Vaya Felipe, ya te das cuenta, tu sigues en tu puerta giratoria, no caes en ese lugar privilegiado donde te pusieron al dejar de ser Presidente. A Pedro Sánchez te guste o no lo han puesto los mismos o descendientes de los que te pusieron a ti, pero eso no lo quisistes entender ni Rubalcaba, ni Zapatero, vaya que la Susana, con nombre de Zarzuela no la querían los votantes del PSOE solo los andaluces, y mira que va desarreglada, ni ustedes en un principio fueron así, ni Pilar Miró que la hundieron por dos vestidos de Loewe, creo, para actos de representación, que yo haría lo mismo sino represento nada no me los compro, pero si, pues son gastos que se derivan a la caja del Partido, digo yo. No voy a ir, por ejemplo a un Festival de Cine vestida de zaparrastrosa, iría bien algo así como iba Carme Chacón de Purificación Garcia, no es barato pero el si el acto lo requiere no voy a los chinos a comprarme cualquier zarrio. Eso en los hombres no se nota, el traje puede ser de Armani o de Emilio Tucci, la corbata de Loewe, y el cinturón igual, los zapatos pues buenos y elegantes. En la ropa de los hombres nadie se fija. En las mujeres si, y mira lo que pasó con el caso Gurtel. Anda Felipe dale la enhorabuena a Pedro y pide disculpas, porque le hiciste la cama pero eso mismo hizo que hoy sea elejido.
El expresidente del Gobierno asegura que está en minoría en el partido y quiere ser optimista, pero no te dediques a despretigiar a Pedro Sánchez.Ya no ers nada, sorry, nada.
El expresidente del Gobierno Felipe González ha asegurado
este martes, tras protagonizar un debate sobre la unidad europea en el
Círculo de Bellas Artes de Madrid, que no quiere interferir en el PSOE, tras la victoria de Pedro Sánchez en las primarias del pasado domingo a la secretaría general del partido. "Quiero ser optimista y quiero, además, no interferir", ha manifestado.
González, que respaldó a la presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz,
ha admitido que, "como otras veces", se encuentra "en minoría" en el
partido, pero que ahora la organización debe seguir su proceso para
fortalecer el partido: "Que trabajen, que salga el congreso, que salga
un buen proyecto, que ayuden al secretario general, que vayan adelante".
Tras
una relación fluida con Sánchez durante buena parte de su etapa al
frente del PSOE, González admitió sentirse engañado en su decisión de no
abstenerse en la investidura para que el PP formara Gobierno, como,
según confesó, le había asegurado que haría.
A la pregunta de si él ayudará a ahora a Sánchez, ha
alegado: "Yo estoy jubilado y voy a ayudar en eso que hago. A quien me
pregunta, le respondo, pero interferir no interfiero, créame, nunca".
Sobre la posibilidad de que vuelva a confiar en Sánchez, ha sido
tajante: "No estoy en esos debates", pero ha añadido: "Hay que apoyar a
Sánchez. Eso es lo que quiere la mayoría y es lo justo". Algo así como Caperucita Roja y el Lobo Feroz. El expresidente ha participado en un debate organizado por EL PAÍS y la Fundación Alternativas bajo el título de Brexit pero no Frexit: ¿Adónde va Europa? En el coloquio han participado Michael Reid, editor sénior y columnista de The Economist, Mathieu de Taillac, corresponsal de Le Figaro y Andrea Rizzi, redactor jefe de Internacional de EL PAÍS. El encuentro ha sido moderado por la periodista Marta Fernández. Durante el coloquio, el expresidente del Gobierno ha capeado
las alusiones que le han hecho los periodistas respecto a la situación
que vive el socialismo, en consonancia con el divorcio que en Europa se
vive entre las elites y la ciudadanía. En la mención que le ha hecho
Reid se ha limitado a sonreír. En la que le ha hecho De Taillac, con
media carcajada, ha ironizado: "¿A [Benoït] Hamon? ¡Lo hemos exportado
aquí!". Y en la de Rizzi, ha admitido que la socialdemocracia, que es
"la que ha influido en todos los partidos transversalmente", está en
crisis, pero ha rescatado las palabras que le dijo Willy Brandt al
respecto antes de morir: "La ventaja de la socialdemocracia es que
siempre puede reiniciar caminos diferentes". "Pero yo solo soy un jubileta", se ha distanciado.Vaya y ¿antes no lo eras?
