Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

24 nov 2019

Cuando uno ya no sabe por qué...........................Javier Marías

A veces pienso que, si hoy se preguntara a algunos de dónde viene el odio y la furia, no sabrían contestar, o no con coherencia.


Cuando uno ya no sabe por qué


VIAJÉ A CATALUÑA el día después de la sentencia del procés, y allí permanecí las siguientes tres semanas.
 Me acerqué a Barcelona sólo una vez, en medio de los fragores pero a horas de tregua, así que nada más vi sus efectos. 
Los incendios, las barricadas, las batallas campales, por televisión, como la mayoría de ustedes.
 Donde me encontraba había calma, aunque una especie de contaminación de enfado y enemistades se notaba en el aire.
 Una mañana bajé a echar basura a los contenedores, y una señora de normalísimo aspecto me reconoció y me dijo: “¿Por qué no escribe un artículo diciendo que en Cataluña no nos estamos matando los unos a los otros, ni nos comemos a los niños?”
 Le contesté que lo haría con gusto de darse el caso, pero que no había leído ni oído que nadie afirmara semejantes cosas.
 Sin apenas transición, me preguntó: “¿Ha visto los vídeos de la policía saqueando las tiendas durante los disturbios?” Le dije que no y que me parecía improbable:
 “Los policías y los mossos están muy controlados”. 
Se empeñó en mostrarme las imágenes.
Sacó su móvil y me enseñó a unos policías (creo, hacía sol y estábamos en la calle) en el interior de un comercio, trajinando. 
“Yo no veo que estén saqueando”, apunté; “pueden estar recogiendo, o verificando desperfectos, quién sabe”. 
Su respuesta fue tan tajante que el diálogo resultaba imposible, como si me hubiera espetado:
 “¿Va a dar más crédito a sus ojos que a los míos?” “Pues yo los veo saqueando”, concluyó.
 Me limité a añadir: “Qué quiere que le diga. Pero insisto en que me parece improbable; están muy controlados y ellos mismos graban con cámaras sus intervenciones”. 

Me quedé muy pensativo. 
Si esa señora (educada y tratable) había recibido el vídeo en su móvil con la falsedad de que los agentes estaban robando, no sólo la daba por buena y cierta, sino que veía lo que le habían indicado que viera, por más que no se viera y que las imágenes fueran neutras y nada elocuentes. 
Que corran por las redes todo tipo de montajes, falsificaciones, escenas sacadas de contexto y “explicadas” con mala fe, bueno, es lo propio de las redes, y con ocasión del referéndum del 1-O ya circularon fotos y vídeos que, para exagerar la bruta reacción del Ministro del Interior Zoido, no se correspondían con el lugar ni la fecha.
 Lo que me dejó meditabundo fue que la señora se creyera la consigna a pie juntillas y viera lo que le habían sugerido que viera. Estamos en un punto, pensé, en el que demasiados catalanes han perdido de vista por qué sucede lo que allí sucede. 
Hace pocos años era un sitio en el que se vivía comparativamente de maravilla (aún es así, pese a los denodados esfuerzos de los independentistas para arruinarlo):
 una de las regiones más prósperas de Europa, es decir, del mundo; dinámica y llena de atractivos, con el único peligro de morir de excesivo éxito a manos de los turistas; 
con un autogobierno que ni siquiera disfrutan los Länder de un país federal como Alemania; con sus propios Parlament y Govern y docenas de competencias transferidas; con su lengua y su cultura cuidadas y mimadas; un lugar plenamente libre, en el que se vota sin cortapisas desde hace cuarenta años y cuyos principales partidos han participado en la gobernación del Estado.
 La idea demente de que en realidad los catalanes viven oprimidos y expoliados ha sido inoculada por una cuadrilla de políticos sin escrúpulos y por sus medios serviles, que —eso dicen muchos catalanes— no tenían otra intención que crear una gigantesca cortina de humo que tapara la famosa corrupción conocida como “comisiones del 3%” (la cual, según esos catalanes, sería más bien del 4% o el 5%). 
Lo asombroso es que, si esa era la cuestión, lo hayan conseguido con creces: hace años que ya no se habla del 3%. 
Ni siquiera se habla de la monstruosa fortuna amasada y confesada por Jordi Pujol y su progenie. 
Ante la maniobra de diversión del procés, es como si nada de eso hubiera ocurrido, o como si no importara.
 
