El libro más desgarrador de Guillermo Cabrera Infante, Mapa dibujado por un espía llega mañana martes a las librerías españolas, editado por Galaxia Gutenberg.
Narra ahí el autor de La Habana para un infante difunto el largo y doloroso proceso que concluyó con su despedida definitiva de Cuba y su largo exilio en Europa y sobre todo en Londres, donde vivió después de un breve periodo en España, de donde fue tácitamente expulsado por sus escritos revolucionarios en la época de la guerrilla cubana, antes de que Castro asumiera el poder en su país.
Cabrera Infante se exilió de Cuba en 1965 y murió en Londres en febrero de 2005.
Durante todo el exilio compartió su vida con su mujer, Miriam Gómez, que recibió entre muchos papeles inéditos este Mapa dibujado por un espía.
Su marido lo escribió en seguida que comenzó su exilio, pero jamás dejó que ella leyera ese manuscrito, algunos de cuyos detalles ella conocía bien.
Jamás, sin embargo, se atrevió a abrir el sobre donde él seguramente había contado los episodios más tremendos, y más conmovedores, de sus últimos tiempos en La Habana.
El escritor había ido a la isla para velar a su madre muerta
. Era entonces agregado cultural de Cuba en Bruselas. En las primeras semanas que pasó en La Habana observó que su país ya había caído en manos de la burocracia dictatorial y supo en seguida que no era hombre grato ni para las autoridades ni para quienes habían sido sus mejores amigos.
La persecución fue al principio sutil y en seguida grosera, hasta que él tomó la determinación de irse de allí por las buenas o por las malas. La historia que ocurrió mientras tanto está contada en este libro, preparado por Antoni Munné para la colección que está publicando Galaxia Gutenberg.
Es un libro desgarrador, minucioso, triste y profundo, acaso el libro más conmovedor de los escritos por el autor de Tres tristes tigres.
Narra ahí el autor de La Habana para un infante difunto el largo y doloroso proceso que concluyó con su despedida definitiva de Cuba y su largo exilio en Europa y sobre todo en Londres, donde vivió después de un breve periodo en España, de donde fue tácitamente expulsado por sus escritos revolucionarios en la época de la guerrilla cubana, antes de que Castro asumiera el poder en su país.
Cabrera Infante se exilió de Cuba en 1965 y murió en Londres en febrero de 2005.
Durante todo el exilio compartió su vida con su mujer, Miriam Gómez, que recibió entre muchos papeles inéditos este Mapa dibujado por un espía.
Su marido lo escribió en seguida que comenzó su exilio, pero jamás dejó que ella leyera ese manuscrito, algunos de cuyos detalles ella conocía bien.
Jamás, sin embargo, se atrevió a abrir el sobre donde él seguramente había contado los episodios más tremendos, y más conmovedores, de sus últimos tiempos en La Habana.
El escritor había ido a la isla para velar a su madre muerta
. Era entonces agregado cultural de Cuba en Bruselas. En las primeras semanas que pasó en La Habana observó que su país ya había caído en manos de la burocracia dictatorial y supo en seguida que no era hombre grato ni para las autoridades ni para quienes habían sido sus mejores amigos.
La persecución fue al principio sutil y en seguida grosera, hasta que él tomó la determinación de irse de allí por las buenas o por las malas. La historia que ocurrió mientras tanto está contada en este libro, preparado por Antoni Munné para la colección que está publicando Galaxia Gutenberg.
Es un libro desgarrador, minucioso, triste y profundo, acaso el libro más conmovedor de los escritos por el autor de Tres tristes tigres.