Tensión en el clan Preysler: Ana Boyer está molesta con su madre Isabel
La irrupción de Mario Vargas Llosa en sus vidas de manera tan repentina ha supuesto un duro varapalo para la joven, que no ha dudado en oponerse a su progenitora en algunas cuestiones
17 oct 2015
Tensión en el clan Preysler: Ana Boyer está molesta con su madre Isabel
Una presencia extraña en una estrella lejana desata las especulaciones......................... Daniel Mediavilla
Descubren una estrella con una serie de objetos orbitando a su alrededor que no tienen explicación con los modelos habituales y se habla incluso de vida inteligente.
KIC 8462852 es una estrella extraña, o al menos ahora lo parece.
Está a 1.480 años luz, muy lejos, pero se encuentra en nuestra propia galaxia.
El Telescopio Espacial Kepler, pese a la distancia, ha recogido información que nos cuenta que a su alrededor orbitan una serie de objetos que no parecen exoplanetas. Kepler, que ya ha descubierto más de 4000 mundos fuera del Sistema Solar, es capaz de detectar minúsculas variaciones en el brillo de estrellas remotas.
Si se observa un oscurecimiento que se produce a intervalos regulares, se puede interpretar que ha pasado un planeta por delante de la estrella.
Después, una precisa medición del parpadeo permite realizar estimaciones sobre el tamaño del objeto.
En el caso de KIC 8462852, las oscilaciones de la luz sugieren que a su alrededor no orbitan uno o varios planetas corrientes. Más bien, parece que su entorno es un desbarajuste de objetos de distintos tamaños, que viajan a diferentes velocidades y no lo hacen en un plano más o menos fijo como en los sistemas planetarios comunes.
Las noticias que nos trae Kepler desde aquella estrella singular tendrían una explicación relativamente sencilla si se tratase de un astro joven.
Cuando un sistema solar se encuentra en formación y el tirón gravitatorio de la estrella aún no ha metido en vereda la materia que se acumula alrededor para organizarla en forma de planetas, se puede esperar un desorden como el observado.
Sin embargo, las mediciones de radiación infrarroja son menores de la esperada en una estrella joven.
Esta es una de las hipótesis descartadas por un grupo de astrónomos en un artículo publicado hace un mes.
En él, van desechando varias explicaciones para justificar las rarezas de KIC 8462852 y se quedan con una que, aunque aún con limitaciones, consideran la más plausible.
Si fuese cierta, los objetos desorganizados que se ven en aquel sistema planetario serían una familia de cometas empujados hacia la estrella por el tirón gravitatorio de un segundo astro cercano.
Toda esta información, fruto del trabajo de voluntarios integrados en el proyecto Planet Hunters, ha tenido una segunda explicación más improbable, pero que ha causado mucho más revuelo. Según se explicaba esta semana en un artículo en The Atlantic, próximamente, Jason Wright, un joven astrónomo de la Universidad Penn State, va a publicar una interpretación alternativa a los guiños encontrados por los voluntarios en las imágenes recogidas por Kepler. Desde su punto de vista, las observaciones se podrían explicar por la presencia de megainfraestructuras creadas por algún tipo de civilización para aprovechar la energía de la estrella
. Además, tanto Wright como Tabetha Boyajian, la investigadora de la Universidad de Yale responsable de Planet Hunters, quieren solicitar tiempo de uso del gran radio telescopio VLA, en Nuevo México (EE UU) para buscar ondas de radio originadas en algún artefacto creado por seres inteligentes.
A David Barrado, investigador del CSIC y experto en mundos extrasolares, el planteamiento le parece “un ejercicio intelectual interesante”.
Sin embargo, cree que es muy poco probable que esa explicación se ajuste a la realidad. “Las observaciones de Kepler son muy delicadas y, aunque son precisas, el análisis es complicado y puede haber muchos errores”, explica.