Yo no creo que los catalanes decentes sean tan indiferentes al latrocinio institucionalizado de sus líderes señoritiles. 
A veces pienso que, si hoy se preguntara a algunos de dónde viene el odio que expresaban los rostros de quienes insultaron, escupieron y golpearon a los invitados a los Premios Princesa de Girona; de dónde viene la furia de los que queman Barcelona y cortan el ferrocarril y las carreteras; de dónde la imperiosa necesidad de crear un Estado propio abocado a ser un Estado-paria, yéndoles las cosas tan objetivamente bien como les iban, esas personas no sabrían contestar, o no con coherencia y verosimilitud.
 Nadie en el mundo se siente afrentado por lo que pasó en 1714, sería tan ridículo como si los madrileños aún odiáramos a los franceses por la carga de los mamelucos y los fusilamientos de 1808, casi un siglo más cercanos.
 Cuando uno ya no sabe el porqué de sus odios, pasiones y acciones, cuando uno es incapaz de pararse a pensar si hay para tanto y si en verdad está esclavizado, o si solamente lo han persuadido de que lo está unos políticos egoístas, codiciosos y culpables de un fraude masivo… Si uno no es capaz de desenmascararlos y de salir del engaño y del ensalmo, sólo cabe que otros insistamos cuando haga falta y les digamos, al menos, que la mayoría de sus compatriotas no vemos lo que se los ha inducido a ver, desde hace ya siete largos años.

Cuando uno ya no sabe por qué

22 nov 2019

la cara oscura de JFK

Conexiones con la mafia, infidelidades, invención de su pasado: la cara oscura de JFK.

Hoy es el aniversario del asesinato de John Fitzgerald Kennedy, el presidente número 35 de Estados Unidos. 

Un mito de la cultura popular que se ha ido resquebrajando según se conocían sus secretos.

El presidente John F. Kennedy fuma un cigarro durante una cena de recaudación de fondos demócrata en la Universidad de Boston.. En vídeo, José María Mulet explica el asesinato de Kennedy en un vídeo de EL PAÍS SEMANAL publicado el 8 de julio de 2019.
John Fitzgerald Kennedy (1917-1963) ha pasado a la historia popular como el presidente que encarna el ideal americano. Joven, guapo, encantador, enérgico, firme en sus convicciones, pero dialogante y progresista. 
El primer católico que llegó al despacho oval, el líder que plantó cara a la URSS en la crisis de los misiles y cuya determinación llevó al hombre a la Luna
El hombre empeñado en renovar y rejuvenecer la democracia de su país que con su mujer, la bella e inteligente Jackie Kennedy, convirtió la Casa Blanca en un nuevo Camelot.
 Su asesinato, el 22 de noviembre de 1963, hace ahora 56 años en Dallas, por el disparo de Lee Harvey Oswald le ha convertido en un mártir de la cultura popular como el Che, Marilyn Monroe o James Dean.
Más aún, después de que las tesis conspirativas sobre su muerte, convertidas casi en certezas por Oliver Stone en la película JFK (1992), hicieran que todo el mundo conociera la teoría de la bala mágica.
 Aquel filme convirtió al fiscal Jim Garrison, interpretado por Kevin Costner, en el paradigma del incorruptible buscador de la verdad frente a un aparato del Estado corrupto. Kennedy era un rey bueno asesinado por las cloacas del Estado y la mafia, a la que, decían, se había enfrentado.
Pero con los años, el mito JFK ha mostrado sus debilidades y contradicciones. 
Un buen puñado de obras, desde memorias de colaboradores a sesudas investigaciones históricas han revelado esa cara oscura.
 Estos son algunos de esos descubrimientos.

