Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

11 oct 2012

El chino Mo Yan, Premio Nobel de Literatura

El chino Mo Yan, Premio Nobel de Literatura.

El escritor chino Mo Yan. / Wu huang (AP
El escritor Mo Yan es el ganador del Premio Nobel de literatura 2012, “por su realismo alucinatorio, que une el cuento, la historia y lo contemporáneo”, según el dictamen de la Academia.
 El sucesor del poeta sueco Tomas Tranströmer en el galardón más importante de las letras nació en Gaomi, un pobre condado de la provincia costera de Shandong, en febrero de 1955.
Al fin ha sucedido, aunque nunca sabremos si la concesión del Premio Nobel de Literatura tiene algo que ver con el ascenso imparable de China en el nuevo Orden Mundial, porque los académicos suecos han demostrado a menudo no ser ajenos al devenir sociopolítico del mundo, pero lo cierto es que Mo Yan, uno de los grandes novelistas de nuestro tiempo, es un premio ejemplar.
La narrativa china contemporánea ha venido abriéndose paso en el mundo occidental en los últimos tiempos, aunque siempre con carácter selectivo - e incluso minoritario en comparación con la narrativa de las lenguas occidentales-
. Mo Yan es un autor poco conocido, pero muy apreciado, una especie de autor de culto varias de cuyas novelas se han traducido en España.
 Su acogida no parece que haya sido arrolladora, pero sí es verdad que ha ido encontrado una buena cantidad de lectores fieles, de lectores que, una vez han leído un libro suyo, han seguido leyendo los demás. O sea: un autor de culto
. Ahora, gracias al Nobel, dejará de serlo y, con ello, se habrá cumplido una de las razones originales del premio, cual era la de dar a conocer obras y autores de gran entidad literaria que, por las razones que fuera, no habían alcanzado el reconocimiento universal que merecían.
Mo Yan es un escritor satírico; lo es ya desde su pseudónimo, que significa. “No hables”, muy adecuado en un país donde la censura está a la orden del día.
 Su sentido del humor es tan imaginativo como su fantasía; es un humor duro y sin concesiones, pero hilarante, y su fantasía procede de una mezcla de la tradición china, cargada de imágenes y símbolos, con la tradición occidental.
 No es de extrañar, por tanto, su aprecio por la obra de García Márquez –aunque su escritura poco tenga que ver con el mundo de lo real maravilloso del colombiano-.
Mucho más tiene que ver con la de Fanz Kafka. En realidad su territorio favorito no es el absurdo sino más bien lo grotesco, donde da rienda suelta a su imaginación sin perder de vista la gran narración tradicional china, que por vez primera empezó a modificar Lu Sin y de cuyo esfuerzo proviene la poderosa libertad de la renovación de procedimientos de escritura y estructura novelesca que alcanza a conseguir Mo Yan. En su novela La república del vino encontraremos un extraordinario monólogo de Ding, su protagonista, de indudable estirpe joyceana.
Su novela Sorgo rojo fue llevada al cine por Zhang Yimou con un éxito extraordinario, pero es a partir de La vida y la muerte me están desgastando cuando el poder corrosivo de su humor y su fantasía alcanza cotas memorables y un estilo propio inconfundible
. Este es uno de los premios Nobel mejor concedidos y merecidos, de esos que tapan errores o concesiones cometidos en otro tiempo.
 Hay al menos cuatro novelas suyas traducidas al español, así que prepárense a disfrutar de verdad con la mejor literatura.

 

Las Fachadas

LAS FACHADAS
Portas
En La Razón están patrióticos. De España. Porque se puede ser patriota de Chipre. Por ejemplo. ¿Y es más patriota un patriota de España que un patriota de Chipre? Extendamos la pregunta: ¿Es más patriota un patriota de España que un patriota de Cataluña o un patriota del País Vasco? Por un lado, Antonio Basagoiti: “PNV y CiU son caras de una misma moneda: la de la ruptura de España”. Y lo mismo ganan. Ya ven. El título sobre Mas es grande. Les cuento los sumarios: “Imagen de un libro de Historia de 4º curso en el que se ilustra el tema de la autonomía de Cataluña con la fotografía de una manifestación independentista”. Otro: “Los libros de texto dan una visión sesgada y no enseñan que la conquista romana llegó a toda la Península”. ¿Se acuerdan del chiste de la viejecita, la escalera y su vecino desnudo? El último: “El ministro Wert propone ‘españolizar’ a los alumnos catalanes y el PSC promueve su reprobación en el Congreso”. Abc nos ofrece a Rajoy y Hollande, que “exigen a Merkel que cumpla sus compromisos”. Pues fíjense, parece que se han dicho en Abc, Hollande debe ser malo, malo, porque es socialista, pero así al pronto no lo parece… Añadan una cosa de Mas y las declaraciones de Wert. La Gaceta titula “Italia sí baja los impuestos”. A las rentas más bajas, ya se lo digo yo. Y la foto, para una Esperanza triunfante: “No se ha ido”. Vaya.
El Mundo embargó anoche su edición. Imposible verla. Si es algo extraordinario ya entraré a lo largo del día para contárselo.