“Por ejemplo, siempre se asume que las estrellas observadas en principio tienen una forma esférica, o que no tienen manchas, o que los planetas a su alrededor también son esféricos”, añade. Todas estas limitaciones hacen necesario mucho trabajo de análisis para interpretar bien los datos.
Barrado plantea además otra pregunta interesante. ¿De dónde sacaría aquella supuesta civilización extraterrestre la cantidad de materia necesaria para construir una planta de energía solar orbital tan grande como para verse a casi mil quinientos años luz de distancia
? Como recuerda el investigador del CSIC, si fuésemos capaces de recoger toda la masa acumulada en el cinturón de asteroides, solo se contaría con un 3% de la masa de la Luna
. Después de convertir la materia en una infraestructura descomunal, habría que ponerla en órbita, algo que requiere cantidades ingentes de energía, y después contar con que los efectos gravitatorios de la estrella o de otros planetas no hiciesen zozobrar semejante construcción.
Está a 1.480 años luz, muy lejos, pero se encuentra en nuestra propia galaxia.
El Telescopio Espacial Kepler, pese a la distancia, ha recogido información que nos cuenta que a su alrededor orbitan una serie de objetos que no parecen exoplanetas. Kepler, que ya ha descubierto más de 4000 mundos fuera del Sistema Solar, es capaz de detectar minúsculas variaciones en el brillo de estrellas remotas.
Si se observa un oscurecimiento que se produce a intervalos regulares, se puede interpretar que ha pasado un planeta por delante de la estrella.
Después, una precisa medición del parpadeo permite realizar estimaciones sobre el tamaño del objeto.
En el caso de KIC 8462852, las oscilaciones de la luz sugieren que a su alrededor no orbitan uno o varios planetas corrientes. Más bien, parece que su entorno es un desbarajuste de objetos de distintos tamaños, que viajan a diferentes velocidades y no lo hacen en un plano más o menos fijo como en los sistemas planetarios comunes.
Las noticias que nos trae Kepler desde aquella estrella singular tendrían una explicación relativamente sencilla si se tratase de un astro joven.
Cuando un sistema solar se encuentra en formación y el tirón gravitatorio de la estrella aún no ha metido en vereda la materia que se acumula alrededor para organizarla en forma de planetas, se puede esperar un desorden como el observado.
Sin embargo, las mediciones de radiación infrarroja son menores de la esperada en una estrella joven.
Esta es una de las hipótesis descartadas por un grupo de astrónomos en un artículo publicado hace un mes.
En él, van desechando varias explicaciones para justificar las rarezas de KIC 8462852 y se quedan con una que, aunque aún con limitaciones, consideran la más plausible.
Si fuese cierta, los objetos desorganizados que se ven en aquel sistema planetario serían una familia de cometas empujados hacia la estrella por el tirón gravitatorio de un segundo astro cercano.
Toda esta información, fruto del trabajo de voluntarios integrados en el proyecto Planet Hunters, ha tenido una segunda explicación más improbable, pero que ha causado mucho más revuelo. Según se explicaba esta semana en un artículo en The Atlantic, próximamente, Jason Wright, un joven astrónomo de la Universidad Penn State, va a publicar una interpretación alternativa a los guiños encontrados por los voluntarios en las imágenes recogidas por Kepler. Desde su punto de vista, las observaciones se podrían explicar por la presencia de megainfraestructuras creadas por algún tipo de civilización para aprovechar la energía de la estrella
. Además, tanto Wright como Tabetha Boyajian, la investigadora de la Universidad de Yale responsable de Planet Hunters, quieren solicitar tiempo de uso del gran radio telescopio VLA, en Nuevo México (EE UU) para buscar ondas de radio originadas en algún artefacto creado por seres inteligentes.
A David Barrado, investigador del CSIC y experto en mundos extrasolares, el planteamiento le parece “un ejercicio intelectual interesante”.
Sin embargo, cree que es muy poco probable que esa explicación se ajuste a la realidad. “Las observaciones de Kepler son muy delicadas y, aunque son precisas, el análisis es complicado y puede haber muchos errores”, explica.
