10 jul 2011
Descanse en Paz Facundo Cabral
Facundo Cabral: Si se calla el cantor...
"El diablo fue al mar,
a escribir la historia del mundo,
pero no había agua,
Dios se la había bebido"
Estos versos pertenecen al gran poeta, músico y cantor argentino Facundo Cabral, que ha sido asesinado a tiros en Guatemala. Vuelve a cumplirse la maldita paradoja de que las voces que más gritan contra la violencia y la injusticia son segadas injusta y violentamente. Facundo Cabral engrosa el triste listado de quienes pregonaban la paz y fueron acallados por el odio y la prepotencia, que hace creer a los hombres que son diosecillos dueños de las vidas de los demás. Desde Martin Luther King y Gandhi, hasta John Lennon y Roque Dalton, la violencia se volvió contra sus opositores. En cierto modo es hasta lógico, es el instinto del escorpión, porque los violentos no entienden otro lenguaje, como los perros solo saben ladrar. Facundo Cabral ha muerto asesinado, como Víctor Jara, como Jorge Cafrune.
Lo conocimos primero en la voz de Alberto Cortez y luego en la propia, con ese fondo de guitarra pampeana que mantiene con arpegios el aire de la poesía más elevada, que es a la vez voz del pueblo enmudecido. Aprendió Cabral eso de Buenaventura Luna, Atahualpa Yupanqui, José Larralde y su amigo y mentor Jorge Cafrune. La vida personal de Cabral fue una carrera de obstáculos. Estaba predestinado a la soledad, tal vez por eso se compartía con el mundo. Nacido muy pobre, no habló hasta los nueve años y aprendió a leer a los catorce. Pero aprendió bien, leyendo a Borges y Whitman. No sabía si iba más lejos la montaña o el cangrejo (eso decía en una de sus muchas canciones), y en sus libros de poemas mezclaba lo más popular y folclórico con la cultura más sofisticada, como buen discípulo de Borges, maestro de estas y otras mixturas. Decía que se encontró con Dios en la figura de Jesucristo, pero también en la de Gandhi y en una mirada al mundo filtrada por la memoria del gran poeta de Manhattan: "Ama hasta convertirte en lo amado, es más, hasta convertirte en el amor". Entre la rabia y la impotencia, la muerte injusta de Cabral nos lleva a esa Latinamérica violenta, y es un muerto más como las dos docenas que hoy han caído en Monterrey, pero la muerte del poeta y cantor es también el asesinato de una voz que se prestaba a los amordazados. En realidad han disparado contra todas las personas de buena voluntad, contra la inteligencia y la sensibilidad, contra la esencia misma del ser humano.
"No soy de aquí, ni soy de allá", insistía, pero era porteño al fin y al cabo, pues fue a morir un 9 de julio, Día de la Independencia y Fiesta Nacional en Argentina. Es otra triste paradoja.
El único consuelo que nos queda es que se puede matar a los poetas, pero nunca a la poesía. Seguiremos escuchando y leyendo al gran amigo del hombre Facundo Cabral, porque, como cantaba Horacio Guarany, "Si se calla el cantor, calla la vida".
Publicado por Emilio García Déniz en Bardinia
"El diablo fue al mar,
a escribir la historia del mundo,
pero no había agua,
Dios se la había bebido"
Estos versos pertenecen al gran poeta, músico y cantor argentino Facundo Cabral, que ha sido asesinado a tiros en Guatemala. Vuelve a cumplirse la maldita paradoja de que las voces que más gritan contra la violencia y la injusticia son segadas injusta y violentamente. Facundo Cabral engrosa el triste listado de quienes pregonaban la paz y fueron acallados por el odio y la prepotencia, que hace creer a los hombres que son diosecillos dueños de las vidas de los demás. Desde Martin Luther King y Gandhi, hasta John Lennon y Roque Dalton, la violencia se volvió contra sus opositores. En cierto modo es hasta lógico, es el instinto del escorpión, porque los violentos no entienden otro lenguaje, como los perros solo saben ladrar. Facundo Cabral ha muerto asesinado, como Víctor Jara, como Jorge Cafrune.
