¡Qué bueno que nos visite por fin el Centre National des Arts du Cirque, epicentro de la renovación circense francesa! This is the End, el espectáculo que trae al Price, es una excelente muestra de los réditos que a nuestros vecinos del norte les está proporcionando una política decidida de inserción del circo en el tejido cultural y educativo, iniciada 25 años ha: hoy el circo francés es un yacimiento de empleo, un producto artístico que se exporta solo y, la escuela superior donde se enseña, un foco de atracción para alumnos de toda la Unión Europea.
Allí se dan dos años de formación y, en tercero, un taller cuatrimestral con un director de teatro diferente cada vez (desde George Lavaudant hasta Arpad Schilling) con el cual los alumnos montan un espectáculo que tiene una gira monumental asegurada.
Este año se ha hecho cargo del taller David Bobee, quién, felizmente, apoya el grueso de su propuesta teatral en las habilidades portentosas de estos artistas de entre 20 y 29 años en vez de obligarles, como vemos a menudo, a usar lenguajes escénicos que no dominan.
Bobee deja caer la pregunta: "¿Qué haríais si el mundo se acabara en cinco minutos?”, y sus pupilos la responden lanzándose a la pista como si fuera la última vez.
Todos los números tienen su aquel: la actitud zen con que Rafael de Paula templa una disciplina tan adrenalínica como el mástil chino, por el que se desliza sin manos como serpiente por la cadera de Eva; la despreocupada alegría de los portés acrobáticos del dúo camboyano; los saltos mortales en la báscula coreana, prolongados hasta la extenuación, de Rémi Fardel, Jérôme Hugo y Amaia Valle…
Quizá sobren algunas palabras, quizá la voluntariosa parrafada inicial en castellano debiera de mantenerse en su francés original (aprovechando la excelente sobretitulación), quizá todo podría acabar con el primero de los tres finales (la caída del equilibrista al cabo de la dramática cuenta atrás) pero son éstas pegas muy menores en un trabajo vibrante y delicado que contagia energía positiva, ganas de tomar nuevos rumbos y un espíritu de equipo ejemplar.
THIS IS THE END
Producción: Centre National des Arts du Cirque. Autor: Cristián Soto. Dirección: David Bobee. Circo Price Del 30 de mayo al 3 de junio.Este año se ha hecho cargo del taller David Bobee, quién, felizmente, apoya el grueso de su propuesta teatral en las habilidades portentosas de estos artistas de entre 20 y 29 años en vez de obligarles, como vemos a menudo, a usar lenguajes escénicos que no dominan.
Bobee deja caer la pregunta: "¿Qué haríais si el mundo se acabara en cinco minutos?”, y sus pupilos la responden lanzándose a la pista como si fuera la última vez.
Todos los números tienen su aquel: la actitud zen con que Rafael de Paula templa una disciplina tan adrenalínica como el mástil chino, por el que se desliza sin manos como serpiente por la cadera de Eva; la despreocupada alegría de los portés acrobáticos del dúo camboyano; los saltos mortales en la báscula coreana, prolongados hasta la extenuación, de Rémi Fardel, Jérôme Hugo y Amaia Valle…
Quizá sobren algunas palabras, quizá la voluntariosa parrafada inicial en castellano debiera de mantenerse en su francés original (aprovechando la excelente sobretitulación), quizá todo podría acabar con el primero de los tres finales (la caída del equilibrista al cabo de la dramática cuenta atrás) pero son éstas pegas muy menores en un trabajo vibrante y delicado que contagia energía positiva, ganas de tomar nuevos rumbos y un espíritu de equipo ejemplar.