El hijo de Ana Obregón, que sufre esta enfermedad desde hace hace dos años, ha vuelto a tener una bajada de defensas que le ha obligado a permanecer en el hospital desde el lunes.
Álex Lequio ha vuelto a ingresar en el hospital como consecuencia del cáncer que padece desde hace dos años.
El hijo de Ana Obregón y Alessandro Lecquio llegó el lunes a la clínica Ruber Internacional de Madrid y desde entonces permanece ingresado, según ha adelantado la revista Semana. El joven, de 27 años, ha estado acompañado de su madre, que no se ha separado de su lado en ningún momento, y de su padre, quien solo se ha ausentado para cumplir sus obligaciones como tertuliano en El programa de Ana Rosa.
Ni el propio Álex Lequio ni sus padres se han pronunciado por ahora de la situación y tampoco han informado de lo sucedido en sus redes sociales, algo habitual en el joven empresario, que utiliza su cuenta de Instagram para informar a sus miles de seguidores de sus avances con la enfermedad. Su última publicación fue un vídeo el 4 de febrero,
Día Mundial del Cáncer, en el que se ve al hijo de Ana Obregón con buen aspecto durante una reunión con la gente de su empresa, Polar Marketing.
“Hoy es un día muy importante para todas las personas que estamos luchando contra este resfriado tan puñetero y quería aprovechar para mandar un abrazo muy fuerte desde el corazón a tod@s mis luchadores/as.
Mucha fuerza y ánimo”, contaba mientras informaba de sus futuros proyectos laborales.
A principios de enero, Lequio acudió a una revisión a la clínica madrileña.
Entonces también estuvo acompañado de la actriz Ana Obregón aunque en esa ocasión no fue necesario que se quedara ingresado. No ocurrió lo mismo un mes antes, en diciembre, cuando Álex Lequio tuvo que cancelar su asistencia a un evento solidario “por motivos de salud”.
Como aclaró su madre solo unos días después, se trataba de “una bajada de defensas, no una recaída”, como alertaron algunos medios de comunicación. “No se trata de una recaída, bajan las defensas con los tratamientos pero es lo normal”, aseguró Obregón a la revista Lecturas. No se descarta que en esta ocasión haya ocurrido lo mismo.
Álex Lequio comenzó su batalla contra el cáncer, una enfermedad que empezó como un simple “tirón de espalda”, en marzo de 2018. Desde que hace un año y medio regresara a España después de siete meses en Estados Unidos tratándose en el prestigioso Memorial Sloan Kettering Cancer Center de Nueva York, el hijo de Obregón y Lequio ha ido informado de su estado de salud a través de sus redes sociales y en algunas entrevistas.
Salvo contados episodios en los que Lequio ha tenido que parar su vida para volver a recibir quimioterapia, tanto en Madrid, como en Pamplona y el pasado septiembre en Barcelona, el joven ha recuperado en los últimos meses su vida personal y profesional. “No para de trabajar, hasta en los hospitales está con el ordenador dale que te pego”, asegura su madre, quien no duda en rechazar o posponer sus compromisos profesionales para estar siempre al lado de su hijo.