Lo conocimos primero en la voz de Alberto Cortez y luego en la propia, con ese fondo de guitarra pampeana que mantiene con arpegios el aire de la poesía más elevada, que es a la vez voz del pueblo enmudecido. Aprendió Cabral eso de Buenaventura Luna, Atahualpa Yupanqui, José Larralde y su amigo y mentor Jorge Cafrune. La vida personal de Cabral fue una carrera de obstáculos. Estaba predestinado a la soledad, tal vez por eso se compartía con el mundo. Nacido muy pobre, no habló hasta los nueve años y aprendió a leer a los catorce. Pero aprendió bien, leyendo a Borges y Whitman. No sabía si iba más lejos la montaña o el cangrejo (eso decía en una de sus muchas canciones), y en sus libros de poemas mezclaba lo más popular y folclórico con la cultura más sofisticada, como buen discípulo de Borges, maestro de estas y otras mixturas. Decía que se encontró con Dios en la figura de Jesucristo, pero también en la de Gandhi y en una mirada al mundo filtrada por la memoria del gran poeta de Manhattan: "Ama hasta convertirte en lo amado, es más, hasta convertirte en el amor". Entre la rabia y la impotencia, la muerte injusta de Cabral nos lleva a esa Latinamérica violenta, y es un muerto más como las dos docenas que hoy han caído en Monterrey, pero la muerte del poeta y cantor es también el asesinato de una voz que se prestaba a los amordazados. En realidad han disparado contra todas las personas de buena voluntad, contra la inteligencia y la sensibilidad, contra la esencia misma del ser humano.
"No soy de aquí, ni soy de allá", insistía, pero era porteño al fin y al cabo, pues fue a morir un 9 de julio, Día de la Independencia y Fiesta Nacional en Argentina. Es otra triste paradoja.
El único consuelo que nos queda es que se puede matar a los poetas, pero nunca a la poesía. Seguiremos escuchando y leyendo al gran amigo del hombre Facundo Cabral, porque, como cantaba Horacio Guarany, "Si se calla el cantor, calla la vida".
Publicado por Emilio García Déniz en Bardinia
9 jul 2011
Fiesta en casa de Caperucita Roja
Un baile inspirado en los cuentos de hadas, en el castillo de Valentino cerca de París, cierra de forma no oficial la semana de la moda de la alta costura .
. ."Pero, Natalia, ¿es que no sabías que había que venir de blanco y plata?", le preguntaba con una falsa sorpresa Mario Testino a la modelo Natalia Vodianova, vestida de color escarlata.
Era, obviamente, una entrada que el fotógrafo tenía preparada.
Todo el mundo sabía que Natalia, la estrella de la noche, acudiría vestida de Caperucita Roja a la gala que la rusa organizaba en el castillo de Valentino a las afueras de París. Una larga trenza y una tiara de perlas completaban su principesco atuendo.
Pureza y perversión, todo en uno
Gaultier, con plumas y a lo loco
El arte del ballet.
El diseñador francés estrena socios, ya que desde el mes de abril Puig posee una porción mayoritaria de la compañía. El grupo catalán le compró su participación a Hermès en un movimiento que consolida la apuesta por la moda.
Jean Paul Gaultier es la única firma de las que controla (Carolina Herrera, Paco Rabanne y Nina Ricci) que sigue haciendo alta costura.
El terreno en el que la fantasía de Gaultier sigue dando mejores resultados. Esta colección estaba muy libremente inspirada por el ballet.
Los zapatos de tacón invisible, por ejemplo, simulaban una bailarina de punta.- PATRICK KOVARIK (AFP)
Le siguieron otras dos piezas con cierto valor morboso: un Balmain firmado por Christophe Decarnin (55.000) y un Dior de John Galliano (45.000). Ambos diseñadores han sido despedidos en los últimos meses de las casas.
Notas de melancolía en las que seguramente pocos pensaban cuando Brian Ferry empezó su actuación y las modelos tomaron al asalto la pista de espejo.
. ."Pero, Natalia, ¿es que no sabías que había que venir de blanco y plata?", le preguntaba con una falsa sorpresa Mario Testino a la modelo Natalia Vodianova, vestida de color escarlata.
Era, obviamente, una entrada que el fotógrafo tenía preparada.
Todo el mundo sabía que Natalia, la estrella de la noche, acudiría vestida de Caperucita Roja a la gala que la rusa organizaba en el castillo de Valentino a las afueras de París. Una larga trenza y una tiara de perlas completaban su principesco atuendo.
Pureza y perversión, todo en uno
Gaultier, con plumas y a lo loco
El arte del ballet.
El diseñador francés estrena socios, ya que desde el mes de abril Puig posee una porción mayoritaria de la compañía. El grupo catalán le compró su participación a Hermès en un movimiento que consolida la apuesta por la moda.
Jean Paul Gaultier es la única firma de las que controla (Carolina Herrera, Paco Rabanne y Nina Ricci) que sigue haciendo alta costura.
El terreno en el que la fantasía de Gaultier sigue dando mejores resultados. Esta colección estaba muy libremente inspirada por el ballet.
Los zapatos de tacón invisible, por ejemplo, simulaban una bailarina de punta.- PATRICK KOVARIK (AFP)
Le siguieron otras dos piezas con cierto valor morboso: un Balmain firmado por Christophe Decarnin (55.000) y un Dior de John Galliano (45.000). Ambos diseñadores han sido despedidos en los últimos meses de las casas.
Notas de melancolía en las que seguramente pocos pensaban cuando Brian Ferry empezó su actuación y las modelos tomaron al asalto la pista de espejo.
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