La hija de la princesa Carolina y el hijo de la actriz Carole Bouquet se han comprometido tras un año de relación.
Silvia Ayuso
La historia de Carlota Casiraghi
demuestra que ser princesa no constituye necesariamente una garantía
para una vida de cuento de hadas, aunque los privilegios sirvan para
amortiguar, y bastante, las penas.
La hija de Carolina de Mónaco perdió en un accidente
deportivo a su padre, Stefano Casiraghi, cuando no tenía ni cuatro
años.
Ha crecido de portada en portada de las revistas del corazón,
encantadas de ver en la bella joven una casi réplica de su madre, cuya
agitada vida sentimental ha alimentado las páginas de la prensa rosa
durante décadas.
A sus 31 años, Carlota suma varias relaciones
frustradas, y un hijo, Raphäel, de una de ellas, la que mantuvo con el
actor Gad Elmaleh hasta 2015.
Pero la princesa filósofa, porque la
Filosofía ha sido los últimos años su refugio, cree ahora haber
encontrado su media naranja.
Que no es amarga, pero que tampoco ha
tenido una vida fácil pese a que también pertenece a la crème de la crème de la cultura francesa.
Su nuevo amor, el definitivo parece —al menos el primero con el que ha manifestado su deseo de casarse— es Dimitri Rassam, productor cinematográfico francés
de 36 años y heredero también de un legado tan privilegiado como
trágico.
Rassam nació en París el 16 de noviembre de 1981 en una familia dedicada en cuerpo y alma al cine.
Su madre, la actriz Carole Bouquet, fue la musa de Luis Buñuel en su Ese oscuro objeto del deseo (1977) y sigue siendo, hasta hoy, una de las caras más reconocidas y respetadas del cine francés. Su padre, Jean-Pierre Rassam, fue un reputado productor de origen libanés que produjo películas de iconos del cine como Jean-Luc Godard o Roman Polanski.
El amor por el cine es amplio en la familia de Dimitri, cuyo primo Thomas Langman es el productor de uno de los mayores éxitos de la historia reciente del cine francés en público y críticas, The Artist, que se llevó cinco Oscar, uno de ellos al de mejor película que recibió el propio Langman.
Al igual que Carlota, Dimitri perdió a su padre
de manera trágica cuando no era más que un bebé. Jean-Pierre Rassam,
que durante largo tiempo arrastró problemas de alcohol y drogas, se
suicidó con una sobredosis de barbitúricos en enero de 1985, a los 43
años. Dimitri acababa de cumplir, dos meses antes, tres años.
No sería el único drama familiar que le esperaba: en 1997 se suicidó su tía paterna, Anne-Marie Rassam, madre de su primo Thomas Langman, quien también ha admitido que tiene un problema con las drogas que no siempre logra superar.
Anne-Marie se tiró de una ventana, algo que su hijo mayor y hermano de Thomas, Julien, actor, no logró superar; en 2000, también trató de suicidarse tirándose por una ventana ante la mirada horrorizada de su novia de la época, la actriz Marion Cotillard.
No lo logró y quedó tetrapléjico.
Dos años más tarde, volvió a intentarlo y esta vez sí logró quitarse la vida.
Pese a todo, Dimitri decidió pronto seguir los pasos de su padre y dedicarse al mundo de la producción donde, pese a su juventud, no le ha ido nada mal.
Con solo 23 años fundó su propia productora, Chapter 2.
Pronto también miró más allá de las fronteras galas y, entre otros, coprodujo Paradise Lost, donde Benicio del Toro interpreta al narcotraficante colombiano Pablo Escobar.
En 2008, un proyecto cinematográfico, Les enfants de Timpelbach, reúne a Dimitri Rassam con su madre, que interpreta un papel en el filme que produce su hijo.
En 2015, su producción animada El Principito, en la que invirtió ocho años de trabajo, logra un César al mejor filme de animación.
Quizás por ese buen recuerdo fue que Dimitri y Carlota decidieron oficializar su relación posando juntos hace una semana en la nueva edición de los Premios César, los mismos en los que se rindió homenaje a la española Penélope Cruz.
Era la primera vez que se dejaban fotografiar voluntariamente pese a que comenzaron su relación hace ya un año. Puede que sea porque el anuncio de boda es inminente.