Fue un producto de 'marketing'

JFK no salió de la nada.
 Para muchos era un producto creado por su padre, Joseph P. Kennedy, un magnate que desempeñó importantes cargos en la Administración estadounidense.
 El fundador del clan tiene una biografía llena de puntos oscuros, como reveló The Patriach, una monumental obra biográfica de 800 páginas firmada por David Nasaw y publicada en 2012.
Nacido en 1888 en una familia de inmigrantes católicos irlandeses, Joseph P. Kennedy fue, escribe Nasaw, "un hombre de talentos ilimitados, encanto magnético, energía implacable y ambición desenfrenada".
 Educado en Harvard, "luchó para abrir puertas que estaban cerradas para él [como católico irlandés] y después de forzar su entrada se negó a cumplir las reglas". 
Por ejemplo en Wall Street, donde ganó una fortuna antes de cumplir los 40, fortuna que allanó el camino de su hijo a la Casa Blanca.

¿El matrimonio perfecto? Años después de su muerte se desvelaron las continuas infidelidades de John Fitzgerald Kennedy a su esposa, Jackie Kennedy. En la imagen los dos llegan al aeropuerto de Dallas justo el día en que él murió tiroteado en 1963.
¿El matrimonio perfecto? Años después de su muerte se desvelaron las continuas infidelidades de John Fitzgerald Kennedy a su esposa, Jackie Kennedy. En la imagen los dos llegan al aeropuerto de Dallas justo el día en que él murió tiroteado en 1963. Getty Images
 
 
Como primer presidente de la Comisión de Bolsa y Valores de Roosevelt, se esforzó por regular el mercado para que otros no pudieran hacer uso de los mismos trucos y agujeros que él había aprovechado para enriquecerse.
 Cometió grandes errores de cálculo.
 Por ejemplo, estaba convencido de que la victoria nazi era inevitable, que la democracia en las islas británicas estaba acabada y que era necesario pactar con Hitler. 
Tras la muerte del primogénito en la Segunda Guerra Mundial, su obsesión fue llevar a su segundo hijo, John Fitzgerald, a la presidencia.

Compra de primarias e invitación a una menor a su habitación

En An unfinished life: John F. Kennedy, 1917-1963, publicado en 2001, el autor, Robert Dallek, reveló de forma detallada cómo John Fitzgerald Kennedy compró las primarias de West Virginia en 1960. 
Dallek presenta a un JFK que durante esa misma campaña de 1960 en la que su padre gastó millones, parecía no darle importancia al resultado. 
El autor subraya que se lo jugó todo invitando a una animadora menor de edad a su habitación de su hotel.
 

Ganó un Pulitzer por un libro que no escribió

En 1956, siendo senador por Massachusetts, Kennedy publicó Profiles in courage, un libro de perfiles de ocho senadores estadounidenses que ganó el Pulitzer a mejor biografía.
 En The Kennedy Imprisonment: A Meditation on Power (1982), Garry Wills sostiene que JFK no fue el auténtico autor y lo atribuye a Theodore Sorenson y Jules Davids (profesor de historia de Jackie Kennedy en Georgetown). También defiende que el libro fue pagado por Joe Kennedy, obsesionado en aumentar el prestigio intelectual de su vástago.

Falseó sus orígenes

Kennedy nació en una ciudad del Gran Boston, Brookline, Massachusets, en 1917 y fue senador por ese Estado desde 1952 hasta que fue elegido presidente en 1961. 
Los Kennedy siempre se vendieron como católicos irlandeses de Boston.
 Algo irreal, según el libro de Willis: “Los padres de Kennedy se mudaron de Brookline a Nueva York en 1926, cuando él tenía nueve años y creció y fue a la escuela allí. Cuando decidió presentarse para el Congreso en 1946, no había vivido en Boston en 20 años; tuvo que alquilar habitaciones en el Hotel Bellevue, que fue durante un tiempo su residencia oficial.
 Un amigo de Kennedy lo expresó de forma clara: 'Jack Kennedy era un extraño en Boston, había vivido de joven en Nueva York y en Hyannis Port, en Cape Cod”.

