Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

10 mar 2016

El BCE baja el tipo general al 0% y amplía la compra de bonos........................................... Claudi Pérez

Los tipos quedan en el 0%, frente al 0,05% anterior, y la penalización de la liquidez de los bancos sube hasta el 0,4%.

 

El presidente del Banco Central Europeo, Mario Draghi REUTERS
Todo el arsenal
. Y relativamente por sorpresa: con una estupenda gestión de las expectativas. El BCE ha anunciado al filo de las dos de la tarde su versión ultimo modelo del "haré todo lo necesario"
 de Mario Draghi. 
Tipos aun mas bajos. Compras de activos sin más multimillonarias.
 Y nueva barra libre de liquidez a la banca.
 El paquete completo ante los riesgos de deflación, la desaceleración de la eurozona y, en fin, la preocupante fase anémica en la que se ha metido la economía europea.

Draghi no ha decepcionado y los mercados han reaccionado de inmediato. 
El BCE, según el consenso que emerge entre los analistas, suele llegar tarde a su cita con los problemas, pero cuando llega lo hace bien: Draghi es consciente de que puede esperar muy poca ayuda por el lago fiscal y saca todo su arsenal, con un refuerzo sensacional del QE y del resto de medidas extraordinarias en pleno octavo año de esta crisis extraordinaria.
El tipo de interés de referencia en la eurozona pasa a ser del 0%, frente al 0,05% anterior.
El Eurobanco también recorta en 10 puntos básicos adicional el interés aplicado a su facilidad de depósito (el dinero al que se retribuye o se penaliza la liquidez bancaria), que pasará a ser del -0,40% desde el -0,30% actual la institución; amplía de 60.000 a 80.000 millones el volumen de deuda que puede comprar mensualmente en el marco del QE lanzado hace justo un año y lanza dos nuevas subastas de liquidez (TLTRO) para junio.
El instituto emisor europeo también incluirá en su plan de compra de deuda todos los bonos emitidos por empresas radicadas en la eurozona: hasta ahora solo podía adquirir títulos emitidos por el Estado

Con esta ampliación del programa de compra masiva de deuda, en combinación con la nueva bajada de tipos, el Eurobanco demuestra una buena gestión de las expectativas que había depositadas para esta reunión.
El mercado esperaba medidas potentes pero que, a la vez, no dañasen en exceso las cuentas de resultados de los grandes bancos europeos, uno de los mayores elementos de preocupación de las últimas semanas.
 De alguna forma, el BCE parece haberlo cumplido: incluso antes de que Draghi empezase su comparecencia, los principales parqués europeos han respondido con una subida superior al 3%. El euro, por su parte, se debilita un 1% frente al dólar, una bajada de calado en un mercado tan estable como el de divisas.
 La moneda europea no caía tanto frente al billete verde desde noviembre.
En su comparecencia de prensa, el banquero italiano ha optado una vez más por un tono pesimista sobre los riesgos que acechan a la banca europea para respaldar las importantes medidas de política anunciadas hoy
. Incluso con los efectos esperados sobre la economía de esta nueva batería monetaria, el Eurobanco espera que el nivel general de precios se mantenga ampliamente por debajo del objetivo del 2% en los dos próximos años
. Según sus cálculos, el nivel general de precios de la eurozona repuntará un leve 0,1% este año, un 1,3% en 2017 y un 1,6% en 2018
. En este entorno, marcado por el desplome de los precios del crudo, la desaceleración de los países emergentes y la débil recuperación económica del bloque europeo
,  Draghi ha remarcado que los tipos de interés se quedarán en el nivel actual (mínimo histórico) o incluso por debajo durante un periodo de tiempo "considerable".
Los primeros analistas en valorar la nueva artillería del BCE también aplauden las medidas puestas encima de la mesa. "Es un nuevo 'haré lo que haya que hacer'", resume Stewart Robertson, de Aviva, en declaraciones a Bloomberg, en referencia explícita al mensaje lanzado por Draghi en el tumultuoso verano de 2012, cuando mostró su disposición a tomar todas las medidas que fuesen necesarias para salvar el euro.
 "Ahora habrá que comprobar si estas medidas verdaderamente calan en la economía real", añade.
En las últimas semanas se ha constatado la debilidad de las presiones inflacionistas en la zona euro, cuyo índice adelantado bajó en febrero al -0,2%, mientras el crecimiento del PIB de la región cerró el ejercicio 2015 con una expansión del 1,6%, frente al 0,9% de 2014, con un repunte del 0,3% en el último trimestre del año pasado, en línea con la expansión del tercer trimestre.


