Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

21 nov 2012

Los herederos del ‘boom’ discuten sobre la nueva narrativa y evocan a Carlos Fuentes

El escritor Carlos Fuentes. / DANIEL MORDZINSKI
Antes de morir el 15 de mayo de este año, Carlos Fuentes diseñó a principios de 2012 el programa de un ciclo de conferencias para debatir y reflexionar, a través de las aportaciones de siete autores, sobre la nueva narrativa latinoamericana.
 El encuentro, que se celebra hasta mañana en El Colegio Nacional de la capital mexicana, institución a la que perteneció Fuentes desde 1972, se ha convertido en un homenaje póstumo al escritor.
“Cuando era niño, me escapaba de clase para ir hasta el Nacional a ver al maestro”, recuerda el escritor Xavier Velasco
. El escritor mexicano, premio Alfaguara 2003 por Diablo guardián, es uno de los autores elegidos para participar en el evento.
 “Lo que más me atrae de estas conferencias es que Carlos Fuentes me escogiera para ello. Dos meses antes de morir me llamó para invitarme.
 Así que no es un compromiso ni una obligación, es una oportunidad, una alegría. Estoy nervioso”, reconoce entre risas en conversación telefónica cuando todavía ultima su ponencia de esta tarde.
La participación de cada uno de los escritores en las charlas es moderada por el autor y crítico literario peruano Julio Ortega. Además de Velasco, la lista de autores la completan los colombianos Juan Gabriel Vásquez y Santiago Gamboa; los chilenos Carlos Franz y Arturo Fontaine; la escritora y periodista argentina Matilde Sánchez, y el mexicano Ignacio Padilla.
La finalidad del ciclo La Nueva Novela Latinoamericana no es otra que debatir sobre la importancia de la narrativa hispana en el escenario mundial.
“Es un buen momento para la creación en español.
Hay mucha gente que se está atreviendo a muchas cosas, creo que ya no existen complejos a la hora de escribir sobre un sitio, no se ponen límites por ser de otra parte”. Para Xavier Velasco, el maestro Fuentes “es el James Bond” de las letras mexicanas, “él nos puso en el mapa”, recalca. El autor de Diablo Guardián o su más reciente La edad de la punzada no se considera parte de ninguna corriente literaria.
“Soy un heredero del ‘boom’ como lo somos todos o casi todos, pero la creación actual es tan diversa que no creo que pueda englobarse en un movimiento”, señala serio antes añadir ya en tono jocoso: “Bastante problema tengo con ser parte del mundo como para pertenecer a ninguna corriente, además, no tengo pandilla desde que iba al colegio”, concluye.

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