Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

3 mar 2011

Necesitamos MARUJA TORRES

La ONG Intermón Oxfam tiene que despedir a 90 de su medio millar de trabajadores en España para poder mantener su nivel de ayuda.
La crisis, con la consiguiente pérdida de contribuciones, les afecta precisamente cuando el momento mundial requiere más de la colaboración humanitaria.
 Es una cifra.





Las cifras siembran el desánimo al escuchar la voz de la radio al despertar.
Miles de parados de febrero en España, engrosando los millones previos; decenas de miles de refugiados de varias nacionalidades, emigrantes de la pobreza que encontraron trabajo en Libia, uniéndose a los propios libios que huyen y atestando, aterrados y desvalidos, la frontera con Túnez.
 Lo más elemental, un plan de solidaridad para emergencias, no pone en marcha a la comunidad internacional.



En RNE, Juanra Lucas inicia su entrevista a Iñaki Gabilondo con una pieza musical elegida por este: "España, camisa blanca de mi esperanza", canta la Belén los versos de Blas de Otero, con música de Víctor Manuel. La que cala no es esperanza, sino otra estrofa: "Quisiera poner el hombro y pongo palabras/ que casi siempre acaban en nada/ cuando se enfrentan al ancho mar".



Hay que buscar palabras.
De consuelo y de estímulo. Recurro a quienes las escriben mejor.
Y retomo el libro de Amin Maalouf, El desajuste del mundo.
Una frase que hoy despliega su potente significado: "Lo que estamos viendo ahora es el crepúsculo de las civilizaciones separadas, no su advenimiento ni su apoteosis".
Más pedestremente expuesto: si, unidos, asumiéramos como nuestra la herida de esa frontera libio tunecina, centenares de jóvenes deberían recibir ahora mismo formación para lanzarse allí con ayuda humanitaria.
Pagados por los Estados, sintiéndose útiles, siéndolo. Acercándonos.
Si ya estamos en la ruina, ¿qué importa un gasto más? Necesitamos un New Deal global y moral, o esto se hunde.

El tribunal suspende la pena de la mujer que mató al violador de su hija hasta que se decida sobre el indulto

El tribunal suspende la pena de la mujer que mató al violador de su hija hasta que se decida sobre el indulto.
La Audiencia de Alicante acepta su recurso para aplazar el ingreso en prisión.-Argumenta que vive "ajena al delito" .
La Audiencia de Alicante ha acordado estimar la solicitud de la suspensión de la condena impuesta a la mujer de Benejúzar que mató, tras rociarle con gasolina y prenderle fuego, al violador de su hija cuando esta tenía 13 años, según han informado fuentes judiciales.




Suspendida la entrada en prisión de la mujer que mató al violador de su hija en Alicante

Más de 5.000 firmas piden el indulto para una mujer que mató al violador de su hija en Alicante

"La muerta hubiera podido ser yo"



La sección séptima de la Audiencia de Alicante, con sede en Elche, ha tomado esa decisión en tanto se tramita la petición de indulto para la mujer, formulada por su abogado ante el Ministerio de Justicia.
El tribunal ya aplazó en febrero el ingreso en prisión de María del Carmen García hasta resolver la petición de suspensión que presentó.
 La Audiencia basa su resolución en las circunstancias personales de la mujer, que está en libertad provisional, al señalar que "mantiene una vida ajena al delito en la actualidad", "carece de antecedentes policiales y penales" y ha de "atender a la familia, en concreto a su esposo, que padece una grave enfermedad desde hace años".



También considera que "un ingreso en prisión puede tener indeseados efectos en el curso evolutivo del tratamiento médico que la penada sigue para su enfermedad mental".



La Audiencia de Alicante sostiene que se produce en este caso la concurrencia de "motivos excepcionales" para la concesión de la suspensión de la condena al amparo del artículo 4.4 del Código Penal y aduce que el ministerio fiscal no se opone a esa medida. La mujer, María del Carmen García fue condenada en julio de 2009 por la Audiencia alicantina a 9 años y medio por el crimen, aunque un año después el Tribunal Supremo rebajó la pena hasta cinco años y medio al aplicarle la eximente incompleta de trastorno mental transitorio.

Iñaki Gabilondo JUAN CRUZ

Iñaki Gabilondo ve las anchoas y exclama "¡oh!" como quien se despierta con el apetito que dan las cosas inolvidables.
La dueña de la casa es María Eugenia Antía, guipuzcoana como él, así que le dice algo que él escuchaba allá arriba: "Es como si comerías en Donosti".





El periodista reflexiona en un libro sobre 45 años en el oficio

En plenitud está Gabilondo.
Así que hablamos de comida.
 Antes, en una rueda de prensa en la que ha charlado con periodistas acerca del oficio en el que lleva 45 años, ha hecho una comparación entre lo que ofrecen los periodistas y lo que hacen los cocineros, "cuidadosos siempre en la manipulación de los alimentos".