9 mar 2016

Así ha cambiado Charlene 10 años después de llegar a Mónaco

 
 

Charlene Wittstoch se convirtió oficialmente en la novia de Alberto de Mónaco en 2006, aunque se habían conocido seis años antes.
 Ese verano ya acudió a la Gala de la Cruz Roja donde se sentó junto al diseñador alemán Karl Lagerfeld en presencia de Carolina de Mónaco. 



La nadadora sudafricana Charlene Wittscok acudió al Baile de la Rosa de la Cruz Roja en Montecarlo en 2007 acompañando al príncipe Alberto de Mónaco.
 Para entonces, la deportista ya se había instalado y residía en el Principado. 




El príncipe Alberto de Mónaco y Charlene Wittstock a su llegada a la ceremonia de apertura de la 12ª edición de los Juegos de los Pequeños Estados de Europa, en Mónaco, en 2007. Su relación eran pública, pero no formal. 


Alberto II de Mónaco, su sobrino Pierre Casiraghi y Charlene Wittstock se bañaron juntos en el mar Mediterráneo en 2009, como marca la tradición del principado en las fechas pre navideñas.
 La nadadora, por aquel entonces, ya estaba integrada formalmente en la familia.



La foto oficial del compromiso del príncipe Alberto de Mónaco y la nadadora olímpica sudafricana, Charlene Wittstock, llegó en 2010.
 El anuncio se produjo tras cinco años de noviazgo. 



El príncipe Alberto II de Mónaco, Charlene Wittstock y Carolina de Mónaco bailan durante los conciertos de Iggy Pop y los Stooges y ZZ Top, en Mónaco en 2010, días antes de su boda. 
 

Alberto y Charlene Wittstock bailan en la edición 62º del Baile de la Cruz Roja, en el Sporting Club Salle des Etoiles en Mónaco, durante el evento tradicional de caridad en 2010. 
La nadadora muestra ya un importante cambio de imagen. 


Charlene Wittstock, en uno de los conciertos organizados en verano de 2011 para celebrar el enlace del príncipe Alberto. 



Charlene y Alberto de Mónaco el día de su boda civil en el Montecarlo, el 1 de julio de 2011. 




El 2 de julio, Charlene se enfundó un traje de novia de Armani para convertirse oficialmente en princesa de Mónaco tras su boda religiosa con Alberto, celebrada en el Palacio de Mónaco. 



Charlene y Alberto de Mónaco posan en la alfombra roja a su llegada a la 84º entrega de los premios Oscar, en febrero de 2012.




Charlene de Mónaco, en el día Nacional de Mónaco de 2012. 



Exnadadora olímica, en mayo de 2013 Charlene de Mónaco se sumergió en la piscina junto a Khwezi Duma -atleta de 16 años que se prepara para los Juegos de Río- durante una visita a su país natal, Sudáfrica.


Como es habitual en el Día Nacional de Mónaco, la familia Grimaldi al completo saluda a los habitantes del Principado desde los balcones de Palacio. En 2013, el rostro compungido de Charlene de Mónaco volvió a hacer saltar las alarmas sobre su situación en Palacio. 
Hacía dos años que se había casado con Alberto y todavía no había nacido su heredero legítimo. 




Una de las primeras imágenes de Charlene de Mónaco en las que se apreciaba ya su incipiente embarazo, era el mes de agosto de 2014. La pareja no faltó a la cita del Baile de la Cruz Roja organizado cada año.



