Los contagiados por coronavirus no son 56.188. Seguramente están más cerca del medio millón.
Javier Sampedro
El defensor del lector de este diario tituló su columna del 1 de marzo Periodistas contra las matemáticas,
en un intento de corregir los dislates aritméticos en que incurrimos
los juntaletras, como me llaman a mí en mi barrio.
Lean su artículo si
no lo han hecho ya, es muy instructivo y divertido. También hay
periodistas a favor de las matemáticas y el equipo de datos del
periódico (Andrino, Grasso y Llaneras) es un ejemplo impecable.
Su artículo vivo –renovado a diario— sobre la curva de contagios, en sus versiones lineal y logarítmica,
es mi dieta básica para el desayuno, sobre todo ahora que se me ha
acabado la leche
. Pero el análisis matemático, si quiere servir de algo,
se tiene que alimentar de datos fiables.
Y no los tenemos.
Las
cifras que facilitó ayer el jefe de emergencias sanitarias, Fernando
Simón (4.145 muertos y 56.188 infectados) implican una mortalidad del
7%, que es una tasa absurda.
La letalidad de este coronavirus es menor
del 2%, probablemente más cerca del 1%.
La razón de que la mortalidad
parezca tan alta es que estamos infravalorando de forma garrafal el
número total de infectados. Llevamos semanas sin hacer pruebas a las
personas leves y asintomáticas, que son la parte del león.
El
coronavirus no mata tanto como creemos, pero se propaga mucho más de lo
que decimos.
Las cifras oficiales son engañosas. ¿Por qué?
Antonio Durán Guardeño, catedrático de Análisis Matemático de la
Universidad de Sevilla, lleva todo el mes trabajando sobre este grave
problema de estimación.
Según las técnicas estadísticas más adecuadas
que ha probado, los contagiados por coronavirus en España no son los
56.188 de las cuentas oficiales.
Seguramente están más cerca del medio
millón.
El fundamento de esta estimación se basa con fuerza en la
segregación de datos por edades de los afectados.
Los amantes de las
matemáticas pueden leer los argumentos en el blog del Instituto de Matemáticas de la Universidad de Sevilla.
Espero que también lo hagan los responsables políticos.
Aunque creo que algunos ya lo han hecho.
El matemático publicó su entrada de blog el lunes pasado. Tal vez por
casualidad, la Junta de Andalucía dejó de informar el martes sobre los
contagios y muertes por franja de edad, como había estado haciendo hasta
entonces.
Recordemos que son justo los resultados por franja de edad
los que tienen un mayor valor estadístico para calcular el número total
de infectados.
La Comunidad de Madrid tampoco informa sobre las franjas
de edad. Y el Ministerio de Sanidad, por lo tanto, tampoco.
Las
Administraciones nos están ocultando un dato para el que consideran que
no estamos preparados.
Nos están tratando como a un público infantil o
ignorante. Es una pésima estrategia.
Los científicos nos ofrecen la
verdad. Escuchémosles.