Al PP le está costando rematar la decisión de suspender temporalmente de militancia a Rodrigo Rato,
pero todo camina en esa dirección.
La secretaria general, María Dolores de Cospedal, le ha dicho a los miembros de la cúpula, reunidos en el Comité Ejecutivo Nacional, que el proceso contra los militantes del PP —hasta 16, ya que tres de ellos ya se han dado de baja— que usaron las tarjetas opacas de Caja Madrid y Bankia se ha iniciado y que "todos serán escuchados" y después se tomará una decisión "incluso en los casos más dolorosos"
. El presidente del Gobierno y líder del PP, Mariano Rajoy, ha afirmado que "suscribe" las palabras de Cospedal de que se escuchará a todos los afectados, y ha añadido que la decisión sobre el expediente se resolverá "de la manera más justa posible".
Esto es, el PP se prepara para echar a Rato, que se niega a renunciar voluntariamente a su militancia, pero el proceso va a demorarse todavía algo más.
Todos los demás partidos y sindicatos ya han echado a los miembros afectados, pero el PP retrasa la decisión.
En el partido son mayoría los que quieren una resolución rápida de un asunto que está haciendo mucho daño a su imagen, según admiten en privado.
Pero pocos se animan a decirlo en público.
Lo ha hecho Alberto Fabra, presidente de la Comunidad Valenciana, antes de entrar a la reunión, ante la prensa. ¿Cree que el PP debe expulsar a Rato? le han preguntado
. "Creo que sí, no caben esas conductas en estos momentos de desconfianza entre ciudadanos y políticos", ha dicho.
"Nosotros nacionalizamos las cajas y ordenamos una auditoria.
Fueron los gestores nuevos los que descubrieron las irregularidades y hemos remitido a la Fiscalía 39 operaciones dudosas", ha dicho Rajoy en la reunión.
La secretaria general, María Dolores de Cospedal, le ha dicho a los miembros de la cúpula, reunidos en el Comité Ejecutivo Nacional, que el proceso contra los militantes del PP —hasta 16, ya que tres de ellos ya se han dado de baja— que usaron las tarjetas opacas de Caja Madrid y Bankia se ha iniciado y que "todos serán escuchados" y después se tomará una decisión "incluso en los casos más dolorosos"
. El presidente del Gobierno y líder del PP, Mariano Rajoy, ha afirmado que "suscribe" las palabras de Cospedal de que se escuchará a todos los afectados, y ha añadido que la decisión sobre el expediente se resolverá "de la manera más justa posible".
Esto es, el PP se prepara para echar a Rato, que se niega a renunciar voluntariamente a su militancia, pero el proceso va a demorarse todavía algo más.
Todos los demás partidos y sindicatos ya han echado a los miembros afectados, pero el PP retrasa la decisión.
En el partido son mayoría los que quieren una resolución rápida de un asunto que está haciendo mucho daño a su imagen, según admiten en privado.
Pero pocos se animan a decirlo en público.
Lo ha hecho Alberto Fabra, presidente de la Comunidad Valenciana, antes de entrar a la reunión, ante la prensa. ¿Cree que el PP debe expulsar a Rato? le han preguntado
. "Creo que sí, no caben esas conductas en estos momentos de desconfianza entre ciudadanos y políticos", ha dicho.
"Nosotros nacionalizamos las cajas y ordenamos una auditoria.
Fueron los gestores nuevos los que descubrieron las irregularidades y hemos remitido a la Fiscalía 39 operaciones dudosas", ha dicho Rajoy en la reunión.