Bautizo de los mellizos del Príncipe Alberto y Charlene de Mónaco, Jacques Honoré Rainier y Gabriella Thérèse Mari, en mayo de 2015, seis meses después de que el Principado celebrara su nacimiento.


Primera foto de familia al completo en el balcón de Palacio en el Día Nacional de Mónaco del año pasado.



Visita de Charlene y Alberto de Mónaco al papa Francisco en el Vatalicano el pasado mes de enero. Como marca el protocolo, la princesa se visito de blanco riguroso con mantilla incluída. 


 
 
Una de las imágenes más recientes de Charlene de Mónaco junto a su hijo, con quien acudió a finales de febrero a un partido de rugby.



El antes y el después de Charlene. Entre la foto de la izquierda y la derecha han pasado casi 10 años y numerosos retoques estéticos que han cambiado rostro y expresión de la princesa de Mónaco.

Mario Vargas Llosa presenta su novela 'Cinco Esquinas' con el apoyo de Isabel Preysler

El escritor peruano Mario Vargas Llosa está de estreno.
 Acaba de lanzar Cinco Esquinas, su nueva novela, y para presentarla por todo lo alto ha reunido este lunes por la noche en Madrid a un amplio y variado círculo de amigos que le han arropado en este importante acontecimiento.
Mario Vargas Llosa llegaba al Círculo de Bellas Artes, donde se celebró el evento, acompañado por su pareja, Isabel Presysler, que ha posado con él para las cámaras
. Decenas de admiradores y amigos, como Ana Botella, Alfonso de Borbón y Escasany (primo del rey Juan Carlos) y Marisa Yordi, Nuria González o Elena Benarroch, han ocupado todas los asientos disponibles en el Salón de Columnas del Círculo, en el que el literato ha presentado el libro.
Tras la lectura de las primeras páginas de la novela a cargo de su amiga la actriz Aitana Sánchez-Gijón, Mario Vargas Llosa ha desvelado algunas de las circunstancias de la creación de esta obra y sus claves. El Nobel, que cumplirá el 80 años el 28 de marzo, se ha reconocido muy querido por sus amigos, que le han organizado varias celebraciones en su honor, además de "muy enamorado", algo que ha repetido en dos ocasiones.
Enamorado y muy feliz, ya que el escritor no ha dejado de sonreír en todo el evento.
 Casi tanto como Isabel Preysler, que se ha mostrado como una admiradora más.
 Eso sí, con el privilegio de haber sido una de las primeras en leer la novela, que considera "apasionante". "Empiezas y no lo puedes soltar. Lo he leído de un tirón", asegura Isabel.

Marta Sanz: «Sufrir no nos hace más fuertes, normalmente nos debilita»................ Paula Bonet y Ángel L. Fernández Recuero

Marta Sanz para Jot down 0
Marta Sanz (Madrid, 1967) acaba de recibir el Premio Herralde por su recién publicada Farándula, una novela crítica que toma como excusa el mundo del teatro para abordar sin miramientos cuestiones sociales y culturales
. Lenguas muertas, Susana y los viejos o La lección de anatomía son otros de sus trabajos narrativos. Además de colaborar en medios como el ABC o Viento Sur, en su obra también encontramos poemarios y ensayos.
 Ácida sin mutilar la ternura, en sus libros cuelga la trama de una percha.
Nos sienta entre libros y fotografías después de abrirnos la puerta de su casa
. Conocemos a una mujer que no se desdobla en individuo y autora y que nos habla de lo que le duele y lo que le inquieta.
Hay un porcentaje bastante elevado entre las mujeres nacidas en los setenta y ochenta que elegimos no ser madre. ¿Es un monstruo la mujer que no quiere procrear?
Yo creo que no.
 No creo que seamos seres tremendamente monstruosos. 
Lo cuento en La lección de anatomía: cuando yo elijo no ser madre, no lo hago por ningún motivo ideológico, ni grandilocuente, ni político, ni de teoría de género, ni de nada por el estilo
. Decido no ser madre por miedo y no por un miedo que tenga que ver con lo psicológico o lo económico, con las posibilidades de darle a un hijo una educación, alimento, vestirlo.
 Se trata de un miedo físico, que arranca de los relatos sucesivos del parto de mi madre con los que mi madre me instruye prácticamente desde que tengo uso de razón.
Solo con palabras, nada de imágenes.