 

Joseph Kennedy (1888 - 1969) susurra algo al oido de a su nueva nuera Jacqueline Bouvier el día de su boda, mientras su esposo John F. Kennedy mira, sonrient. Fue en Newport, Rhode Island, el 12 de septiembre de 1953.
Joseph Kennedy (1888 - 1969) susurra algo al oido de a su nueva nuera Jacqueline Bouvier el día de su boda, mientras su esposo John F. Kennedy mira, sonrient. Fue en Newport, Rhode Island, el 12 de septiembre de 1953. Getty Images

Era un mujeriego y organizaba fiestas con prostitutas

Uno de los libros más polémicos sobre JFK es La cara oscura de Camelot, del periodista de investigación Seymour M. Hersh.
 En él cuatro agentes retirados del servicio secreto hablan de ligues presidenciales que se producían, dicen, casi a diario.
 Según el libro, prostitutas y amigas de JFK se divertían en fiestas en la piscina de la Casa Blanca mientras los agentes cuidaban de que Jacqueline Kennedy no estuviera cerca. 
Esa libido desaforada de JFK, asegura Hersh, le hizo víctima de enfermedades venéreas y ser blanco fácil de chantajes. Sin embargo, y a pesar de la creencia popular, no se ha podido demostrar que JFK o su hermano Robert tuvieran una relación con Marilyn Monroe.

Conexiones con la mafia

Seymour M. Hersh, que ganó el Pulitzer por un libro sobre la matanza de My Lai, asegura en el texto que en 1960, para empujar a su hijo hacia la Presidencia, Joseph P. Kennedy (el padre de JFK) celebró una reunión secreta con el mafioso de Chicago Sam Giancana. 
El patriarca de la familia presuntamente prometió una Casa Blanca que haría la vista gorda a sus actividades si los sindicatos dirigidos por la mafia proporcionaban fuerza y dinero para conseguir la candidatura de Kennedy. 
Ese acuerdo, afirma Hersh, inclinó la balanza por los decisivos votos electorales de Illinois.

Su papel en bahía de Cochinos

Kennedy presuntamente apoyó un plan de la CIA para matar a Fidel Castro justo antes de la invasión de Cuba en 1961 por una brigada de exiliados cubanos en bahía de Cochinos.
 Cuando el intento de asesinato fracasó, JFK decidió bloquear el apoyo aéreo que le había prometido a los exiliados cubanos y que era crucial para el éxito del desembarco. 
 Ellos, sin saberlo, continuaron con su objetivo.
 Hersh asegura que la decisión de JFK fue para ellos "una sentencia de muerte".

Estaba obsesionado con matar a Fidel Castro

Una última afirmación de Hersh. Kennedy y su hermano Robert, el fiscal general estadounidense, pidieron constantemente a la CIA que asesinara a Fidel Castro.
 Hersh cita a Samuel Halpern, un antiguo miembro de la CIA especializado en operaciones clandestinas: 
"No sabes lo que es la presión hasta que tienes a esos dos hijos de puta sobre ti. 
 Sentíamos que estábamos haciendo cosas en Cuba debido a una vendetta familiar y no por el bien de los Estados Unidos”.


 

21 nov 2019

Beatrice Borromeo, la nuera de Carolina de Mónaco que está en contra de la aristocracia

La periodista italiana que está casada con Pierre Casiraghi, es una enemiga histórica de los Saboya, la familia real italiana, a quien ha vuelto a atacar recientemente por las redes sociales.

