Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

24 jul 2018

Lo decía tu madre: “Hay que ventilar la casa”, ahora lo dicen los médicos

Pasamos el 90 % de nuestro tiempo en un interior, una costumbre que puede causar riesgos para la salud si no aireamos los espacios.

 Hacerlo tres o cuatro veces al día durante 10 minutos puede evitar enfermedades.

El buen hábito de ventilar la casa puede mejorar tu salud y evitar enfermedades como el cáncer de pulmón.
El buen hábito de ventilar la casa puede mejorar tu salud y evitar enfermedades como el cáncer de pulmón. CORDON PRESS
 
La compañía VELUX recomienda “ventilar la casa tres o cuatro veces al día durante 10 minutos con más de una ventana abierta, no secar la ropa en el interior –puede provocar un tipo de moho doméstico nocivo para la salud– y asegurarse de que las cortinas y persianas estén completamente abiertas durante la horas diurnas”.
La compañía VELUX recomienda ventilar la casa tres o cuatro veces al día durante 10 minutos.
La compañía VELUX recomienda ventilar la casa tres o cuatro veces al día durante 10 minutos.
De hecho, el fabricante ha lanzado recientemente, con la compañía de domótica Netatmo, un sistema de ventanas que permite el funcionamiento automático e inteligente basado en sensores para facilitar la ventilación de los hogares desde el propio teléfono. “VELUX Active –así es como se llama este producto– controla la temperatura, la humedad y la concentración de CO2 dentro del hogar, así como monitoriza los datos meteorológicos; se mejora la calidad del aire, el clima, la ventilación y la protección solar, creando así unas condiciones de vida en el interior mucho más saludable”, cuenta Yolanda Coello, responsable de Comunicación de la compañía.
Si al hecho de ventilar mejor el domicilio, se suma, como ahora hace Susana Cancho, las tres horas mínimas de exposición al exterior de ella y su bebé, la calidad y esperanza de vida puede mejorar.
 “Pasamos un gran número de horas en ambientes cargados y poco ventilados y no somos conscientes de los riesgos asociados a esta forma de vida, sin la luz natural ni el aire fresco que nuestro cuerpo y mente necesitan”, añade Coello.
 Por ahora, la primeriza madre mantiene subidas las persianas de su casa, ha comprado cortinas de color claro y ventila con corriente un par de horas al día, “me da igual que entre polvo, quiero que entre la luz y el aire fresco”. 

 

No hay comentarios: