Según el documento aprobado por el juez, el actor podrá ver a los pequeños bajo supervisión y deberá asistir a terapia y someterse a pruebas de drogas aleatorias.
Aunque han decidido mantener en privado las cuestiones sobre su divorcio, después de que el anuncio de su separación el pasado septiembre protagonizara decenas de titulares, parece algo imposible para Angelina Jolie y Brad Pitt.
Ahora se ha sabido que la expareja de actores ha formalizado ante el juez una prolongación del acuerdo al que habían llegado el pasado noviembre con respecto a la custodia de sus seis hijos.
Tal y como estaba establecido, la oscarizada actriz mantendrá la custodia física de Maddox (15 años), Pax (12), Zahara (11), Shiloh (10) y los mellizos de 8 años Knox y Vivienne, mientras que su todavía marido les seguirá visitando bajo la atenta mirada de su supervisor.
El actor y productor tendrá que seguir acudiendo a terapia individual y de grupo una vez por semana y deberá someterse a cuatro pruebas por sorpresa al mes para detectar alcohol y drogas, según los documentos obtenidos por la revista People.
Un acuerdo al que llegaron tras su separación después de que el actor discutiera en pleno vuelo con su hijo mayor, Maddox, al parecer estando bajo los efectos del alcohol.
Según múltiples fuentes, este incidente, que incluso fue investigado por el FBI, fue el detonante que llevó a la intérprete de Tomb Raider o Maléfica a solicitar el divorcio de quien ha sido su pareja durante 12 años.
Ahora se ha sabido que la expareja de actores ha formalizado ante el juez una prolongación del acuerdo al que habían llegado el pasado noviembre con respecto a la custodia de sus seis hijos. Tal y como estaba establecido, la oscarizada actriz mantendrá la custodia física de Maddox (15 años), Pax (12), Zahara (11), Shiloh (10) y los mellizos de 8 años Knox y Vivienne, mientras que su todavía marido les seguirá visitando bajo la atenta mirada de su supervisor.
El actor y productor tendrá que seguir acudiendo a terapia individual y de grupo una vez por semana y deberá someterse a cuatro pruebas por sorpresa al mes para detectar alcohol y drogas, según los documentos obtenidos por la revista People.
Un acuerdo al que llegaron tras su separación después de que el actor discutiera en pleno vuelo con su hijo mayor, Maddox, al parecer estando bajo los efectos del alcohol.
Según múltiples fuentes, este incidente, que incluso fue investigado por el FBI, fue el detonante que llevó a la intérprete de Tomb Raider o Maléfica a solicitar el divorcio de quien ha sido su pareja durante 12 años.