Referente de Melania Trump en la investidura de su esposo como presidente de EE UU, la ex primera dama cautiva también en el cine.
El atuendo elegido por Melania Trump el día de la investidura de su marido como presidente de Estados Unidos no dejó lugar a dudas sobre qué icono de estilo había protagonizado el moodboard de su equipo de imagen.
Su vestido azul empolvado de cachemir, con bolero cruzado y guantes a juego, gritaba Jackie Kennedy.
Al instante, las redes se
llenaron de comparaciones entre el look de Melania y el que eligió la también primera dama para la investidura de su marido en 1961.
Más de medio siglo después de aquello, y a los 22 años de su muerte,
la viuda de JFK sigue siendo una influencia indiscutible en la moda, y
un referente obvio para sus sucesoras, y no solo en EE UU.
Cuando en
2008 Carla Bruni realizó su primera visita de Estado como madame Sarkozy a Reino Unido, sus guiños a Jackie, sombrero pillbox incluido, dejaron muy claro en qué espejo se estaba mirando.
Esta nueva revisión del legado de Jackie coincide con el estreno de una
esperada película centrada en su figura, que llegará a los cines
españoles el 17 de febrero.
Jackie, dirigida por el cineasta
chileno Pablo Larraín y protagonizada por Natalie Portman, que opta al
Oscar, se centra en los días inmediatamente posteriores al asesinato de
Kennedy.
“Jackie apreciaba mucho la belleza. Comencé a ver su armario como parte de la fachada de la que se rodeaba.
Era una parte de cómo quería ser vista, pero ella era mucho más que su ropa”.
Melania Trump, que no oculta su admiración por Jackie, también parece querer seguir su ejemplo a la hora de elegir un diseñador de cabecera que, además, la asesore en cuestiones de estilismo. Durante su paso por la Casa Blanca, el de Jackie fue Oleg Cassini y todo apunta a que la nueva primera dama estadounidense ha encontrado el suyo en Hervé Pierre, que, al igual que Cassini, es franco-estadounidense.
El primer diseño
El modisto fue director creativo de Carolina Herrera durante 14 años (abandonó la firma el pasado febrero), y previamente pasó por firmas como Balmain, Bill Blass, Vera Wang y Oscar de la Renta.
Según ha revelado a The New York Times, su relación con la primera dama, a quien hasta ese momento no conocía personalmente, comenzó el 3 de enero con un mensaje de texto en el que ella le pedía “un favor”: que diseñara su vestido en tiempo récord.
Acostumbrado a trabajar en la sombra, desde el pasado día 20 su teléfono no para de sonar.
Chanel, Givenchy, Dior... Jackie Kennedy tuvo acceso a todos los grandes nombres de la alta costura, y la firma Gucci incluso rebautizó un bolso en su honor.
Pero por ahora no parece que la historia vaya a repetirse con Melania, dado el gran número de diseñadores —entre ellos, Tom Ford o Marc Jacobs— que han declarado no estar dispuestos a colaborar con ella.
El poder de comunicación de la moda
El diseñador Hervé Pierre, que en el pasado ha vestido a varias
primeras damas como Laura Bush, Hillary Clinton o Michelle Obama, ha
defendido en una entrevista concedida al diario The New York Times que
él hace “vestidos, no política”.
Pero como Jackie Kennedy fue la primera en comprender, la moda también es un poderoso vehículo de comunicación. Parece que también lo sabe Melania Trump.
Pero como Jackie Kennedy fue la primera en comprender, la moda también es un poderoso vehículo de comunicación. Parece que también lo sabe Melania Trump.