“Por ejemplo, siempre se asume que las estrellas observadas en principio tienen una forma esférica, o que no tienen manchas, o que los planetas a su alrededor también son esféricos”, añade. Todas estas limitaciones hacen necesario mucho trabajo de análisis para interpretar bien los datos.
Barrado plantea además otra pregunta interesante. ¿De dónde sacaría aquella supuesta civilización extraterrestre la cantidad de materia necesaria para construir una planta de energía solar orbital tan grande como para verse a casi mil quinientos años luz de distancia
? Como recuerda el investigador del CSIC, si fuésemos capaces de recoger toda la masa acumulada en el cinturón de asteroides, solo se contaría con un 3% de la masa de la Luna
. Después de convertir la materia en una infraestructura descomunal, habría que ponerla en órbita, algo que requiere cantidades ingentes de energía, y después contar con que los efectos gravitatorios de la estrella o de otros planetas no hiciesen zozobrar semejante construcción.
Costa-Gavras................................................Diego Galán
El cineasta griego mantiene un combativo espíritu joven asombroso en el festival de Lyon.
En Lyon han tenido que prolongar la exposición que el Festival
Lumière viene dedicando al cineasta griego Costa-Gavras tras haber
proyectado todas sus películas.
Este festival también ha rendido homenaje a Martin Scorsese, pero en su caso es más lógico el éxito entre espectadores jóvenes por tratarse de un cineasta mejor conocido, es decir, americano, y con repartos de actores muy populares. Costa-Gavras es otra cosa
. Por ejemplo, el Oscar que obtuvo a la mejor película fue en su condición de habla no inglesa –Z, en 1969, que también se alzó en la misma categoría con el Globo de oro-; y aunque el de mejor guión, en 1982, fue para Missing (Desaparecido), hablada en inglés, trataba de la complicidad de Estados Unidos en el golpe de Augusto Pinochet, no siendo probablemente hoy en día un tema de mayoritario interés juvenil.
Como seguramente ocurre con Estado de sitio, donde Costa-Gavras denunciaba la connivencia de la CIA con la asesina dictadura uruguaya de los años sesenta, o en La confesión, en la que hablaba sin tapujos de las torturas del estalinismo, o en Sección especial del colaboracionismo del gobierno de Vichy con los invasores nazis, o en La caja de música de los criminales de guerra aún ocultos… Costa-Gavras ha mantenido a lo largo de su carrera un rotundo interés por temas sociales y políticos, provocando a veces agresivas polémicas, como cuando fue acusado de antisemita por Hanna K, o de estómago poco agradecido cuando en la película norteamericana El sendero de la traición habló del fascismo latente en zonas profundas de Estados Unidos.
Porque, a pesar de su valiente activismo, Costa-Gavras fue reclamado por los estudios de Hollywood y allí, unas veces con aciertos y otras no tanto, les dio repetidas veces en los morros hablando de sus miserias.
Al regresar a Europa denunció las buenas relaciones que hubo entre el Vaticano y Hitler –Amén–, las angustias de los emigrantes –Edén al Oeste-, y del paro –Arcadia-, o la voracidad de los banqueros –El capital-.
En definitiva, su cine compone una crónica política de las principales páginas de la segunda mitad del siglo pasado… y que aún continúa reflejando el presente.
A sus 82 años, Gavras mantiene un combativo espíritu joven que ha asombrado a los jóvenes en el festival de Lyon. Hace 12 años ocurrió lo mismo en la semana de cine de Valladolid, que le dedicó una amplia retrospectiva.
Ojalá vinieran más muestras, porque el conjunto de las películas de este autor sigue siendo imprescindible.