Las claves
de la industria de la moda de la última semana: Elle Fanning ficha para
L'Oréal o Balmain diseñará el vestuario del próximo ballet de la Ópera
de París.
Elle Fanning se suma a la lista de famosas de L’Oréal
L’Oréal París sigue ampliando la lista de rostros conocidos como
imagen de sus productos de belleza. La última en sumarse es la joven
actriz Elle Fanning. Como buena millennial, la intérprete, de 19 años, se encargó de hacer el anuncio a sus más de un millón de seguidores de su cuenta de Instagram:
“Estoy muy orgullosa de representar una firma que celebra la mujer.
Porque todas los valemos”. “Es el rostro de la nueva generación como una
actriz de éxito y también como una inspiración para maquilladores”,
dijo la compañía en un comunicado. Fanning, que firma su primer contrato
publicitario con una gran marca y ya ha rodado el primer anuncio de una
máscara de pestañas en un castillo de Francia, se suma así a una
familia de la que forman parte veteranas actrices como Susan Sarandon,
Jane Fonda o Juliane Moore.
La firma que inventó el biquini prepara su regreso
Louis Réard revolucionó la moda de baño en 1946 con el diseño del primer biquini, que anunció como “el traje de baño
más pequeño que el bañador más pequeño del mundo”. Pero desde que el
visionario diseñador muriera a finales de la década de los setenta, la
compañía pasó del éxito al olvido durante los últimos 30 años. Hasta
ahora: el exdiseñador de Chloe, Celine Adler, quiere revitalizar la
firma Réard Paris y ha anunciado una nueva colección de baño para este
verano . Una línea minimalista en estampados y formas con estilo de la
década de los setenta dirigida a mujeres
Balmain diseñará trajes para la ópera de París
Tras la colección de Balmain para H&M y el reciente anuncio de su colección de maquillaje para L’Oréal, Olivier Rousteing lleva la marca francesa a un nuevo terreno. El diseñador hará los trajes para el ballet Renassaince
de la Ópera de París. Un proyecto que realizará en colaboración con el
bailarín y coreógrafo Sébastien Bertaud y que se subirá a los escenarios
el 13 de junio. Dos mundos que no son tan distintos. “Cuando vistes a
alguien como Beyoncé, tienes que entender cada movimiento que hace
durante cada minuto del show. Y cuando aprendes a trabajar con
Sébastien y los bailarines principales, es más o menos el mismo proceso,
pero aprendiendo nuevos movimientos”, ha dicho el diseñador por
excelencia de los famosos al portal especializado en moda WWD. "Mi
ambición es crear un ballet clásico adaptado a los nuevos tiempos, así
que la idea era ser capaz de continuar con ese ADN mientras miro hacia
el futuro. Para mí, Olivier es la única persona que a día de hoy sabe
innovar respetando las técnicas tradicionales", asegura por su parte el
bailarín.
El británico, célebre por interpretar a 007 en siete películas, fallece en Suiza a los 89 años.
Roger Moore, en una imagen de la página oficial de 007
James Bond también es mortal. El actor británico Roger Moore
ha fallecido hoy en Suiza a los 89 años, debido a un cáncer, según
anunció su familia. Es el primer adiós a un intérprete del agente 007.
Moore, en concreto, fue Bond,
en siete películas de la saga oficial. Sustituyó a Sean Connery en el
papel, que mantuvo entre 1973 y 1985, siendo el actor que más veces ha
interpretado en el cine al personaje creado por Ian Fleming.