Ha escrito un libro, El fin de una época (Barril y Barral), que presenta esta tarde en el Círculo de Bellas Artes en compañía de su hermano Ángel, el ministro de Educación.
En ese libro habla de la manipulación a la que sometemos los de este oficio a los alimentos de los que se nutre el periodismo.



Los cocineros, dice, han de garantizar que los alimentos han sido bien manipulados. "Con el periodismo pasa igual".
Nosotros "trabajamos con un material muy delicado, las noticias; y hay algunos que son escrupulosísimos".
Pero los hay "que por conquistar clientes a toda prisa acercan sus manos sucias incluso al producto más delicado".



El periodista trata "una mercancía delicada que ha de ser tratada con garantía". Ahora Internet es "la excusa perfecta para los manipuladores. E Internet es tan solo un instrumento que necesita buenos cocineros que le den la cocción adecuada".



La metáfora vale también para lo indigesto en periodismo.
Dice Gabilondo que ahora muchos ofrecen basura alegando "que eso es lo que quiere la gente". Es mentira, según él: "La basura no se puede ofrecer ni aun presentándola como comida rápida, pues rápida puede ser una comida fabulosa.
Y la basura es basura aunque la adereces". Pero no miremos solo "a los rincones oscuros: en España hay excelentes cocineros y fabulosos periodistas".



El cocinero, como el periodista, "tiene la responsabilidad de la salud de los clientes". Y eso se aprende teniendo referencias.
En lo nuestro, él cita dos referentes, Manu Leguineche y Evaristo Canete, cámara de TVE.



Su experiencia le ha llevado "a ser siempre un contemporáneo profesional", de todo lo grande que ha ocurrido.
 "Ahora soy contemporáneo del fin de una época, y eso lo vivo con la perplejidad que se supone que se merece este cambio". ¿Algo que le haya hecho sentir bien en esta mesa enorme que es su vida? "Últimamente, la actitud de mis compañeros de CNN +, que hasta el último suspiro de la emisora trabajaron con una dignidad formidable". ¿Y un desagrado?
 "La estafa que sufren las mujeres que después de haber peleado por hacerse un sitio en el mundo laboral se encuentran ahora en el paro y en el desamparo".



Come con verdadero apetito.
 Le pregunto si habría un plato que recogiera todos sus sabores.
"Ha habido de todo: dulce, amargo, ácido... Con esos ingredientes no sé si mis amigos Arzak o Berasategui se atreverían a hacer un plato...".



¿Y de postre? "¡Déjate de metáforas! ¡Lo que yo quiero es una mamia! [cuajada, en euskera]".

El beso que no se vio en los Oscar

Durante la entrega de premios, la cadena ABC ocultó el gesto de cariño entre Javier Bardem y Josh Brolin .
Aparecieron sobre el escenario para entregar dos premios Oscar.
Iban vestidos igual, con un ajustado traje blanco, se marcaron un baile, y después, se besaron en la boca en el escenario.
 Pero eso nadie lo vio.
 Javier Bardem y Josh Brolin, que fueron compañeros en la película No es país para viejos, se juntaron sobre el escenario para dar los premios al Mejor Guión Original y el Mejor Guión Adaptado y decidieron demostrar lo bien que se llevan.
Pero la cadena ABC ocultó la imagen.




El beso de las reinas del pop

¿Qué tiene de especial un beso entre mujeres?

Los besos lésbicos de Madonna

El 'marketing' de los besos



En el momento del beso, que apenas fue un roce de labio contra labio, las cámaras decidieron enfocar la cara de una sonriente Penélope Cruz, que miraba divertida a la pareja en el escenario.
No fue hasta el día siguiente, cuando la foto del beso se publicó, cuando aquellos que siguieron la gala por televisión descubrieron esa muestra de afecto.
Ocultar el beso fue posible para la ABC porque se emitió con 7 segundos de retardo.



La página web sobre cultura pop y noticias del espectáculo AfterElton.com lo denunció . Aunque en un primer momento ha tratado de pedir explicaciones a ABC, la cadena que realizó y retransmitió la gala, ha rehusado dar comentarios. Quien ha dado la voz de alerta en AfterElton ha sido un espectador español, José Manuel Pinzones, que cree que se trata de "un acto homófobo, y por tanto invisible e intrascendente socialmente, pues si hubiera sido con otra minoría les hubiera explotado en la cara".



Los besos entre parejas del mismo sexo son habituales en las galas de entrega de premios. Uno de los más comentados fue el de Madonna con las cantantes Christina Aguilera y Britney Spears en una entrega de los premios MTV, hace ya casi ocho años.
En enero del año pasado, Sandra Bullock besó a Meryl Streep, y meses más tarde, a Scarlett Johansson .
 En los premios Goya es aun más habitual. Uno de los que primero se decidió fue el presentador José Corbacho hace dos años.
Además de besarse con Elsa Pataky, no se cortó a la hora de ponerle los labios a Alejo Sauras o a Hugo Silva.