Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

24 feb 2015

Pablo Iglesias condena “sin matices” la detención del alcalde de Caracas................................ F. MANETTO

El líder de Podemos rechaza la prisión preventiva: "No me gusta que se detenga a un alcalde".

Pablo Iglesias en Telecinco
Pablo Iglesias, durante su entrevista en Telecinco.

Pablo Iglesias ha condenado este lunes, abiertamente y "sin matices", la detención del alcalde metropolitano de Caracas, el opositor Antonio Ledezma, acusado de conspiración por el Gobierno de Nicolás Maduro
. El secretario general de Podemos, que lleva meses evitando pronunciamientos sobre Venezuela, rechazó el encarcelamiento en una entrevista en Tele 5.
 “No hay ningún matiz. A mí no me gusta que se detenga a un alcalde.
 Otra cosa es que después se pruebe que este señor ha cometido un delito, pero ni la prisión preventiva ni la detención de cargos públicos son algo que a priori a mí me guste
. No me gusta”, enfatizó Iglesias al ser preguntado al respecto.
El líder de la formación morada ha llamado, en cualquier caso, a mejorar el diálogo y las relaciones entre los Ejecutivos de España y Venezuela.
 En su opinión, “hay que rebajar la tensión entre dos socios históricos como España y Venezuela. Es el momento de que tanto el Gobierno venezolano como el Gobierno español rebajen el tono”, ha manifestado en referencia a la actividad de las empresas españolas en ese país.
“Cuando gobernemos le aseguro que mantendremos las mejores relaciones con todos nuestros socios comerciales”, aseguró además antes apelar una vez más, como desde hace unos meses, al modelo económico de los países nórdicos.
Iglesias ha rechazado también las sospechas de financiación ilegal que rodean el pago de 425.000 al cofundador de Podemos Juan Carlos Monedero por parte de los Gobiernos de Venezuela, Ecuador, Nicaragua y Bolivia por trabajos de asesoría.
 El profesor de Políticas de la Universidad Complutense de Madrid compareció el viernes para dar explicaciones en una larga rueda de prensa, pero no enseñó los contratos ni los trabajos realizados debido a las cláusulas de confidencialidad suscritas.
La víspera del Debate del Estado de la Nación, Iglesias ha aprovechado también para proclamarse con nitidez como líder del principal partido de la oposición.
 "Nosotros somos el principal partido de la oposición", ha afirmado.
 La estrategia de Podemos pasa precisamente por desplazar al PSOE del espacio político que ha ocupado en los últimos treinta años
. Pero el secretario general de Podemos ha ido más allá al afirmar que aprendió "muchísimo" del encuentro que mantuvo con el expresidente socialista José Luis Rodríguez Zapatero y con el exministro de Defensa José Bono
. No informó, ha señalado, de esa reunión, en la que también participó Íñigo Errejón, para evitar hacer daño al secretario general del PSOE, Pedro Sánchez.
En cualquier caso, Iglesias ha asegurado que trata de mantener una relación cordial con todo el mundo y por eso ha mantenido algunas conversaciones públicas con dirigentes como el popular Esteban González Pons, el socialista Ramón Jáuregui o Javier Nart, eurodiputado de Ciudadanos.
Iglesias ha afirmado, también con nitidez, que el objetivo de Podemos consiste en ganar también en Andalucía, donde la candidata del partido, Teresa Rodríguez, se enfrenta principalmente a la presidenta de la Junta, Susana Díaz. 
 "Podemos sale a ganar en Andalucía.
 Habrá que preguntarle a Susana Díaz si nos apoyará, porque Teresa Rodríguez será la ganadora", ha destacado al ser preguntado por un hipotético pacto entre Podemos y PSOE.

 

23 feb 2015

Recordando............................

