¿Se acuerdan ustedes de cuando nadie discutía que dos más dos eran cuatro? Una antigualla, aquello.
Ahora es distinto.
El Gobierno de Rajoy, por poner un verbigracia, hace unos presupuestos basados en que el PIB se va a contraer este año un 0,5%, y ya en abril el ministro de Economía –repito, el ministro de Economía-
dice que él calcula que la cosa se nos va a poner en 1,5%, tres veces
más.
Que si la prevista ya era tremenda para iniciar la recuperación, la
de Luis de Guindos es para tirarse, piso más, piso menos, desde lo alto de la torre de Norman Foster.
¿Estaba previsto que este Gobierno del PP, que tantas soluciones económicas traía antes de noviembre de 2010, redujera el déficit como no supo hacerlo el inútil de Zapatero, mantra repetido una y mil veces?
Déjenme recordarles el griterío que montó el PP porque el déficit de Zapatero en los niveles que controla el Gobierno central fue del 5,2% en 2011.
En 2012, tras los durísimos recortes y las numerosas subidas de impuestos de Rajoy, ha sido del 5,2% en el mismo ámbito, Gobierno central y Seguridad Social.
Las autonomías, la mayoría en manos del PP, dieron otras desviaciones.
¿Verdad que les gusta?
Y esta derecha que ha acabado con el Estado que
había hasta anteayer, se permite acusar de golpistas a quienes van a
ejercer su derecho democrático de manifestarse ante el Congreso. ¿Les
extraña el descaro?
El editorial de
La Razón es sencillo de resumir: “
Merkel, por tu madre, echa una mano a
Rajoy”.
Si para ello hay que silenciar los tres puntos de las ayudas a la banca se silencian, y si
Luis de Guindos –que solo es ministro de Economía, poca cosa- dice que el
PIB va a alcanzar el triple de lo esperado, de un 0,5 a un 1,5%, se oculta el dato en el editorial y ya está
. Dice
La Razón esta cosa tan graciosa:
“Es
cierto que la desviación del déficit en 2012 fue de siete décimas con
respecto al objetivo fijado, pero aciertan las autoridades comunitarias
al mirar más allá de los números y fijarse en la sinceridad del
compromiso de nuestro país para cuadrar sus cuentas sin trampas ni
excusas”.
Ha debido ser
Olli Rehn el que ha mirado fijamente a los ojos a
Mariano Rajoy y ha visto en ellos un mar de inocencia, a la par que de franqueza en las intenciones. Ja.
Anda últimamente un poco revuelto
Javier González Ferrari, molesto quizá por los resultados de su emisora, frente a sus competidoras, por ejemplo la
SER.
Y si antes era como era, ahora imagínense cómo es:
“El
manual por excelencia de la agitación lleva en España el sello de la
izquierda radical, que carece de principios, pero le sobra discurso que,
en tiempos de estabilidad y bonanza, suena a demagogia de quinta y
desprende un tufo a rancio que tira de espaldas, pero que en momentos
como los actuales adquiere un falso halo mesiánico”.
Con
Alfonso Ussía me pasa siempre lo mismo.
Me
parece un espanto cuando ejerce de gracioso –qué horror-, pero me parece
un espanto cuando quiere escribir en serio y me parece un espanto –ay-
cuando escribe en mediopensionista. Pues eso va a ser, ya ven, que me
parece un espanto siempre.
Por ejemplo:
“No me atrevo a insinuar
que nos ahorraríamos un territorio feudal si los catalanes aceptaran
formar parte de un reunido Reino de Aragón con el Principado de Cataluña
y de Gerona y el Condado de Barcelona como pruebas inequívocas. Me
pueden correr a gorrazos muchos catalanes, hoy desviados de su
trasanteayer, su anteayer, su ayer y su hoy, así como algunos
aragoneses, que por su bravo patriotismo poco quieren saber de uniones
con sus compatriotas vecinos. Compatriotas españoles, deseo aclarar”.
Señor, señor…
El editorial de
Abc se titula
“La doble moral de UGT”.
La cosa va porque el periódico lleva tres días con los gastos –exorbitantes, según
Abc- de
Manuel Pastrana, el secretario general de
UGT-Andalucía.
Lo ignoro todo sobre ese buen –o mal señor- incluida su existencia
hasta que apareció su foto en el periódico
. Así que me limitaré -y
brevemente, porque ya digo que desconozco el caso- a los gastos que da
el mismo
Abc. Por ejemplo, que asistió a un
Congreso sindical en
Durban y se alojó en el hotel
Hilton.
Bien: lo pagó la organización, dice Pastrana, que alojó allí a todos los delegados.
Utilizó su
Visa en una cena que costó 852,35 euros.
“Fue una cena de invitación para 19 delegados sindicales de varios países”, explica
Pastrana
. A algo más de 40 euros por barba. Y hoy mismo cuenta
Abc
el importe que costó al sindicato el chalé en el que vive su secretario
general: 228.384 euros.
La casa es propiedad del sindicato
. Esas son
las cifras. Dadas por el mismo periódico. Que las tiene porque el
sindicato las ha registrado puntualmente. Pongan ustedes donde gusten el
listón para escandalizarse.
El otro es para la propaganda del
Gobierno, pura y dura:
“La
oficina estadística de la UE (Eurostat) certificó ayer el inédito
esfuerzo llevado a cabo por las administraciones públicas para reducir
el déficit en línea con el objetivo marcado por Bruselas, a pesar de la
recesión.
España registró un descuadre fiscal del 6,98 por ciento del
PIB en 2012, una vez excluidas las ayudas bancarias (que suman otros 3,6
puntos), lo cual supone una rebaja de dos puntos con respecto al
agujero que dejó en herencia Zapatero”.