En absoluto, en aquella época era muy raro, tal vez imposible, grabar un vídeo del parto. 
Hoy hay gente que lo graba y te pone el vídeo, cosa que me parece de un mal gusto tremendo, igual que me parece que no tiene mucho sentido lo de enseñar las ecografías. 
Yo normalmente no veo nada. No sé si el niño es guapo o feo.
El caso es que los relatos de mi madre eran orales y minuciosos, y lo que cuento en La lección de anatomía creo que es verdad, constituye esa mitología fundacional de cada uno de nosotros que forma parte de nuestras verdades.
Por una parte, esos relatos de mi madre hacen que decida no ser madre por miedo físico a que una cosa tan grande pueda salir por un sitio tan pequeño; por otra parte, me invitan a narrar: me considero heredera en la palabra escrita de los relatos orales de mi madre, de la minuciosidad, del gusto por lo escatológico.
¿Esa animalidad no te atrae en ningún aspecto?
¿Por animalidad te refieres al hecho del parto?
 El hecho del parto no me atrae bajo ningún punto de vista, ni ético, ni estético, ni en mi vinculación con la naturaleza, ni en nada de nada.
 Simplemente me produce miedo y me hace pensar en un dolor enorme.
 Tal vez tendríamos que reivindicar más las cosas artificiales en un momento en que se reivindica tanto la naturalidad y lo natural.
 Siempre digo que soy partidaria de la anestesia y de los artificios que lo que hacen es paliar los excesos y las brutalidades de la naturaleza. 
 Me parece muy respetable —¡menos mal!— que muchas mujeres tengan ese contacto con su instinto que hace que el mundo siga.
 Me parece muy respetable y admirable, pero a mí no me pasa. Entonces, lo único que yo pido básicamente es que a estas mujeres que decidimos no ser madres por los motivos que sean no se nos considere monstruosas o no se nos considere mujeres. 
Lo que me parece completamente impúdico en la sociedad en la que vivimos es que se vincule de una manera unívoca maternidad-feminidad. 
No. Yo no soy madre y soy una mujer.
En tus novelas hay descripciones muy bestias.
Igual que hay cosas dentro de mi literatura que sí que puedo racionalizar y sé por qué quiero contarlas y de qué manera, también hay imágenes, hay expresiones, que no sabría explicar por qué surgen. Quizá, si me pongo a pensarlo, tienen que ver con esa repulsa hacia lo primario que casi siempre se asocia con la mujeres y que de alguna manera recorre toda la literatura
. Creo que todos mis textos son una manera de contradecir tópicos, frases hechas de nuestra civilización… 
Una de ellas es la que vincula la racionalidad con el señor, y la naturalidad y la tierra y la visceralidad con la figura de una mujer que casi siempre es madre o fuente de una maldad despiadada.
 De algún modo, todo eso se traduce en distintas metáforas que van salpicando la historia de la literatura universal…
La mujer siempre ha sido «la loca».
La loca, la irracional, la histérica, la visceral.
Dices que ahora, en el parto, respetas mucho que las mujeres, haciendo caso de su instinto, quieran parir de una forma natural. ¿Eso realmente es instinto o solo mercadotecnia?
Mira, en estas cosas quiero ser cauta.
 Quiero ser respetuosa tanto con la mujer que decide amamantar a su criatura hasta los diez años como con la que decide darle un biberón al poco de nacer porque tiene grietas o porque se tiene que ir a trabajar y sus condiciones económicas no le permiten ser «una buena madre» desde la perspectiva de los nuevos códigos.
 Entiendo que en este sentido cada mujer es un mundo, aunque comparto contigo que todas estamos absolutamente condicionadas por ciertos discursos y ciertos eslóganes que además van fluctuando con el paso del tiempo y que tienen que ver, por una parte, con las exigencias del mercado y, por otra, con los comportamientos y creencias con los que rellenamos la palabra «feminismo». 
Hay una imagen que me parece muy representativa de todo esto.