Las siguientes películas estuvieron marcadas por el descubrimiento de una nueva actriz y musa particular, Tippi Hedren.
 Con ella rodó dos películas fundamentales en la evolución de su obra, Los pájaros (The Birds, 1963) y Marnie, la ladrona (Marnie, 1964)
. Parece que el interés a nivel personal del director por la actriz llegó a tal extremo de insistencia, según pudo comprobar todo el equipo del rodaje, que la relación acabó cortada por completo, porque Hitchcock no pudo soportar el rechazo de Hedren y decidió no volver a trabajar con ella.
 En sus filmes siguientes supeditó su creatividad y su bagaje acumulado a ciertos criterios comerciales y a la colaboración de estrellas consagradas.
 Así, filmó Cortina rasgada (Torn Curtain, 1966) con Paul Newman y Julie Andrews, y Topaz (1969), películas ambas muy marcadas por el contexto de la guerra fría, en las que se daba un mensaje propagandístico claramente prooccidental y antisoviético.
En 1968, la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas le concedió el Memorial Irving G. Thalberg, en compensación del error tremendo de no haberle concedido nunca un Oscar, a pesar de que había sido nominado en cinco ocasiones (por Rebeca, Náufragos, Recuerda, La ventana indiscreta y Psicosis).
 Una vez más, uno de los mejores directores de la historia del cine se había quedado sin la estatuilla. En el acto de entrega el director se limitó a dar las gracias. 
Mientras, en Europa, la obra de Hitchcock se había convertido en referencia y guía de toda una nueva generación de directores, entre los que destacaría Truffaut, de cuyas charlas con el maestro surgió un largo libro en el que el cineasta hablaba extensamente de su vida, del cine y de su obra.
En 1971, con motivo del rodaje de Frenesí (Frenzy, 1972), permaneció en Europa una temporada, durante la cual se le sumaron las dificultades: su salud empezó a empeorar y Alma sufrió un ataque de apoplejía que le afectó el habla. 




La posibilidad de perder a su esposa aumentó la predisposición de Hitchcock hacia el alcohol. Cuando en 1975 su esposa experimentó una mejoría, recuperó parte de su antiguo vigor y rodó La trama (Family Plot, 1976), su última película.

La trama (1976)
Pero, a sus setenta y seis años, Hitchcock padecía de artritis y su corazón estaba delicado. En 1976 el director sufrió un colapso, y Alma un nuevo ataque de apoplejía
. Durante los años siguientes sus colaboradores trataban de mantenerle el ánimo alto y le visitaban con frecuencia, intentando alejarlo de los rumores periodísticos sobre su alcoholismo y su envejecimiento progresivo.
 Llovían los homenajes: en 1978 recibió el premio a la labor de una vida del American Film Institute; en 1979 fue galardonado como el Hombre del Año por la Cámara de Comercio británico-americana; el mismo año fue nombrado por real decreto caballero comendador del Imperio británico. 
Pocos meses después, la mañana del 29 de abril de 1980, moría el maestro y el genio del cine de terror, de suspense y de misterio, un hombre que creó un estilo y un mundo propios como pocos directores lo lograron a lo largo de la historia del cine.
 Se hallaba preparando ansiosamente, con su rigor y meticulosidad habituales, un nuevo guión de hierro para su película número cincuenta y cuatro, adaptación de la novela de Ronald Kirkbride titulada The short night.
 Pero Hitchcock, que había dicho "mi amor por el cine es más fuerte que cualquier moral", ya no podía hacer cine.

Benarroch le planta cara al futuro....................................................Leticia García

En tiempos de crisis, la diseñadora intenta reinventarse aunque admite que sus prendas son “un lujo prescindible”.

 Amiga de políticos, intelectuales y famosos se apoya en sus hijos para seguir adelante.

 

Elena Benarroch en la gala de Ralph Lauren en 2013. / Getty Images

Dos empleados impecablemente vestidos atienden a una señora que luce un abrigo imponente. Detrás, pasillos repletos de pieles de todos los tipos, curtidas y sin curtir, teñidas y sin teñir, conducen, por un lado, al taller donde varios artesanos cosen a mano.
 Por el otro, al despacho de Elena Benarroch (Tánger, 1955), una amplia estancia cubierta de libros y fotos con vistas a un pequeño invernadero
. “Hablemos del futuro”, dice desde su mesa la diseñadora.
En 2011, Benarroch volvió a su tienda-taller de la madrileña calle de Zurbarán, que abrió en 1981 y fue testigo de los primeros pasos de su fulgurante carrera.
 Sus prendas han desfilado en Madrid y Nueva York (donde llegó a tener un local en Madison Avenue), han sido portada de Vogue USA, protagonizado colaboraciones con Louboutin y Martin Margiela y vestido a las actrices de Almodóvar dentro y fuera de la pantalla.
 Una vida repleta de hitos, premios y amigos célebres, de Felipe González a Gabriel García Márquez, de Sonsoles Espinosa (a la que asesoró durante el mandato de Zapatero) a Juan Gatti, Miguel Bosé o Daniel Barenboim.
Si en la capital hubiera existido algo parecido a la gauche divine catalana, ella habría sido una de sus lideresas.
“Mi vida no ha estado dedicada a la peletería, sino a la moda, aunque se me conozca por las pieles. En los ochenta, abrimos la primera tienda multimarca importante.
Trajimos piezas de Jil Sander, Bottega Veneta, Walter Steiger…”. El plural con el que se expresa alude a su compañero personal y profesional, el escultor Adolfo Barnatán, del que se separó hace unos años y con el que continúa embarcada en sus proyectos.
 “Esas marcas fueron abriendo tienda propia y no tenía sentido mantener el espacio”.
Elena Benarroch junto a Miguel Bosé. / Cordon Press
No es, por tanto, la primera crisis que le toca vivir a Elena Benarroch.
En los últimos días se ha especulado con una posible bancarrota.
 Se ha hablado de la venta de propiedades e incluso del cierre de la marca. Pero la empresa sigue a flote:
 “Yo permaneceré aquí con la tienda, el taller y mis clientes, y mis hijos tienen un showroom en Nueva York desde el que distribuyen internacionalmente.
 Todo se crea en España y se envía a  EE UU.
 Con el tiempo, ellos buscarán talleres americanos, porque hay cosas que no se pueden confeccionar aquí”.