Ante ustedes, el españolizador Por: José María Izquierdo

Está  bien esto de ir subiendo escalones en la bronca con Cataluña. “Nuestro interés es españolizar a los alumnos catalanes”, dijo ayer José Ignacio Wert en el Congreso. O sea, que “Ayudando”, como titula hoy El Periódico. Pues nuestros chicos están orgullosos de la valentía del ministro de Educación, Cultura y Deporte. Si estuviera en la plaza, sombreros cordobeses, puros, mantillas y hasta sostenes, si me permiten decirlo, habrían volado hacia el albero entre gritos de “Torero, torero”. Pasa, sin embargo, que Wert es ministro del Gobierno y lo mismo tiene en estos momentos un tanto delicados alguna contraindicación esta novedosa afición suya por hacerse el héroe de toda la carcundia mediática. Debe compensarle. Y a Rajoy, convenirle.
Wert
Se nos agolpan noticias sobre La Gaceta. Y a mí qué, se dirán ustedes. Pues lo mismo tienen razón, ya ven…
Editorial de La Razón. ¿Es más héroe Basagoiti o Wert? Difícil elección entre dos superhombres.
 El uno: “Desde esa posición de autoridad moral que le confiere luchar y defender los valores constitucionales, Basagoiti ofrece la fórmula para colocar en su justo lugar a los nacionalistas e independentistas vascos y catalanes: respuesta unitaria de la sociedad española, reacción clara del Gobierno de España y, sobre todo, movilización de esa mayoría social que no quiere rupturas, aunque no lo exprese con los alardes propagandísticos de los separadores”. 
 El otro: “Nada más oportuno que la intervención del ministro Wert en el Congreso, cuya claridad y valentía ha escandalizado a los nacionalistas.
 El ministro de Educación aseguró que su política en Cataluña se dirigirá a ‘que los niños catalanes se sientan tan orgullosos de ser catalanes como de ser españoles’.
 Elemental. Lo mismo cabe decir de los niños vascos.
 Ya era hora de que un miembro del Gobierno de España tuviera el coraje de denunciar la manipulación nacionalista de las escuelas para falsear la Historia común de los españoles, para adoctrinar en la secesión y para instalar un rechazo a todo lo que España es y significa”. ¡Qué dura la elección entre uno y otro cíclope!
Martín Prieto mete prisa al Ministerio del Interior para que prohíba ir a las manifestaciones con capucha o similar
. Y recuerda el caso del italiano Leopoldo de Gregorio, ministro de Hacienda –o cargo equivalente en la época- de Carlos III, más conocido como el marqués de Esquilache 
. La revuelta popular fue extraordinaria ante la prohibición impuesta por el marqués de chambergos y capas largas. Incluso cargó con tijeras a las patrullas policiales –cual Mariano Rajoy- para dejar a los embozados con el paño a la medida autorizada.
 La cosa acabó con el envío del ilustrado marqués de embajador a Venecia
No me parece mala idea, no. Que manden a Ignacio Cosidó de embajador a Italia. O a Venecia. 
Aunque sea de cónsul.
Ya saben que “mañana es 12 de octubre, Día del Pilar y de la Hispanidad”, como gentilmente nos recuerda Alfonso Ussía. 
 Y tras felicitar a la Guardia Civil por la fiesta de su patrona, la emprende con Mas.
  Y para ello se sirve de su acendrado amor hacia el sector castrense: “Es muy complicado en España hoy en día -Cataluña incluida, claro-, acudir a una celebración compuesta en su totalidad por españoles decentes, muchos de ellos, catalanes”.
  Así empezamos, que es solo el aperitivo: “Esa decencia que desfilará ante el Rey ha elegido por vocación el servicio a España y los españoles. 
Unos llegan más arriba y otros se quedan en el camino. 
La mayoría acude a cumplir en el exterior misiones acordes a nuestros compro¬misos internacionales y por fortuna, cumplido el deber, vuelven a España.
 Algunos lo hacen en un ataúd. Nos están defendiendo a todos, catalanes, vascos, castellanos, andaluces y para qué seguir. Uno de los defendidos es Mas, aunque su sensibilidad de chorlito nervioso le impida recono¬cerlo, valorarlo y agradecerlo”
. Que es lo que queríamos demostrar.
Y lo que dijo Wert, que tanto aplaude el editorial de Abc: “El Gobierno de Mariano Rajoy ha puesto fin a la pasividad con la que se dejaba hacer y deshacer a los nacionalistas con una educación a la medida del secesionismo y la hostilidad hacia España.
 El ministro de Educación, José Ignacio Wert, puso el dedo en la llaga del sistema educativo catalán cuando afirmó, ayer en la sesión de control del Congreso de los Diputados, que el Gobierno quiere ‘españolizar a los niños catalanes”. 
 Ahí está. El dedo, efectivamente, en la llaga
. Con lo que duele. Al que tiene la llaga, claro. Pero Manuel Martín Ferrand, que ya ha visto mucho, tiene otra opinión: “A los alumnos hay que educarlos.
 Españolizarlos es tan perverso como catalanizarlos”.
No así Isabel San Sebastián, que también ha debido de ver mucho, quién lo duda, pero no todo el mundo tiene la misma capacidad de comprensión: “A juzgar por la catarata de descalificaciones e insultos que le cayó inmediatamente en las redes sociales, varios medios de comunicación y hasta el Senado, de labios de un representante de CiU, lo que hizo ayer el ministro de Educación en el Congreso fue un acto rayano en el heroísmo.
 Una hazaña democrática merecedora de admiración. 
Una proeza que ninguno de sus predecesores, salvo Esperanza Aguirre, había osado acometer”. 
 Lo que sigue pueden ustedes leerlo en Abc. Que tampoco es cosa.

RAIMON - AL VENT - 50 ANYS