Recuerdo un relato de Alice Munro en el que habla de un personaje que acaba de tener un hijo, una hija, no recuerdo, y, para desvincularse del punto de vista animal de la maternidad —porque ella reivindica su condición de mujer más allá de la maternidad, más allá de la naturalidad y de las vísceras—, ella, mientras amamanta a su hija, fuma. 
Ese gesto, que hoy se consideraría egoísta y brutal, singularizaba a una mujer feminista en los años sesenta y setenta. 
Ahora se ha dado una vuelta de tuerca completamente diferente, estamos en la época del arraigo, de la lactancia a demanda, del colecho y demás.
 Es un mundo que yo personalmente no he vivido y no sé lo que haría si tuviera un hijo, pero mucho me temo que incluso por edad y por educación sería más parecida a Alice Munro.
 Aunque he dejado de fumar.
Por otra parte, con esto del fumar y no fumar de las mujeres, de cuidar la salud y hacer deporte, de comer sano, tanto nosotras como vosotros, creo que corremos el riesgo de ser muy moralistas. Parece que una de las imágenes más rechazables por la comunidad es la de una mujer embarazada fumando. O tomando un poquito de vino. Como si fueras una asesina, es terrible.
En tu última novela, Farándula, la trama discurre entre bambalinas; ¿qué relación tienes con el teatro?
Tengo una relación con el teatro psicoanalítica y completamente familiar.
 Cuando era niña mis padres estaban en una compañía de teatro de aficionados en Benidorm, que es donde pasé mi infancia.
 En aquella época sentía una empatía brutal con mi madre y me daba mucho miedo que se confundiera, que no se supiera bien el papel
. Este miedo me generó un rechazo físico al teatro
. Mi madre subía al escenario y a mí se me secaba la boca, se me revolvían las tripas, como cuando te va a preguntar el profesor en el colegio y no te sabes la lección. 
Todo esto hizo de mí una espectadora teatral nefasta, absolutamente nefasta.
 No he disfrutado de los espectáculos teatrales hasta que he sido muy mayor y me han explicado que no había necesidad de que me pusiera así, que para eso estaban los profesionales del teatro.
 Esta reacción física tan poderosa que tenía frente al teatro era algo que quería contar en Farándula porque ese es el tipo de vínculos entre el emisor de un discurso artístico y el receptor de un discurso artístico que a mí me gustaría recuperar.
 Ese tipo de profundidad, ese tipo de fisicidad, ese tipo de violencia y de sentirse completamente concernido y vulnerable frente a lo que te están contando.
Y esta es la excusa para abordar en la novela un trasfondo mucho más social.
Efectivamente, esa es la excusa para abordar el tema de la cultura tal y como lo hago en Farándula: dar mi visión de este cambio de modelo cultural que va de lo analógico a lo digital
. Por el camino nos estamos perdiendo muchas cosas.
 Me molesta que desde las mentalidades más progresistas y más abiertas, incluso más de izquierdas, cuando te atreves a hacer una pequeña crítica a los avances de la era de internet, automáticamente eres acusado de reaccionario: creo que de lo que se trata es de intentar aprovecharnos de las virtudes pero siendo muy conscientes también de los problemas y las limitaciones que acarrea.
En ocasiones has dicho que en tus novelas haces un ejercicio voluntario de demolición de la trama. ¿Con qué objeto?
Dentro de los elementos narrativos que constituyen el género, hay uno, el de la construcción de la trama, que es el que permite dentro de una novela crear intriga, suspense, generar misterio, que el lector se haga preguntas que tengan que ver con el desenlace de la historia.
 Me parece que ese elemento narrativo tiene mucho que ver con el discurso de seducción que predomina en unas sociedades de ideología neoliberal donde de lo que se trata es de complacer al lector como un cliente