"Con gran tristeza tenemos que anunciar que nuestro querido padre, Sir
Roger Moore, ha muerto hoy en Suiza después de una breve pero valiente
batalla contra el cáncer. El amor del que estuvo rodeado en sus últimos
días fue tan grande que no puede medirse solo en palabras. Sabemos que
nuestro amor y admiración serán amplificado muchas veces, a través del
mundo, por gente que le conoció a través de sus películas, sus programas
de televisión y su apasionado trabajo con UNICEF [el actor era
embajador de la organización], que él consideró su mayor logro. El
afecto que nuestro padre sintió cada vez que se subió a un escenario o
se puso frente a una cámara le empujó a seguir trabajando con noventa
años, con su última aparición en noviembre de 2016 en la escena del
Royal Festival Hall de Londres. La multitud le vitoreó, dentro y fuera
del escenario, haciendo temblar los pilares del edificio, situado justo a
poca distancia de donde nació. Gracias Papá, por ser tú y por ser tan
especial para tanta gente", es el texto íntegro del comunicado difundido
por sus hijos. El británico fue, a la vez, el actor que asumió y dejó el
papel del espía en edad más avanzada: debutó en el rol con 43 años y
colgó traje y pistolas con 57. Más allá de su papel más conocido, el
currículo cinematográfico de Moore cuenta con más de 50 filmes y decenas
de apariciones televisivas, entre otras El santo y Los persuasores. Moore nació en Londres, en 1927. Tras pasar por el ejército
británico, entró en la Real Academia de Arte Dramático y empezó su
carrera teatral. "No eres tan bueno, así que sonríe mucho cada vez que
salgas", contaba el propio Moore que le dijo su primer agente, según
recoge la BBC.
El grupo Permira se había hecho con su marca y él se negaba a
convertirse en un empleado respondiendo a las órdenes de un jefe, así
que prefería irse a lo grande, con una gran retrospectiva en el Ara
Pacis de Roma y un último desfile de alta costura en el museo Rodin de
París al que asistieron Miuccia Prada, Alber Elbaz y Emmanuel Ungaro para mostrar sus respetos al patriarca.
Garavani, con su permanente bronceado un punto más tostado si cabe por
unas vacaciones recientes en Gstaad, caminó su última pasarela sin hacer
intento alguno por reprimir las lágrimas y se retiró a una vida nada
monacal.
El diseñador, que acaba de cumplir los 85 años, y su antiguo
socio y expareja, Giancarlo Giammetti, son probablemente las últimas
personas del mundo que mantienen las temporadas de la jet set a la antigua usanza, como si vivieran permanentemente en una fotografía de Slim Aarons.
Pasan cinco meses al año en su casa de Londres, dos en París,
coincidiendo con las semanas de la moda —este febrero, asistió a la
pasarela de la firma que fundaron— y dos en Nueva York, casi siempre
hacia finales de año, en las agitadas semanas previas a la Navidad, en
las que se les suele ver en galas y estrenos de cine. En 2014, por
ejemplo, coincidieron en el estreno de Un corazón normal con los aún casados Brad Pitt y Angelina Jolie y los cuatro se hicieron selfies. Por supuesto, empiezan el año en los Alpes y pasan el verano
recorriendo el Mediterráneo en su famoso yate, donde cuelgan los
retratos que Warhol hizo del diseñador. Mucho menos conocido y apenas
fotografiado es Bruce Hoeksema, el discreto arquitecto estadounidense
que se cree que ha sido pareja de Valentino durante los últimos 30 años.
Mientras, la casa que fundó en 1959 no solo no se ha hundido en el diluvio sino que vive uno de sus mejores momentos. A Alessandra Facchinetti, la inmediata sucesora de Garavani,
le sustituyó la discreta pareja profesional formada por Pierpaolo
Piccioli y Maria Grazia Chiuri en 2008. Desde el año pasado, cuando Chiuri dejó Valentino por Dior,
Piccioli quedó solo al mando de una firma que conserva algunos trazos
de la que ideó el fundador —en Valentino no hacen falta conceptos ni
excusas para crear una colección, solo vestidos bellos bien cortados—,
pero funciona de manera muy distinta. Ahora los accesorios, la
especialidad de Chiuri y Piccioli, suponen casi la mitad de las ventas,
en parte gracias a la exitosa línea Rockstud, nuevo emblema de la marca. Además, han ganado importancia la colección masculina y la segunda línea, Valentino RED. En conjunto, la firma superó los mil millones de dólares en beneficios en 2015 y conserva las excelentes relaciones con Hollywood y la industria de la alfombra roja que siempre fueron importantes para Garavani. Al fin y al cabo, él decidió hacerse diseñador tras ver Las chicas de Ziegfield (1941) en el cine, con Hedy Lamarr, Lana Turner y Judy Garland.
Su salto a la primera línea de la moda también se debió a una figura pública, cuando en 1964 una recién enviudada Jackeline Kennedy le compró seis vestidos en blanco y negro para su primer año de luto y el joven romano, que había aprendido con Balenciaga y Jean Dessès, se convirtió en el primer diseñador-celebrity, tan o más famoso que sus clientas.