Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

16 nov 2018

Cómo sé si lo que tengo es una mancha solar o es algo más grave

Las manchas no se tocan (hasta que las hayan mirado con este aparato)

 

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La gran perla de María Antonieta, vendida por 32 millones de euros

Una subasta en Ginebra saca a la luz diez piezas de la familia Borbón-Parma, vendidas en total por 38 millones de euros y que han roto todos los récords.

El colgante de perlas y diamantes de la reina Maria Antonieta, datado del siglo XVIII, en Ginebra, Suiza, el 7 de noviembre de 2018.  

El colgante de perlas y diamantes de la reina Maria Antonieta, datado del siglo XVIII, en Ginebra, Suiza, el 7 de noviembre de 2018. EFE

Un colgante de perlas y diamantes que perteneció a María Antonieta se vendió el miércoles por 36 millones de dólares (31,7 millones de euros) en una subasta de la casa Sotheby's en Ginebra, pulverizando todas las estimaciones.

La subasta, que se realizó en un hotel ultralujoso a orillas del lago de Ginebra, vivió una puja febril por una colección de diez piezas de la familia Borbón Parma, que incluyó la exhibición de joyas que se habían mantenido lejos de la mirada pública durante dos siglos. Las diez piezas a la venta, que estaban valoradas en tres millones de dólares, se vendieron al final por 43 millones de dólares (38 millones de euros), indicó Sotheby's. 
Entre ellas, un broche de diamantes que se estimaba en unos 80.000 dólares (70.000 euros) se vendió por 1,75 millones (1,5 millones de euros).

La estrella fue el colgante, con una perla natural con forma de pera de un tamaño excepcional (26 x 18 milímetros) y que estaba valorado en entre uno y dos millones de dólares. 
Finalmente fue adjudicado por 36 millones de dólares (31,8 millones de euros) a un comprador privado que quiso mantener el anonimato.
La perla de María Antonieta, con otras de las joyas de los Borbón Parma que se han vendido en subasta.  La perla de María Antonieta, con otras de las joyas de los Borbón Parma que se han vendido en subasta. 
Según la casa de subastas, el colgante establece un nuevo precio récord para una joya de perlas vendida en subasta. 
"El colgante de María Antonieta es sencillamente irreemplazable, y el precio que alcanzó va más allá de la propia joya", señaló en un comunicado Eddie LeVian, jefe ejecutivo de los joyeros LeVian.
Entre las piezas había también un anillo que contenía un mechón de cabello de la que fue esposa del rey Luis XVI, guillotinado junto a ella en 1793. 
También salían a la venta objetos que pertenecieron al rey Carlos X, a los archiduques de Austria y a los duques de Parma.
María Antonieta apreciaba también la alta relojería y muestra de ello es un reloj de bolsillo cuya caja lleva las iniciales MA, así como tres flores de lis, estimado en entre 1.000 y 2.000 dólares (890 y 1.800 euros).
Antes de intentar huir de Francia con el rey Luis XVI y sus hijos, María Antonieta envió sus joyas a Bruselas.
 Madame Campan, la primera doncella de cámara de María Antonieta, contó en sus memorias cómo pasó una noche entera en el Palacio de las Tullerías embalando con la reina sus joyas en algodón, para después ponerlas en un cofre de madera.

Los días posteriores, las joyas se enviaron a Bruselas, donde reinaba la hermana de la reina, María Cristina.
 Después se le confiaron al emperador de Austria, sobrino de María Antonieta, de origen austríaco. 
 Detenidos en Varennes, Luis XVI y María Antonieta fueron guillotinados en octubre de 1793.
 Su hijo Luis XVII murió en cautividad.

La única superviviente de la Revolución Francesa fue su hija, María Teresa de Francia, que fue puesta en libertad en diciembre de 1795.
 A su llegada a Viena, el emperador de Austria le entregó las joyas de su madre, celosamente conservadas.
Al no tener descendencia, María Teresa de Francia dejó parte de sus joyas a su sobrina e hija adoptiva, Luisa de Francia, duquesa de Parma y nieta del rey Carlos X, la cual, a su vez, las transmitió a su hijo Roberto I, último duque reinante de Parma.


 

Una boda de alfombra roja para Marta Ortega


Una boda de alfombra roja para Marta Ortega

La heredera del imperio Inditex ha contraído matrimonio en casa de su padre, Amancio Ortega, con Carlos Torretta tras algo más de dos años de relación


boda marta ortega
La fotografía oficial de la boda de Marta Ortega y Carlos Torretta.

La maldición de los Queensberry se cobra una nueva víctima

Suicidios, muertes extrañas, crímenes y escándalos sexuales rodean desde el siglo XIII a esta dinastía que acaba de sumar la muerte de 'Lady Beth', de 18 años, por sobredosis.