Sabe que los tiempos han cambiado; más para un negocio basado en pieles de alta gama.
 “Hoy se vende lo más barato o lo más caro.
 Los turistas asiáticos o rusos son los que mantienen el consumo de un producto más elitista, como puede ser el mío.
 Trabajo más con clientes chinos que con rusos, probablemente por el tipo de piezas que hago”, razona
. Los hábitos de compra también difieren de los de hace dos décadas. “Antes lo barato era feo y lo caro bonito
. Ahora tiendas como Mango, Zara o H&M ofrecen productos de menor calidad con diseño”.
Elena Benarroch junto a Mario Vaquerizo. / Carlos Alvarez (Getty Images)
La creadora planea adaptarse a la actualidad de la industria. Desde 2004, su hija Yaël Barnatán diseña una línea dentro de la marca.
Su hijo Jaime se encarga de la comunicación.
“La línea de Yaël se dirige a una clientela más joven, que por definición tiene menos poder adquisitivo”, cuenta.
 Utiliza pieles más asequibles pero sigue con la misma vocación transgresora a la hora de confeccionar las prendas.
 Tanto Yäel como Jaime viven y tienen la sede de su negocio en Williamsburg, el epicentro de la modernidad neoyorkina.
 “La forma de vender también ha cambiado. Conservo clientes de hace más de 30 años, pero actualmente la clave está en Internet y en las tiendas pop up.
 Hacia ahí nos enfocamos”, apunta.
Su plan consiste en el equilibrio entre tradición e innovación, artesanía y desarrollo digital, lujo clásico y lujo asequible
. El suyo fue y seguirá siendo un producto exclusivo:
 “Necesito mínimo seis personas para confeccionar un abrigo. Adquirir las pieles en subastas internacionales (no en proveedores, como se ha dicho), curtirlas, decir si se estampan o se tiñen… se tarda seis meses”.
 Y seguirá siendo así.
 Nunca ha tenido miedo. “Lo aprendí todo sola. Mi primera prenda fue un jersey de visón rosa y la gente no lo entendía
. Cuando tenía la tienda multimarca, tampoco entendieron que un traje de chaqueta de Jil Sander tuviera un precio prohibitivo, pero 30 años después, mis abrigos y aquellos trajes continúan intactos y siguen siendo actuales”.
Loles Leon, Elena Benarroch y Bibi Andersen. / Carlos Alvarez (Getty Images)
Si algo echa en falta en España es “el fomento de la industria, de cualquier tipo.
 No podemos ser un país de turismo y servicios. De este negocio dependen 20 familias y en algunos momentos hemos llegado a ser 50”, afirma.
Pero no quiere rememorar épocas doradas, prefiere mirar al presente: “Lo mío es un lujo prescindible. Vivimos un momento muy difícil y la gente necesita comer y trabajar.
 Eso no quiere decir que la moda sea frívola, es un negocio que mantiene a mucha gente”.
 Sin embargo, en su discurso aflora de forma recurrente una frase que quizá resuma el trabajo de estos 35 años:
 “La clave está en perder el respeto a las pieles”.