La revista Vanity Fair asegura que el entorno de la familia Grimaldi le ha confirmado que Dimitri Rassam le pidió la mano a Carlota Casiraghi en un viaje a París la pasada semana.
Cuentan que Carolina de Mónaco está encantada con la pareja, con quien pasa estos días unas vacaciones en la nieve, ya que Dimitro es hijo de su gran amiga Carole Bouquet con la que comparte grupo de amigos con Karl Lagerfeld a la cabeza.
De confirmarse oficialmente, será el segundo matrimonio para el joven productor, que ya pasó por el altar en 2010 con la top model rusa Masha Novoselova, con la que tuvo una hija, Daria, un año después.
Ahora, Carlota y Dimitri se disponen a abrir un nuevo capítulo. Con un final algo más feliz, esperan.
Rassam nació en París el 16 de noviembre de 1981 en una familia dedicada en cuerpo y alma al cine.
Su madre, la actriz Carole Bouquet, fue la musa de Luis Buñuel en su Ese oscuro objeto del deseo (1977) y sigue siendo, hasta hoy, una de las caras más reconocidas y respetadas del cine francés. Su padre, Jean-Pierre Rassam, fue un reputado productor de origen libanés que produjo películas de iconos del cine como Jean-Luc Godard o Roman Polanski.
El amor por el cine es amplio en la familia de Dimitri, cuyo primo Thomas Langman es el productor de uno de los mayores éxitos de la historia reciente del cine francés en público y críticas, The Artist, que se llevó cinco Oscar, uno de ellos al de mejor película que recibió el propio Langman.
No sería el único drama familiar que le esperaba: en 1997 se suicidó su tía paterna, Anne-Marie Rassam, madre de su primo Thomas Langman, quien también ha admitido que tiene un problema con las drogas que no siempre logra superar.
Anne-Marie se tiró de una ventana, algo que su hijo mayor y hermano de Thomas, Julien, actor, no logró superar; en 2000, también trató de suicidarse tirándose por una ventana ante la mirada horrorizada de su novia de la época, la actriz Marion Cotillard.
No lo logró y quedó tetrapléjico.
Dos años más tarde, volvió a intentarlo y esta vez sí logró quitarse la vida.
Pese a todo, Dimitri decidió pronto seguir los pasos de su padre y dedicarse al mundo de la producción donde, pese a su juventud, no le ha ido nada mal.
Con solo 23 años fundó su propia productora, Chapter 2.
Pronto también miró más allá de las fronteras galas y, entre otros, coprodujo Paradise Lost, donde Benicio del Toro interpreta al narcotraficante colombiano Pablo Escobar.
En 2008, un proyecto cinematográfico, Les enfants de Timpelbach, reúne a Dimitri Rassam con su madre, que interpreta un papel en el filme que produce su hijo.
En 2015, su producción animada El Principito, en la que invirtió ocho años de trabajo, logra un César al mejor filme de animación.
Quizás por ese buen recuerdo fue que Dimitri y Carlota decidieron oficializar su relación posando juntos hace una semana en la nueva edición de los Premios César, los mismos en los que se rindió homenaje a la española Penélope Cruz.
Era la primera vez que se dejaban fotografiar voluntariamente pese a que comenzaron su relación hace ya un año. Puede que sea porque el anuncio de boda es inminente.
La revista Vanity Fair asegura que el entorno de la familia Grimaldi le ha confirmado que Dimitri Rassam le pidió la mano a Carlota Casiraghi en un viaje a París la pasada semana.
Cuentan que Carolina de Mónaco está encantada con la pareja, con quien pasa estos días unas vacaciones en la nieve, ya que Dimitro es hijo de su gran amiga Carole Bouquet con la que comparte grupo de amigos con Karl Lagerfeld a la cabeza.
De confirmarse oficialmente, será el segundo matrimonio para el joven productor, que ya pasó por el altar en 2010 con la top model rusa Masha Novoselova, con la que tuvo una hija, Daria, un año después.
Ahora, Carlota y Dimitri se disponen a abrir un nuevo capítulo. Con un final algo más feliz, esperan.
No hay comentarios:
Publicar un comentario