La presentadora reapareció en 'El debate de Gran Hermano Revolution', pero su escasa participación y sus respuestas son carne de 'meme'.
María Teresa Campos, en el plató de Telecinco. GTRESONLIN
“Quiero contar una cosa que a todos les va a hacer ilusión.
Vuelve a la televisión alguien que fue pionera en hablar de Gran Hermano fuera de Gran Hermano (…) esa persona a la que tanto queremos y respetamos vuelve el domingo para trabajar conmigo: María Teresa Campos", así anunció el regreso de Campos a la pantalla chica el presentador de El debate de Gran Hermano Revolution Jordi González.
Pero las expectativas superaron la realidad. Se esperaba que el regreso de la presentadora de ¡Qué tiempo tan feliz! subiera la audiencia del programa y además marcara la vuelta a escena de Campos tras haber sufrido un ictus hace cuatro meses.
El resultado no fue ni lo uno ni lo otro.
Su paso por el plató dejó un agrio sabor de boca en los televidentes.
Las intervenciones de la presentadora malagaña fueron pocas y breves.
Su actitud tampoco ayudó. Desganada, incómoda y desinteresada, así se mostró durante los poco más de 90 minutos que estuvo sentada en el plató.
El programa duró cuatro horas.
"¿Se equivocó Miriam o no? ¿Tú qué dices, María Teresa?”, le
increpó González en un intento por hacer que Campos dijera algo. “¿Que
si se equivocó o no se equivocó? Pues yo no lo sé", respondió con
desgana.
Las críticas no se hicieron esperar y los #DBT1GH y #Sin24hNoHayGH –la etiqueta que se creó debido a que se cancelara la emisión de 24 horas en la web oficial- se llenaron de memes.
Unos mostraban a un niño durmiendo, como ejemplo de la nula participación de Campos, otros escribían que les gustaría trabajar como la malagueña, o sea, “solo sentarse y ya”.
Además de su escueta participación a Campos se le criticó que se retirará a mitad del show.
El programa decidió disculpar su abandono repentino del plató de Telecinco asegurando que se había tenido que retirar “a descansar” para poder viajar a Málaga donde hoy recogerá un premio.
Campos tras ver como su programa era retirado de la parrilla firmó un contrato de larga duración con Telecinco que ninguna de las partes ha explicado en que consiste.
Vuelve a la televisión alguien que fue pionera en hablar de Gran Hermano fuera de Gran Hermano (…) esa persona a la que tanto queremos y respetamos vuelve el domingo para trabajar conmigo: María Teresa Campos", así anunció el regreso de Campos a la pantalla chica el presentador de El debate de Gran Hermano Revolution Jordi González.
Pero las expectativas superaron la realidad. Se esperaba que el regreso de la presentadora de ¡Qué tiempo tan feliz! subiera la audiencia del programa y además marcara la vuelta a escena de Campos tras haber sufrido un ictus hace cuatro meses.
El resultado no fue ni lo uno ni lo otro.
Su paso por el plató dejó un agrio sabor de boca en los televidentes.
Las intervenciones de la presentadora malagaña fueron pocas y breves.
Su actitud tampoco ayudó. Desganada, incómoda y desinteresada, así se mostró durante los poco más de 90 minutos que estuvo sentada en el plató.
El programa duró cuatro horas.
Las críticas no se hicieron esperar y los #DBT1GH y #Sin24hNoHayGH –la etiqueta que se creó debido a que se cancelara la emisión de 24 horas en la web oficial- se llenaron de memes.
Unos mostraban a un niño durmiendo, como ejemplo de la nula participación de Campos, otros escribían que les gustaría trabajar como la malagueña, o sea, “solo sentarse y ya”.
Además de su escueta participación a Campos se le criticó que se retirará a mitad del show.
El programa decidió disculpar su abandono repentino del plató de Telecinco asegurando que se había tenido que retirar “a descansar” para poder viajar a Málaga donde hoy recogerá un premio.
Campos tras ver como su programa era retirado de la parrilla firmó un contrato de larga duración con Telecinco que ninguna de las partes ha explicado en que consiste.