Beatrice Borromeo, con su hijo Franceso, en la celebración del Día de Mónaco, este martes.
Beatrice Borromeo, con su hijo Franceso, en la celebración del Día de Mónaco, este martes. GTRES

 

Beatrice Borromeo, la periodista italiana que está casada con Pierre Casiraghi, es una enemiga histórica de los Saboya, la familia real italiana, aún aspirantes al trono desaparecido.
 Como reportera, es una de las figuras en Italia que más ha indagado en la historia oscura de Víctor Manuel de Saboya, hijo del último rey de Italia, Humberto II, y que tiene un expediente dilatado de causas judiciales. 
Entre estas, se incluye una acusación y posterior absolución por homicidio y otra causa por corrupción, que se saldó con una breve estancia en prisión y una nueva exculpación.
 Después del tiempo de aparente paz que siguió a una época de cruce de denuncias en los tribunales, un vídeo de Manuel Filiberto de Saboya, primogénito de Víctor Manuel, en el que aparentemente anunciaba “el regreso de la monarquía” ha bastado para hacer que saltaran las chispas de nuevo.

En una primera grabación, que resultó ser un gancho publicitario para promocionar el estreno de la tercera temporada de la serie de Netflix The Crown, Manuel Filiberto, más conocido por sus apariciones televisivas en programas como Bailando con las estrellas, comunicaba de forma solemne “el regreso de la familia real”.
 Y añadía: “En estos tiempos complejos, ha llegado el momento de regresar y asegurar la paz, la confianza y la elegancia que hoy más que nunca son tan necesarios”.
 En un segundo vídeo, ya con el logotipo visible de la plataforma digital aclaraba:

 “Empieza una nueva temporada con la familia real, obviamente la inglesa”.
Poco después del primer vídeo, llegó la respuesta de Beatrice Borromeo que condensaba años de desavenencias: 
“Hasta que su familia pague por el asesinato de Hamer, hablar de un sentido del deber y la elegancia es simplemente inadmisible”, lanzó en Twitter.
 Se refería al caso del homicidio del turista alemán Dirk Hamer en 1978 en Córcega, en el que estuvo implicado Víctor Manuel de Saboya y que ella misma investigó años más tarde.
 El heredero del último rey italiano tenía anclado su yate en un amarradero de la isla cuando, fuera de sí por el robo de la lancha que utilizaba para trasladarse a tierra, empuñó una escopeta. 
La acusación alegó en su momento que Víctor Manuel efectuó varios disparos y que uno alcanzó a Hamer, que dormía en una embarcación cercana, ajeno a lo sucedido y que falleció a causa de las heridas. 
Después de un largo proceso, el príncipe fue absuelto en 1991 por un jurado popular de un tribunal de París.
 
Tiempo después, en 2006, el caso dio un viraje inesperado.
 Víctor Manuel se encontraba en una cárcel italiana, acusado de corrupción, asociación ilícita e inducción a la prostitución, supuestos todos de los que posteriormente fue absuelto, cuando una cámara oculta lo grabó contando a sus compañeros de celda cómo había engañado supuestamente al tribunal francés para que lo absolviera en el caso de homicidio.
 Varios medios italianos hicieron alusión a la información ofreciendo la transcripción de la supuesta confesión, pero en 2011, Borromeo publicó en Il Fatto Quotidiano el vídeo completo en exclusiva
 Las imágenes incluso inspiraron el libro de la hermana del turista fallecido, en el que repasaba el trágico suceso y que se tituló Delito sin castigo:
 La verdadera historia de Víctor Manuel . La propia Beatrice escribió la introducción del volumen.
Víctor Manuel de Saboya demandó por difamaciones al periódico y a Beatrice por publicar el vídeo y esgrimió que se trataba de un montaje artificial.
 La justicia italiana acabó dando la razón en 2015 al medio y a la periodista. 
“Ganar un caso siempre es agradable, pero si en contra de Víctor Manuel de Saboya, el placer es doble”, dijo entonces Borromeo.
En ese momento, la nuera de Carolina de Mónaco y Emanuele Filiberto de Saboya, se enzarzaron de nuevo en Twitter, después de que ella compartiera con él la sentencia del juez.
 “Inútil como tú”, respondió él.
 “Eres un poco como don Quijote”, añadió.

