Isabel Preysler. / GTRESONLINE
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Tres bodas, dos divorcios, y cinco hijos. Este es el curriculum personal de Isabel Preysler.
Naturalmente, no alcanza las cotas de reincidentes famosas como la ya casi olvidada Zsa Zsa Gabor o la inmortal Elizabeth Taylor, pero en España —un país donde no existió el divorcio hasta 1981— nadie mejor que ella para escribir el prólogo del libro Un divorcio elegante o cómo desenamorarse con estilo (editado por Grijalbo, de la abogada Purificación Pujol.
En los prolegómenos de esta suerte de manual de comportamiento para romper el vínculo matrimonial y no acabar a bofetada limpia como Michael Douglas y Kathleen Turner en La guerra de los Rose, la elegante mujer de Miguel Boyer “buena amiga de la autora”, según sus propias palabras asegura que “la experiencia nos enseña que son escasas las separaciones sin desacuerdos”.
Y continúa: “La disolución de un vínculo siempre lleva consigo la existencia de una pugna anterior, grande o pequeña, de uno u otro tipo, así como el lógico desgarro interior”
. En su breve intervención —dos páginas y media— tiene tiempo para defender la utilidad de “una obra como ésta, cuyo objetivo se dirige a paliar y aminorar los conflictos más frecuentes entre las parejas que se separan, cuyo porcentaje, no lo olvidemos, es muy elevado”.
Para la prologuista, “la obra pone el énfasis, en cómo organizar la continuidad de la vida después de un ruptura, y para ello expone unas sensatas y prácticas reflexiones con el fin de aportar a los ex y sus circunstancias un factor de alivio y mejora de su calidad de vida emocional”.
Seguramente, Isabel Preysler no necesita los consejos prácticos que vierte en el libro Pujol, ya que a la ex de Julio Iglesias y del marqués de Griñon nunca se le ha oído una palabra más alta que otra en contra de sus exmaridos. En 1971, con apenas 20 años, se casó con el cantante.
Chábeli nació ese mismo año; Julio José, en 1973 y Enrique dos años después. Se separó en 1978.
Tras la anulación del matrimonio, el 1980, contraía segundas nupcias con Carlos Falcó, marqués de Griñón. El matrimonio duró cinco años y de esa unión nació Tamara Falcó, que ya ha cumplido 30 años. Tres años después de su boda empezaron los rumores de crisis y de separación que se confirmaron en 1985.
Por entonces, empezaba a ser un secreto a voces, que Isabel Preysler y Miguel Boyer, el todopoderoso ministro de Economía y Hacienda de Felipe González, mantenían un apasionado romance.
En marzo de 1986 fueron sorprendidos juntos por primera vez por los fotógrafos… Incapaces de negar lo evidente, los dos famosos personajes oficializaron su relación y se dieron el sí quiero en una ceremonia civil el 2 de enero de 1988.
Con Boyer, Isabel tuvo a su última hija Ana, que ya empieza a ocupar las portadas de las revistas del corazón de la mano de su madre y mentora.
Naturalmente, no alcanza las cotas de reincidentes famosas como la ya casi olvidada Zsa Zsa Gabor o la inmortal Elizabeth Taylor, pero en España —un país donde no existió el divorcio hasta 1981— nadie mejor que ella para escribir el prólogo del libro Un divorcio elegante o cómo desenamorarse con estilo (editado por Grijalbo, de la abogada Purificación Pujol.
En los prolegómenos de esta suerte de manual de comportamiento para romper el vínculo matrimonial y no acabar a bofetada limpia como Michael Douglas y Kathleen Turner en La guerra de los Rose, la elegante mujer de Miguel Boyer “buena amiga de la autora”, según sus propias palabras asegura que “la experiencia nos enseña que son escasas las separaciones sin desacuerdos”.
Y continúa: “La disolución de un vínculo siempre lleva consigo la existencia de una pugna anterior, grande o pequeña, de uno u otro tipo, así como el lógico desgarro interior”
. En su breve intervención —dos páginas y media— tiene tiempo para defender la utilidad de “una obra como ésta, cuyo objetivo se dirige a paliar y aminorar los conflictos más frecuentes entre las parejas que se separan, cuyo porcentaje, no lo olvidemos, es muy elevado”.
Para la prologuista, “la obra pone el énfasis, en cómo organizar la continuidad de la vida después de un ruptura, y para ello expone unas sensatas y prácticas reflexiones con el fin de aportar a los ex y sus circunstancias un factor de alivio y mejora de su calidad de vida emocional”.
Seguramente, Isabel Preysler no necesita los consejos prácticos que vierte en el libro Pujol, ya que a la ex de Julio Iglesias y del marqués de Griñon nunca se le ha oído una palabra más alta que otra en contra de sus exmaridos. En 1971, con apenas 20 años, se casó con el cantante.
Chábeli nació ese mismo año; Julio José, en 1973 y Enrique dos años después. Se separó en 1978.
Tras la anulación del matrimonio, el 1980, contraía segundas nupcias con Carlos Falcó, marqués de Griñón. El matrimonio duró cinco años y de esa unión nació Tamara Falcó, que ya ha cumplido 30 años. Tres años después de su boda empezaron los rumores de crisis y de separación que se confirmaron en 1985.
Por entonces, empezaba a ser un secreto a voces, que Isabel Preysler y Miguel Boyer, el todopoderoso ministro de Economía y Hacienda de Felipe González, mantenían un apasionado romance.
En marzo de 1986 fueron sorprendidos juntos por primera vez por los fotógrafos… Incapaces de negar lo evidente, los dos famosos personajes oficializaron su relación y se dieron el sí quiero en una ceremonia civil el 2 de enero de 1988.
Con Boyer, Isabel tuvo a su última hija Ana, que ya empieza a ocupar las portadas de las revistas del corazón de la mano de su madre y mentora.
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