Lady Beth Douglas, en una publicación de julio de 2017.
Lady Beth Douglas, en una publicación de julio de 2017. Facebook

Suicidios, muertes en circunstancias extrañas, crímenes y escándalos sexuales rodean desde el siglo XIII a la dinastía Queensberry, una de las familias británicas más excéntricas y desgraciadas, que ha vivido su última desdicha con la muerte de la joven Beth Douglas, de solo 18 años, encontrada sin vida después de una sobredosis de heroína y cocaína e inmersa en graves problemas por sus adicciones. 

Conocida como Ling Ling por sus amigos y familiares y como Lady Beth en la prensa, fue hallada muerta en un apartamento del barrio londinense de Notting Hill.
 Hija del duodécimo marqués de Queensberry, David Douglas, de 88 años, y de su tercera mujer, la artista taiwanesa Hsueh-Chun Liao —de la que heredó sus ojos rasgados— arrastraba enormes conflictos desde hace años.
 Con 13 comenzó a sufrir problemas psicológicos que le llevaron a autolesionarse y con 17 fue internada en un centro psiquiátrico. 
El diario italiano Corriere della Sera desvela que la muerte, que se produjo el pasado mes de marzo pero cuya investigación acaba de concluir, se debió a una sobredosis de cocaína y heroína tras dos días de fiesta ininterrumpida.
 De hecho, “la pobre Beth todavía tenía las marcas de las jeringuillas en los brazos”, según detalla la publicación. 


Lady Beth Douglas, en una publicación de junio de 2017.
Lady Beth Douglas, en una publicación de junio de 2017. Facebook


Su novio, Jenan Herzog Karagoli, de 21 años, con quien compartió sus últimos 10 meses, ha revelado al periódico británico Daily Mail detalles de la vida de la aristócrata, como que ejercía la prostitución para conseguir dinero con el que comprar drogas. 
Explica que en los momentos previos a su muerte habían discutido por este motivo, y que la pelea terminó con él en un pub y ella ausente durante horas. 
“Ella me pidió que me sentara en el pub y disfrutara de mi cerveza mientras estaba con una amiga. Luego me llamó y me dijo que nos había conseguido una habitación de hotel para pasar la noche”. 
 El joven, que no ha dudado en contar todo esto a los tabloides, añade que le preguntó a su novia de dónde había sacado las 250 libras (287 euros) para la habitación.
 La respuesta de ella fue un misterioso “hice lo que tenía que hacer”. 
Escuchar esto produjo un “disgusto” en Herzog, quien afirma que tuvieron una nueva pelea “entre lágrimas en medio de un atracón de drogas de tres días”. 
“Sabía que algo había pasado, pero mi mente estaba demasiado nublada por el alcohol y las drogas.
 Le dije ‘Se lo que estás haciendo, puedes contármelo, no tienes que ocultarme nada y si estás desesperada porque no sabes cómo obtener dinero, yo te ayudaré’”. 
Herzog habla de Lady Beth como “una mujer maravillosa”, víctima de la ‘maldición de la dinastía Queensberry”.
 El golpe más duro para la joven fue el suicidio en 2009 de su hermanastro lord Milo Douglas, una de las personas a las que más quiso. 
Supone solo uno de los trágicos episodios de la controvertida saga británica, que se remonta al siglo XIII, cuando las desgracias eran consecuencia de las guerras que asolaron la familia.
 A partir del XVIII llegaron los problemas que se ganaron el sobrenombre de ‘maldición’, como la locura que sufrió James, marqués de Queensberry, encarcelado por sufrir problemas psicológicos. 
Escapó de su celda, se coló en la cocina del palacio, mató al cocinero y cocinó su cadáver. 
El siglo XIX fue el más oscuro. El octavo marqués de Queensberry se disparó durante una cacería, nunca se supo si por accidente o intencionadamente. 
Su segundo hijo, Francis, murió escalando en los Alpes y el tercero, James Edward, se cortó la garganta en un hotel de Londres. 
El episodio más famoso es el del noveno marqués de Queensberry, John Sholto. Su primer hijo, Francis, murió en un accidente de caza sobre el que siempre planeó la duda.
 El segundo, Alfred, más conocido como ‘Bosie’, fue acusado de mantener una relación homosexual con el escritor Oscar Wilde y encarcelado por ello. Bosie terminó casándose en 1902 con una mujer y teniendo un hijo apodado ‘el loco demente’.
 De desgracia en desgracia se llega hasta Alice, la hermanastra de 52 años de Lady Beth, conocida por ser expulsada de 13 escuelas y por casarse con Simon Melia, un ladrón que conoció en la prisión en la que ejercía de voluntaria y que terminó huyendo con la niñera. Lady Beth protagoniza la última fatalidad de una estirpe que ya no se escandaliza por nada.