Hace tiempo que los estrategas del Premio Planeta tienen el perfil del
ticket
ganador susceptible de atraer a más lectores: un escritor valorado en
lo literario y un finalista vinculado al mundo audiovisual o de
reconocimiento más mediático; que la temática sea susceptible de generar
cierta controversia social y, sinergias mandan, que ya estén, a poder
ser, en
la casa
. Casi todos esos requisitos se cumplieron ayer en la 64ª edición del premio de novela.
Alicia Giménez Bartlett, reconocida por su serie de la inspectora Petra Delicado, pero con notable vida literaria fuera del género negro, obtuvo los 601.000 euros del galardón por
Hombres desnudos, historia de la relación fatal de una pareja surgida en el entorno de la prostitución masculina.
El finalista es
el cineasta Daniel Sánchez Arévalo (Azuloscurocasinegro, Primos) con
La isla de Alice, donde una mujer intenta reconstruir la misteriosa muerte de su esposo, narración que le reporta 150.250 euros.
El éxito de su inspectora Delicado (10 títulos en el Grupo Planeta,
serie de televisión en 1999, cinco de la decena de premios que hasta la
fecha tenía la autora…) hace olvidar a menudo que Giménez Bartlett entró
en el género para desconectar de la tensión que le produjo escribir
Una habitación ajena (1997), segunda novela tras
Exit, que publicó en 1984 en un sello hoy de Planeta, Seix Barral.
Aquella obra, premio Femenino de Lumen, reflejaba las tensiones entre
Virginia Woolf y su sirvienta Nelly, y no estaba exenta de trasunto
social
. Como ahora con la obra ganadora: “Habla de la crisis, de hombres
jóvenes bien cualificados que pierden su trabajo y se dedican al
stripteasse
y derivados; y de mujeres de 40 y 50 años sin compromiso marital...pero
no hablo de sexo, sino de luchas sociales, que es lo que hay hoy por
debajo”.
“Me gusta que mis lectores tengan la sensación de que mis
personajes son gente que han conocido y que sus problemas son
susceptibles de que ellos se los planteen también; en el fondo, busco
pasión”, aseguró la escritora
. Vuelve a intentarlo en
Hombres desnudos:
Javier, profesor de literatura en paro, e Irene, empresaria a la que
acaba de abandonar su marido, se ven obligados a cambiar drásticamente
sus vidas.
Se cruzarán en el entorno de la prostitución masculina,
intersección que será un calvario.
La destreza en los diálogos y en el monólogo interior para reflejar
el tortuoso mundo de esos personajes fueron algunos elogios que se llevó
la obra del jurado.
La ganadora suma en su bibliografía nueve novelas
fuera del género negro y dos ensayos sobre la mujer y su relación con
los hombres; en 2011, obtuvo el otro gran premio del grupo Planeta, el
Nadal, por
Donde nadie te encuentre.
Solo este último año ha
cosechado ya el Pepe Carvalho que otorga BCNegra, el de los Libreros de
Euskadi y hace una semana, el José Luis Sampedro de Getafe Negro.
Un currículo literario distinto presenta Sánchez Arévalo.
Aunque en
pocos años ha desarrollado una fructífera carrera cinematográfica desde
sus inicios en 2002, galardonada entre otras en 2007 con el Goya al
mejor director novel por su primer largo,
Azuloscurocasinegro, solo había publicado dos libros juveniles:
La maleta de Ignacio Karaoke (SM) y
31 de junio de 1993
(Alfaguara), esta última es en la que se basó para ese filme.
Está
curtido en el arte de narrar historias pues desde 1995 ha trabajado como
guionista, labor que empezó en series televisivas como
Farmacia de guardia u
Hospital central y que en la gran pantalla en los casos de
Gordos y
La gran familia española se tradujeron en candidaturas al Goya al mejor guion original.
Una isla inquietante
Esa experiencia es la que ha puesto ahora al servicio de
La isla de Alice,
donde nada parece lo que es: una joven embarazada se obsesiona con
descubrir qué hay detrás de la muerte de su esposo, constructor que
falleció en un accidente de coche muy lejos de donde se suponía que
debía estar.
“Empezó como guion pero llevo seis años dándole forma; la de Alice es
la historia de una mentira de vida a la que se agarra como yo me agarré
a esta obra para soportar la muerte de Héctor Colomé, compañero de mi
madre”,
dijo emocionado, ante la presencia de aquella y de su amigo, el
actor Quim Gutiérrez.
Dos creadores reconocidos
Alicia Giménez Bartlett (Almansa, Albacete, 1951)
es una reconocida autora del género negro desde antes de que se pusiese
de moda.
Las 10 novelas de la inspectora Petra Delicado han tenido gran
éxito internacional (se han traducido a 15 lenguas y cuenta con premios
como el Raymond Chandler).
En España se popularizó a raíz de la serie de
televisión, protagonizada por Ana Belén.
En 2010, ganó el Nadal con Donde nadie te encuentre.
Daniel Sánchez Arévalo (Madrid, 1970) es guionista, productor y director de cine. Ha dirigido varios cortos y cuatro largometrajes: Azuloscurocasinegro (2006), Gordos (2009), Primos (2011) y La gran familia española (2013).
La gala literaria tenía anoche un aliciente sociopolítico notable
después de que el miércoles, en la presentación del galardón, el primero
tras la muerte del editor José Manuel Lara Bosch, su hijo y actual
consejero delegado del grupo Planeta, José Manuel Lara García,
ratificara las palabras de su padre de 2012, cuando afirmó:
“Si Cataluña
fuera independiente, el grupo Planeta tendría que irse a Madrid,
Zaragoza o Cuenca”.
El presidente de la Generalitat en funciones, Artur Mas, quien por la
mañana había acudido a declarar ante el Tribunal Superior de Justicia
de Cataluña como imputado por la consulta soberanista del 9-N, asistió a
la cena como en los últimos años. Compartió mesa con la ministra de
Fomento, Ana Pastor, el líder del PSOE, Pedro Sánchez, con quien habló a
menudo mientras este asentía, y con Albert Rivera, más alejado.
La sorpresa saltó con la representación del Ayuntamiento de
Barcelona, que recayó en la teniente de alcalde de Urbanismo, Galia Pin,
con lo que se rompía una tradición ininterrumpida de más de 20 años de
asistencia del alcalde.