En ningún momento de la historia, en ningún lugar del planeta, las religiones han servido para que los seres humanos se acerquen unos a los otros. Por el contrario, sólo han servido para separar, para quemar, para torturar.
No creo en Dios, no lo necesito y además soy buena persona
1 comentario:
Suscribo al 100%, las palabras del genial premio Nobel...
No añadiré nada más, salvo desearte a ti y a todos tus amigos, allegados y familiares, una feliz, y larga, larga vida. Eso sí, llena de salud, sobre todo... el resto, viene dado por las circunstancias.
Un abrazo.
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