadáver) ni su entorno en Tarragona tenían ni idea: en 1993 fue condenado por matar a su primera esposa, Lolita Camacho, simulando un suicidio, y a su hijo Daniel, de 6, en un aparente accidente de tráfico
. Entonces también tenía una amante. 
Tampoco confesó, ni hubo testigos, ni prueba directa. 
Fue condenado a 56 años, pero a los ocho quedó libre. De ello quizás aprendió que en un crimen no hay que dejar cadáver. Porque, como sostiene el forense José Antonio García-Andrade, “los muertos cuentan muchas cosas”.


Rebajas: dónde comprar tus Reyes con descuento

Un enero más, las rebajas ya están aquí. Elaboramos la lista de todas las firmas que ya tienen saldos en sus tiendas físicas y online.

Rebajas: dónde comprar tus Reyes con descuento
Mango es una de las firmas que tiene descuentos desde el 2 de enero.
Foto: Cortesía de Mango

Lo que hace unos años era una sorpresa, ya se ha convertido en tradición: decenas de marcas adelantan sus descuentos de enero permitiendo a sus clientes hacerse con regalos de última hora a precios reducidos.

 A la espera de que comience el periodo de rebajas el gigante Inditex (Zara, Uterqüe, Oysho y compañía siguen aguantando hasta el mítico día siete), elaboramos la lista de las firmas en las que ya es posible comprar ahorrando: 

Mango: rebajas hasta el 50% a partir del 2 de enero tanto en tiendas físicas (excepto País Vasco) como online. Terminan el 28 de febrero.
Bimba y Lola: desde el 1 de enero descuentos de hasta 50% en textil y zapatos. Además, las colecciones de bolsos, marroquinería y bisutería cuentan con rebajas del 20 y 30%.
H&M: hasta el 50% de descuento desde el 2 de enero al 30 de enero en tiendas físicas y online
Durante el día 2 de enero se aplicará un 10% extra de descuento si enseñas en tienda la foto facilitada por H&M en su Facebook.
Women’ Secret: ahorra hasta el 70% desde el 1 de enero al 28 de febrero tanto en tiendas físicas (en Aragón empezarán el día 3) como online.
Springfield: rebajas hasta el 50% de descuento online y en tiendas físicas.
Purificación García: descuentos especiales de Reyes en tiendas físicas y online.
& Other Stories: descuentos de hasta el 50% a partir del 26 de diciembre en tiendas físicas y online.
Être Cecile: 25% menos en una selección de camisetas y sudaderas.
Cortefiel: descuentos de hasta el 50% en tiendas físicas y online desde el 25 de diciembre hasta el 28 de febrero.
Cos: productos seleccionados con un descuento del 30 y del 50% en tiendas físicas y online.
Farfetch: compra los regalos más lujosos de la red con una rebaja de hasta el 60% menos.
Sandro: rebajas de hasta el 50% en su tienda online y tiendas físicas.
Intropia: descuentos de hasta el 50% en tiendas físicas y online.
Kling: distintos descuentos en prendas seleccionadas en tu tienda online.
Gioseppo: rebajas de hasta el 50% en una selección de calzado.
Ecoalf: promoción especial de 30% menos en prendas seleccionadas del 26 de diciembre al 6 de enero.
Camper: hasta un 40% menos en una selección de productos en tiendas físicas y online.
Las Rozas Village y La Roca Village: compra tus regalos con descuentos de hasta el 80% sobre el precio original.
Maje: Ventas VIP, hasta el 50% de descuento en prendas seleccionadas en su tienda online.
Amichi: hasta 50% de descuento en la colección de invierno.
Pepe Jeans: rebajas de hasta el 50% en productos seleccionados.
Krack: la cadena de zapaterías ya tiene una selección de calzado con descuentos de hasta el 50% en tiendas físicas y online.