Beatrice Borromeo, de 34 años, tiene una dilatada trayectoria como periodista en Italia
Hace un par de años reconoció en una entrevista con la revista Vanity Fair que para ella fue “un sacrificio” abandonar su trabajo e instalarse en Mónaco tras casarse con Pierre Casiraghi en 2015. Desde entonces ha tratado de alzar una barrera entre su matrimonio y su vida profesional.
 En varias ocasiones, la joven, que también pertenece a una influyente estirpe de la aristocracia, se ha quejado públicamente de que desde que entró a formar parte de la familia real monegasca, su figura parece haberse reducido a la faceta de ‘esposa de’
 También ha reivindicado su labor como periodista y sus múltiples investigaciones, a menudo incómodas y relacionadas con asuntos de la mafia, —firmó un aplaudido documental sobre las mujeres de la Ndrangheta— con cuestiones sociales y con el exprimer ministro, Silvio Berlusconi.

Borromeo debutó en el periodismo de la mano de Michele Santoro, un reputado periodista italiano que le ofreció un espacio en su programa de televisión Anno Zero, después de leer una entrevista en la que ella se declaraba “atea y de izquierdas” y en la que también arremetía contra Berlusconi, a quien llegó a negarle el saludo “por no respetar a las mujeres”. 
Tras un par de años, abandonó el espacio televisivo y denunció “presiones” del entorno del ex primer ministro para dinamitar la retransmisión. 
“Bufón”, “inepto” o “enfermo de la cabeza” son algunos de los dardos que la italiana ha lanzado sobre el exCavaliere.

Tamara Falcó, la estrella de la familia Preysler a la que amas u odias

'MasterChef Celebrity' ha encumbrado a la hija del marqués de Griñón y de la 'reina de la prensa del corazón' que con su peculiar personalidad ha llegado a la final del concurso.

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Tamara Falcó, hija de Isabel Preysler y Carlos Falcó. Europa Press

 También desveló cómo se enteró de que su madre mantenía una relación con el Nobel. "A mami es muy difícil sacarla del camisón los sábados, pero un día dijo: 'niñas hoy viene a comer un amigo'

. Y la vi con un pantalón negro ajustado y dije: aquí hay tomate. Se lo dije a Ana y no se lo creía".

Sobre su personalidad tan a debate ha dicho frases como "Tengo ese conflicto entre vanidad y verdad". 
Pero no hay charla con Tamara Falcó en la que no salga a relucir su religiosidad. La Virgen María es mi ideal de mujer buena que pone las necesidades de Dios y su hijo por encima de las suyas" o 
 "No me importa mucho caer bien o mal. Sé que tengo un grupo de gente que me quiere, sé que Dios me ama, y el resto, qué le voy a hacer".
Tamara Falcó, con sus compañeros de 'MasterChef Celebrity'.
Tamara Falcó, con sus compañeros de 'MasterChef Celebrity'. GTRES
Cuando andaba despistada, la marca británica Burberry llamó a su puerta y descubrió que podía navegar sola por el mundo de las influencers.  
También ha sido bloguera en la revista ¡Hola!, colaboradora en el negocio de eventos que su padre puso en marcha en el Palacio El Rincón, la finca que posee en Aldea del Fresno (Madrid). 
Y después, decidió centrarse en el mundo de la moda y convertirse en diseñadora de su propia marca, TFP, que su madre luce de vez en cuando en las alfombras rojas.

Su padre dice de ella: "Tamara es dulzura, transparencia, alegría y sensibilidad”. Su madre opina. “Es inútil cambiar a Tamara. Es demasiado sincera, exagera las cosas, cambia algunas cosas, pero ella es así".
Sus padres han apoyado su aventura en televisión. Falcó le presentó a los hermanos Roca, que le aconsejaron y le abrieron sus cocinas. Preysler pidió a su cocinera que guiara los primeros pasos de su hija. 
 Ahora la socialité y Vargas Llosa ejercen de catadores especiales de su creaciones culinarias.
Sobre su experiencia en la cocina, Tamara Falcó echa mano de su peculiar personalidad:
 "Creía que sería mucho más fácil y es durísimo, además luego hay que limpiarlo todo".