Esta tarde tengo tiempo para un café, sintiendo el aire fresco de poniente, sentado en esta terraza, pensando en ti, en lo que me haces sentir, en el dulce recuerdo de tantas horas.
Saboreo despacio el instante.
Pero, de él, sólo me queda el calor y el amargor del café.
Saboreo despacio el instante.
Pero, de él, sólo me queda el calor y el amargor del café.
5 comentarios:
Lo mejor de todo, el amargo café que te devuelve el antídoto contra la soledad... no siempre que tratamos de endulzar la realidad, funciona como esperamos: "La única certidumbre, es la incertidumbre".
(Me encanta el amargo sabor del café solo...)
Saludos utopazzianos.
Me alegro te guste ese sabor del café, dicen que tiene que tener tres sabors, pero no los recuerdo bien, creo que era Dulce como la vida, negro como el destino y dulce como la muerte, pero no me hagas mucho caso. Besos.
Amargo como la muerte.
El café debe ser caliente como el infierno, negro como el diablo, puro como un ángel, y dulce como el amor. (Maurice De Talleyrand-Périgord)Creo que este proverbio se acerca más
... Así es...
Besos Carla.
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