Es experta en captación de fondos para ONG, estudió marketing y trabaja para Inmark Europa.
Está decidida a ejercer de esposa del presidente a diferencia de su predecesora.
- En España la primera dama es la Reina de España.
- Así que Begoña Gómez, la esposa de Pedro Sánchez, ejercerá tan solo como la mujer del presidente del Gobierno.
- Pero esta bilbaína a la que no le gusta hablar de su edad hace tiempo superó los 40.
- Se crió en León, lleva al lado del líder de los socialistas desde hace 12 años y está dispuesta a ejercer como tal a diferencia de su predecesora en el cargo Elvira, Viri, Fernández Balboa que ha intentado mantenerse siempre en un más que segundo plano.
Estuvo a su lado en los debates televisivos cuando hizo su primera campaña a la presidencia.
Estuvo detrás de él la noche en que se marchó de Ferraz.
Y este viernes ha ocupado un puesto en la tribuna de invitados vistiendo una chaqueta roja que se ha convertido para ella en todo un símbolo.
"Me enamoré con 31 perdidamente de mi mujer (...) Fue en la casa de un amigo mío en una fiesta de cumpleaños.
Tuve que empeñarme mucho unas cuantas veces. Me lo puso difícil", develó el político durante una entrevista con Bertín Osborne.
Tenía entonces 30 años.
Fue él quien se trasladó al piso de su novia, en el barrio madrileño de La Latina.
"Fui yo quien puse el cepillo de dientes en su casa, ella tenía un piso montado más grande que el mío", contó Sánchez.
Su relación se fue afianzando y en 2005 nació su primera hija, Ainhoa.
Un año después se casaron "por lo civil".
Según reconoció el mandatario del PSOE, él tomó la iniciativa: "Le pedí matrimonio en un restaurante y fue muy bonito porque mi hija mayor era muy pequeñita, poco más de un año, la pusimos muy mona".
Al tiempo llegó Carlota, la segunda del matrimonio, que tiene ahora 11 años.
A la presentadora Susanna Griso, la esposa de Sánchez le confesó: "Me ha escrito cartas de amor. Lo tengo todo guardado en un baúl pequeño de madera".
El ahora presidente dice de ella:
"Es constructiva, positiva, siempre mira las cosas buenas de la vida".
Muchos ven en Begoña Gómez a una nueva Michelle Obama, ya que quiere ejercer de esposa de presidente pero no ser un florero.
La familia vivía hasta ahora en un chalé adosado en Pozuelo de Alarcón (Madrid).
Ahora hacen las maletas para instalarse en La Moncloa, con el temor de que esta nueva etapa no altere la vida de sus hijas, dos niñas anónimas.
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