Un trozo de rosco para Cáritas.....................................................Victoria Torres Benayas

"Es una obligación moral ayudar a la gente necesitada", declara el ganador de 'Pasapalabra'

Pasapalabra
Luis Esteban Lezáun, durante su participación en 'Pasapalabra'.

Luis Esteban Lezáun, el concursante que el pasado jueves logró resolver las 25 preguntas del rosco del programa Pasapalabra de Telecinco, ha anunciado que donará a Cáritas Diocesana parte del premio de 354.000 euros que se llevó
. La cifra concreta de la contribución se la reserva, aunque da a entender que no será pequeña.
 "Claro que tengo pensado cuánto, pero hay un mandado bíblico que dice que que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha", explica con una sonrisa en conversación telefónica con este periódico.
Inspector jefe del Cuerpo Nacional de Policía en Manacor (Mallorca), natural de Zaragoza y de 42 años, niega que su gesto pueda ser considerado una heroicidad en estos tiempos de sálvese quien pueda.
"Me consta que hay mucha buena gente que contribuye con Cáritas y con otras muchas organizaciones como Manos Unidas, heroicidad es otra cosa, es, por ejemplo, lo que hacen los policías que se juegan la vida a diario en acto de servicio, esto no es nada".
 
 
A su juicio, "es una obligación moral de todos los que vivimos de una forma más o menos desahogada contribuir al bienestar o al menos a la superviviencia de gente que está necesitada", sobre todo cuando se tiene un auténtico "golpe de suerte" como el suyo.
 "Es verdad que antes era más sencillo ser solidario que ahora que vamos todos más ajustados pero no podemos olvidar a los demás", añade.
La idea de la donación le viene de siempre. "Mi mujer es voluntaria de Cáritas y ya colaboramos mensualmente, aunque con cifras más humildes, claro.
 Mi mujer y yo siempre habíamos pensado que, de lograr el premio, lo haríamos", cuenta el ganador del bote de Pasapalabra, para añadir que confía "plenamente" en la Iglesia "como administradora del dinero".
En unas semanas espera recibir el premio, momento al que esperará para ponerse en contacto con Cáritas y hacer la contribución. ¿En qué le gustaría que se empleara el dinero? "La verdad es que no lo sé, son tantas las necesidades, por eso me fío del criterio de Cáritas, ellos son los expertos en solidaridad, que ellos lo distribuyan como crean conveniente y lo dediquen a lo más perentorio", explica.
Con el resto del dinero, cancelará su hipoteca y se irá de viaje a un crucero con su mujer, Fátima, y sus dos hijos.
Todo ello, eso sí, tras descontar la mitad que se lleva Hacienda, un pellizcazo que pagará de muy buena gana. "Gracias a lo que me quitará Hacienda creamos carreteras, hospitales, escuelas... La mejor forma de colaborar con el Estado es pagando los impuestos", dice  ejemplarizante.
Esteban resolvió correctamente las 25 definiciones para alzarse con los 354.000 euros del bote acumulado en una entrega en la que participó con la actriz Ana Milán y el cantante Carlos Goñi como aliados
. Tras numerosas ocasiones en las que estuvo a las puertas de completar el rosco, se alzó con el millonario premio en su cuarta etapa en el concurso, tras contestar correctamente con la palabra "zalá" a la pregunta "oración de los musulmanes".
El concursante maño, licenciado en Derecho, participó por primera vez en 2012, con 29 programas acumulados, además del especial conmemorativo del programa 1.500 con 33.000 euros de premio; en 2013 participó en 22 programas y obtuvo 24.000 euros; también estuvo en el programa especial de Nochevieja, en el que empató con Paco de Benito y consiguió un viaje a Nueva York y la oportunidad de volver a concursar; y por último, en esta etapa final participó en 30 programas.
 En total, 83 para conseguir los 354.000 euros del premio.
"Hay que estudiar mucho para llevarse el rosco", confiesa el concursante, que dedicaba unas dos horas al día a recopilar palabras y a elaborar listados con premios Nobel, ganadores de Oscar y similares, además de hojear el diccionario habitualmente

. Gran aficionado al deporte y lector compulsivo, la semana que viene publica su segunda novela, La vida contra las cuerdas (Plataforma Editorial) —la primera se titula El inspector que ordeñaba vacas, de la misma editorial—, no piensa probar suerte en otros concursos televisivos y seguirá en su puesto de trabajo.
"Me encanta mi rutina de inspector jefe de Policía", comenta, aunque ahora se dedica más a la "acción institucional que a la operativa".