Este festival también ha rendido homenaje a Martin Scorsese, pero en su caso es más lógico el éxito entre espectadores jóvenes por tratarse de un cineasta mejor conocido, es decir, americano, y con repartos de actores muy populares. Costa-Gavras es otra cosa
. Por ejemplo, el Oscar que obtuvo a la mejor película fue en su condición de habla no inglesa –Z, en 1969, que también se alzó en la misma categoría con el Globo de oro-; y aunque el de mejor guión, en 1982, fue para Missing (Desaparecido), hablada en inglés, trataba de la complicidad de Estados Unidos en el golpe de Augusto Pinochet, no siendo probablemente hoy en día un tema de mayoritario interés juvenil.
Como seguramente ocurre con Estado de sitio, donde Costa-Gavras denunciaba la connivencia de la CIA con la asesina dictadura uruguaya de los años sesenta, o en La confesión, en la que hablaba sin tapujos de las torturas del estalinismo, o en Sección especial del colaboracionismo del gobierno de Vichy con los invasores nazis, o en La caja de música de los criminales de guerra aún ocultos… Costa-Gavras ha mantenido a lo largo de su carrera un rotundo interés por temas sociales y políticos, provocando a veces agresivas polémicas, como cuando fue acusado de antisemita por Hanna K, o de estómago poco agradecido cuando en la película norteamericana El sendero de la traición habló del fascismo latente en zonas profundas de Estados Unidos.
Porque, a pesar de su valiente activismo, Costa-Gavras fue reclamado por los estudios de Hollywood y allí, unas veces con aciertos y otras no tanto, les dio repetidas veces en los morros hablando de sus miserias.
Al regresar a Europa denunció las buenas relaciones que hubo entre el Vaticano y Hitler –Amén–, las angustias de los emigrantes –Edén al Oeste-, y del paro –Arcadia-, o la voracidad de los banqueros –El capital-.
En definitiva, su cine compone una crónica política de las principales páginas de la segunda mitad del siglo pasado… y que aún continúa reflejando el presente.
A sus 82 años, Gavras mantiene un combativo espíritu joven que ha asombrado a los jóvenes en el festival de Lyon. Hace 12 años ocurrió lo mismo en la semana de cine de Valladolid, que le dedicó una amplia retrospectiva.
Ojalá vinieran más muestras, porque el conjunto de las películas de este autor sigue siendo imprescindible.
Un día señalado............................................................... Boris Izaguirre
Cristina Cifuentes llevó un ‘look’ de sabor étnico y, por su izquierda, Manuela Carmena apareció más Dior que nunca.
Como pertenezco a la Academia de la Televisión recibo, vía email, un recuento de las noticias pertinentes al mundo audiovisual.
Esta semana destacaban que la retransmisión del desfile de las Fuerzas Armadas con motivo del 12 de octubre alcanzó más de dos millones de espectadores que dedicaron parte de su día festivo a seguirlo por TVE. Desde 2009 no pasaba algo similar
. Ahora se entiende por qué Mariló Montero, la encargada de conducir las mañanas de la televisión publica, acudió a la recepción real vestida de blanco y sintiéndose tan reina.
A Mariló se le olvidó que ese mismo color y traje fueron los que escogió Letizia para anunciar su compromiso con Felipe.
Pero es que el 12 de octubre es un día muy señalado y muy complicado, ya desde 1492.
Antes de ser presidente del Gobierno, en octubre de 2008, a Mariano Rajoy se le escapó, conversando con Javier Arenas en un acto de su partido en A Coruña:
"Mañana tengo el coñazo del desfile, un plan apasionante".
Este año, la alcaldesa de Barcelona Ada Colau se negó a acudir y lenguas del PP la acusaron de cateta.
Ya se ve que a muchos les resulta incómodo que una fiesta nacional tenga que ser celebrada con un desfile militar.
Apasionante o no, lo curioso es todo lo que se comenta de esta parade.
Esta semana tuvo que compartir protagonismo con el desfile militar de Kim Jong-un en Corea del Norte
. Con una estética delirante, que mezcla realismo socialista con el Hollywood de los musicales, para hacer más vistosa la propaganda y alienación que proponen.