Ya hemos expuesto más arriba nuestra modesta opinión sobre datos tan deslumbrantes
. Y tan falaces.
A
Hermann Tertsch le ha dado hoy por dar caña a
Vladimir Putin –nada que objetar, en principio- para resaltar la figura del perseguido
Mijail Jodorkovski. Y eso ya es otra cosa.
Me limito a reproducir lo que cuenta el propio
Tertsch sobre el reo:
“Mijail
Jodorkovski (…) fue uno de los grandes oligarcas que se enriquecieron
vertiginosamente durante el desmantelamiento de la URSS.
Era ya en 2003
propietario de la principal empresa petrolífera y el hombre más rico de
Rusia. Odiado por eso y además judío, Putin pudo convertirlo en enemigo
ideal y poner en efervescencia todas las emociones antisemitas rusas.
Jodorkovski no era un oligarca más de los muchos surgidos en aquellos
años, solo ávidos de amasar dinero para la ostentación del poder y la
riqueza con clubes de futbol, yates cada vez más largos y sicarios sin
cuento.
Aunque utilizara muchos de los métodos de los demás tiburones
para amasar la fortuna desde su puesto de confianza del presidente Boris
Yeltsin.
Pero pronto volcó su dinero en intentar crear y defender una
pluralidad que desaparecía bajo el rodillo implacable de los hombres del
antiguo KGB y de las mafias leales a Putin (…) Cuando, tras ayudar al
bloque disidente, Jabloko quiso elaborar una opción democrática contra
Putin sonaron las alarmas en el Kremlin.
Y cuando quiso crear una
alianza con compañías petroleras americanas con la venta de parte de
Yukos, su suerte estaba echada”. Poco admirador de
Putin ya es el catavenenos, pero esto de
‘Jabloko’ no sé yo, la verdad…
A
Juan Carlos Girauta le preocupa muchísimo el previsto
“asedio al Congreso” del jueves 25
. Creo, sinceramente, que se le va la mano:
“Quien
toma a broma el asedio al Congreso, bromea con un golpe de Estado.
Quien se muestra comprensivo con la acción, lo es con un golpe de
Estado. Quien, interrogado por el asunto, responde con los muchos y
ciertos fallos de nuestro sistema, ampara un golpe de Estado.
Establezcamos esto para empezar”.
Pues lo establecerá usted, amigo. Porque irse a manifestar ante el
Congreso es, por mucho que le duela, un acto perfectamente democrático
. Los golpes de
Estado, si me permiten, los dan quienes han acabado con el
Estado que existía hasta que sus políticas han acabado con él, que eso sí es un golpe de
Estado, un golpe de
Estado, un golpe de
Estado, que puestos a hacer gracietas, aquí las utilizamos como el que más.
Hacer pasar por mayoritaria la publicidad que entresaca
Girauta de los panfletos de grupúsculos antisistema no es más que una maniobra bastante deleznable de asustaniños.
De
El Mundo, sólo advertirles que he detectado la presencia de un texto –o así- firmado por
Salvador Sostres en la página 8. Va por abajo.
Y una vez que ya hemos pisado las tierras procelosas habitadas por
seres mitológicos de varias cabezas y aún más lenguas –venenosas-,
presten atención a
Cayetano González, portavoz y conocido fan de
Mayor Oreja. ¿Han oído o leído ustedes alguna vez el cuento de la lechera contado por un pesimista?
Pues aquí lo tienen:
“De
UPN y del PP no se puede dudar de que siempre defenderán una Navarra
foral y española. Del PSN no se puede asegurar tal cosa. Su abstención
de la pasada semana en la moción presentada por Bildu y Na-Bai contra
Yolanda Barcina pone de manifiesto la estrechez de miras de un partido y
de unos dirigentes absolutamente erráticos
. Y lo mismo que en el País
Vasco no es descartable pensar en una futura alianza del PSE con Bildu e
IU, al estilo del nefasto tripartito catalán de hace unos años –PSC,
ERC e ICV–, en Navarra tampoco se puede descartar que pudieran intentar
algo similar con tal de desplazar al centro-derecha navarro del Gobierno
de la comunidad foral.
De ahí a ceder en las pretensiones anexionistas
de ETA y de los nacionalistas habrá solo un paso. Y eso podrá suceder
perfectamente con un ‘vasquito’ –en expresión de Odón Elorza–, Madina o
López, en la Secretaría General del PSOE”. Y además, se estropearán las cosechas de espárragos blancos.
También hablan de los exquisitos apoyos que recibe la plataforma francesa contra los matrimonios gais.
José Javier Esparza, director de
La Gaceta, se muestra entusiasmado:
“Se
lo ha dicho en la Asamblea la diputada del Frente Nacional Marion
Maréchal-Le Pen (sí, nieta de Jean-Marie) al ministro del Interior, el
socialista Valls: ‘Su Gobierno ha utilizado los métodos más contestables
[sic], por no decir inquietantes, para minimizar y romper la vasta
movilización popular contra el matrimonio y la adopción homosexuales:
publicación de cifras falsas, propaganda antifascista, represión en las
manifestaciones e incluso presos políticos.
Y estoy pesando [sic] mis
palabras’. El Frente Nacional, tibio al principio, ha acabado
denunciando que el proyecto de gaymonio ‘atenta gravemente contra la
institución del matrimonio, la familia y los derechos fundamentales del
niño”.
¡El
Frente Nacional, ni más ni menos! ¡Qué sorpresa que la ultraderecha se incline por esta opción! ¡Y qué asombro nos causa que al director de
La Gaceta le emocione tanto la opinión de la ultraderecha!