Un Blues

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4 may 2015

Sean Penn: “No deseo convertirme en una estrella de acción”............................. Rocío Ayuso

Ganador de dos premios Oscar, con una vida personal expuesta a las cámaras desde su juventud, Sean Penn es un ‘outsider’ de Hollywood

En esta conversación reflexiona sobre su visión del cine y del mundo. Y de por qué, a sus 54 años, piensa seguir dando guerra.

Sean Penn: "Ninguno puede negar la necesidad de contar con armas de fuego". / Getty

En la escuela le solían llamar Gary Cooper porque todo lo que decía era sí y no
. Parco siempre en palabras, habla poco y, si es posible, con la mano en la boca –con un cigarrillo, mejor–. Sean Penn sigue sin disfrutar del arte de la conversación
. A los 54 años, huye de las entrevistas todo lo que puede.
 El último gran rebelde de Hollywood no pone fácil la charla, a pesar de que el enclave donde tiene lugar es idílico.
 El paraíso se llama Malibu Beach Inn, un hotel impersonal en medio de la autopista del Pacífico, pero frente a una de las playas más envidiadas en Estados Unidos.
 Y, lo que es más importante para el actor, cercano a su vivienda.
En el Pacífico, el sol brilla meloso, abriéndose camino entre un cielo ligeramente encapotado sobre una mar salpicada de surfistas y gaviotas. Al sur se distingue la silueta de la ciudad de Los Ángeles. Al norte, un muelle de madera abandonado.
 En la habitación de la cita, una gran jarra de té helado con limón y mucho hielo, un cenicero aparentemente sin utilizar y dos publicistas personales del actor que permanecerán a su lado durante toda la entrevista
. Las condiciones para conversar con este intérprete y director dos veces galardonado con el Oscar son férreas.
 Un documento firmado deja claro que nada de preguntas personales.
 A la primera mención de Charlize Theron, la mujer que ha devuelto el amor y la sonrisa a la vida de Penn –además de su nueva musa en The Last Face, la película que está dirigiendo actualmente y en la que trabaja junto a Javier Bardem–, se acaba la entrevista.
 Nada de hablar tampoco de cualquiera de sus anteriores matrimonios, ya sea con Madonna o con Robin Wright, o sobre sus dos hijos, Dylan Frances y Hopper.
Penn está aquí para hablar de Caza al asesino, la cinta de acción que se estrena el 22 de mayo en España y en la que actúa a pecho descubierto y armado hasta las cejas, algo inusual en la carrera de un intérprete que no solo ha evitado el género, sino que ha criticado, y mucho, a un Hollywood que acostumbra a tirarse por la vía fácil en lugar de arriesgar y tomar decisiones artísticas fuera de la norma.
Rodada en gran parte en España y con Bardem de nuevo a su lado, Penn acepta romper su silencio para hablar de su obra.
 La conversación se llena de silencios, de pausas en las que se come el hielo a bocados y donde este hijo de actores mide cada una de sus palabras.
Con Caza al asesino, Penn ha disfrutado mientras filmaba en España. Bueno, en Cataluña, como corrige de inmediato con picardía y ganas de participar en la polémica.
–Son muchos los que dirán que no trabajé en España, sino en Cataluña [risas]. Reconozco que pasé unos días geniales en Madrid, aunque allí no rodé nada.
 Si mañana tuviera otro rodaje, volvería allí con los ojos cerrados.
 Me encantó el trabajo, la comida, los paseos por la playa al atardecer o por la noche, muy de noche, tras una cena aún más de noche, por el barrio Gótico…

 

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