Estatuas doradas monumentales de los líderes de la patria, flores y armamento nuclear.
Además, el desfile de Pyongyang es de asistencia obligatoria, si no vas, probablemente no vivas para contarlo.
Afortunadamente en Madrid las cosas no son así
. A mí me entusiasmó la foto oficial de las autoridades, porque sus protagonistas parecen alineados siguiendo el orden de su estatura.
Cristina Cifuentes llevó un look de fuerte sabor étnico, como de Etro, que suponía un guiño chic a otras culturas
. Paradójicamente, y por su izquierda, Manuela Carmena apareció más Dior que nunca con un traje chaqueta color pizarra y aferrada a su bolso, quizás sospechando que más de una quiera arrebatárselo.
El 12 de Octubre tiene 523 años de polémica.
En mi infancia en Caracas lo llamaban el Día de la Raza, hasta que alguien recordó que así le gustaba llamarlo a Franco
. Entonces pasó a ser el Día del Descubrimiento y mucha gente se manifestó molesta con eso del Descubrimiento.
Yo lo veía positivo
. Que te descubran es casi un anhelo, un sueño hecho realidad.
Pero ¡nada! Pasaron a llamarlo el Día del Encuentro de dos Culturas y mi papá me explicó que ese encuentro fue que las indias estaban desnudas cuando de repente llegaron los españoles vestidos. ¡Eso fue fuego en el cuerpo, mi amor!
En la fiesta de mi último año de Primaria, los alumnos elegían quien iba de indio y quien de conquistador.
Para mí fue un dilema porque me identificaba con los dos atuendos.
A los que iban de conquistador les dejaban ponerse mallas negras y a los indios, cómo no, plumas en la cabeza y pulseras.
Alguien sugirió que quedaría mejor de jaguar o de serpiente y en casa respiraron tranquilos.
Richard Gere, que es también nativo del Nuevo Mundo, decidió visitar a su amiga española, Alejandra Silva, estos días de octubre.
Dicen que se llevó un disgusto al aterrizar en Madrid y encontrarse con un desfile militar en plena calle, dado que es un pacifista convencido.
Así que tampoco él acudió a la recepción real. Seguramente sus amistades españolas intentaron aclararle que esta tradición del desfile marcial y el descubrimiento de América no tienen nada que ver con el régimen militar de Franco, de quien por cierto Bertín Osborne preguntó durante una conversación en TVE a Carmen Martínez-Bordiú, su nieta, si su abuelo era bisexual.
Y esa es una pregunta que también persigue a Richard Gere desde el principio de su carrera.
En una conversación ligera de FaceTime una amiga, vinculada a un poderoso grupo textil catalán aunque ella es asturiana, me confesó no entender a la Reina por ir de azul marino a las doce de la mañana.
Sugerí que ese es el color que emplean las ejecutivas para ir a trabajar.
Para mí no está mal, pero el FaceTime insistió con que si llevaba abrigo y americana en pleno octubre.
Oye, el vestuario de una representante del Estado se organiza con mucha antelación y los estilistas habrán pensando que en octubre hace ya más fresquito.
La verdad es que tampoco fue vestida de Frida Kahlo
. Eso sí que sería el día del desencuentro total.
Esta semana destacaban que la retransmisión del desfile de las Fuerzas Armadas con motivo del 12 de octubre alcanzó más de dos millones de espectadores que dedicaron parte de su día festivo a seguirlo por TVE. Desde 2009 no pasaba algo similar
. Ahora se entiende por qué Mariló Montero, la encargada de conducir las mañanas de la televisión publica, acudió a la recepción real vestida de blanco y sintiéndose tan reina.
A Mariló se le olvidó que ese mismo color y traje fueron los que escogió Letizia para anunciar su compromiso con Felipe.
Pero es que el 12 de octubre es un día muy señalado y muy complicado, ya desde 1492.