. Por eso, desde que comienzo a escribir, la trama para mí es un elemento muy secundario dentro de las ficciones o incluso un elemento a batir.
 Puedo contar una historia, puedo transmitir una emoción, puedo dar un punto de vista sobre lo que está sucediendo y hablar de las cosas que duelen, sin tener que agarrarme necesariamente al mecanismo de las tramas, me interesa más la construcción de los personajes. 
El punto de vista y la voz.
 El punto en el que confluyen lo interno y lo externo en las narraciones: el sujeto y la comunidad, el texto y el contexto.
 Me interesa más la prospección psicológica, me interesa más el lenguaje. 
Y me interesa más la calidad de página que propiamente lo que es la trama.
Hace poco vi la película documental sobre Hitchcock y Truffaut, que a mí me ha parecido interesantísima, y hubo un comentario de Martin Scorsese con el que me sentí muy identificada.
 Él cuenta que en Vértigo de Hitchcock la trama simplemente es el alambre o la percha para colgar la poesía de las imágenes. 
Creo que hay veces que en los textos que escribo la trama funciona de esa manera, otras veces está ahí para ser fracturada, para contradecir el deber ser y la ortodoxia de ciertos géneros altamente codificados, para suscitar preguntas sobre la realidad desde la «conspiración» contra cierta retórica literaria, ese es el caso de Black, black, black o de Un buen detective no se casa jamás.
En El frío haces ese ejercicio de utilizar la trama como «percha».
El frío es un ejemplo de cómo un texto más que una trama, más que una historieta, en el mal sentido de la palabra, salpica.
 Pero lo que intento, tanto en El frío como en Daniela Astor, como en otras novelas mías, es contraponer dos discursos, ver cómo un discurso rebota en el otro discurso y cómo con eso se puede generar interés y se construye significado, sin necesidad de que yo te esté poniendo a ti una zanahoria delante del hocico para que tú te la comas.
Marta Sanz para Jot down 1
Ignacio Vidal-Folch, en la presentación de la revista Granta, se preguntaba cómo es posible que el futuro de la condición humana esté en manos de cuatro intrépidos de Silicon Valley sin que los pensadores más progres tomen partido. ¿Estás de acuerdo?
Pues sí, estoy de acuerdo.
 De hecho, otro de los estímulos de Farándula es la narración de ese tránsito de lo analógico a lo digital que está modificando nuestras conciencias, que está cambiando nuestra visión del ser humano y de la relación que establece el ser humano con su cultura, tiene que ver con eso.
 Me parece de una perversidad absoluta cómo se cambia el significado de las palabras y cómo, de repente, en internet todos los discursos se colocan en una línea horizontal, convirtiendo la democracia en demagogia
. Me parece absolutamente perverso cómo la palabra libertad cambia de significado: en el momento en el que nosotros estamos aparentemente ejerciendo nuestra máxima libertad, al mismo tiempo estamos siendo vigilados por un ojo tremebundo que es capaz de captar todos nuestros datos. Esto lo cuenta con una sencillez y una claridad aterradoras el filósofo coreano Byung Chul Han en Psicopolítica.
 Deberíamos hacernos preguntas.

Marta Sanz para Jot down 2
¿Hay talento en las nuevas generaciones de autores españoles?
Yo creo que sí. No me importa nada dar nombres y apellidos.
 Me interesan muchísimo los escritores españoles nacidos en la década de los setenta y ochenta. Me parece que algunos de ellos nos están dando lecciones a los nacidos en los sesenta que estábamos demasiado anclados a la literatura de prestigio en la época de la Transición, estábamos muy condicionados por los autores de la nueva narrativa.
 Creo que los autores nacidos en los setenta y en los ochenta se atreven a dar un salto cualitativo.
 La primera gran sorpresa fue Isaac Rosa. Isaac Rosa me parece un escritor con una mirada muy original y además con una caligrafía literaria envidiable.