Antes de ser presidente del Gobierno, en octubre de 2008, a Mariano Rajoy se le escapó, conversando con Javier Arenas en un acto de su partido en A Coruña:
"Mañana tengo el coñazo del desfile, un plan apasionante".
Este año, la alcaldesa de Barcelona Ada Colau se negó a acudir y lenguas del PP la acusaron de cateta.
Ya se ve que a muchos les resulta incómodo que una fiesta nacional tenga que ser celebrada con un desfile militar.
Apasionante o no, lo curioso es todo lo que se comenta de esta parade.
Esta semana tuvo que compartir protagonismo con el desfile militar de Kim Jong-un en Corea del Norte
. Con una estética delirante, que mezcla realismo socialista con el Hollywood de los musicales, para hacer más vistosa la propaganda y alienación que proponen.
Estatuas doradas monumentales de los líderes de la patria, flores y armamento nuclear.
Además, el desfile de Pyongyang es de asistencia obligatoria, si no vas, probablemente no vivas para contarlo.
Afortunadamente en Madrid las cosas no son así
. A mí me entusiasmó la foto oficial de las autoridades, porque sus protagonistas parecen alineados siguiendo el orden de su estatura.
Cristina Cifuentes llevó un look de fuerte sabor étnico, como de Etro, que suponía un guiño chic a otras culturas
. Paradójicamente, y por su izquierda, Manuela Carmena apareció más Dior que nunca con un traje chaqueta color pizarra y aferrada a su bolso, quizás sospechando que más de una quiera arrebatárselo.
El 12 de Octubre tiene 523 años de polémica.
En mi infancia en Caracas lo llamaban el Día de la Raza, hasta que alguien recordó que así le gustaba llamarlo a Franco
. Entonces pasó a ser el Día del Descubrimiento y mucha gente se manifestó molesta con eso del Descubrimiento.
Yo lo veía positivo
. Que te descubran es casi un anhelo, un sueño hecho realidad.
Pero ¡nada! Pasaron a llamarlo el Día del Encuentro de dos Culturas y mi papá me explicó que ese encuentro fue que las indias estaban desnudas cuando de repente llegaron los españoles vestidos. ¡Eso fue fuego en el cuerpo, mi amor!
En la fiesta de mi último año de Primaria, los alumnos elegían quien iba de indio y quien de conquistador.
Para mí fue un dilema porque me identificaba con los dos atuendos.
A los que iban de conquistador les dejaban ponerse mallas negras y a los indios, cómo no, plumas en la cabeza y pulseras.
Alguien sugirió que quedaría mejor de jaguar o de serpiente y en casa respiraron tranquilos.
Richard Gere, que es también nativo del Nuevo Mundo, decidió visitar a su amiga española, Alejandra Silva, estos días de octubre.
Dicen que se llevó un disgusto al aterrizar en Madrid y encontrarse con un desfile militar en plena calle, dado que es un pacifista convencido.
Así que tampoco él acudió a la recepción real. Seguramente sus amistades españolas intentaron aclararle que esta tradición del desfile marcial y el descubrimiento de América no tienen nada que ver con el régimen militar de Franco, de quien por cierto Bertín Osborne preguntó durante una conversación en TVE a Carmen Martínez-Bordiú, su nieta, si su abuelo era bisexual.
Y esa es una pregunta que también persigue a Richard Gere desde el principio de su carrera.
En una conversación ligera de FaceTime una amiga, vinculada a un poderoso grupo textil catalán aunque ella es asturiana, me confesó no entender a la Reina por ir de azul marino a las doce de la mañana.
Sugerí que ese es el color que emplean las ejecutivas para ir a trabajar.
Para mí no está mal, pero el FaceTime insistió con que si llevaba abrigo y americana en pleno octubre.
Oye, el vestuario de una representante del Estado se organiza con mucha antelación y los estilistas habrán pensando que en octubre hace ya más fresquito.
La verdad es que tampoco fue vestida de Frida Kahlo
. Eso sí que sería el día del desencuentro total.
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