La boda de Nicolás de Grecia con Tatiana Blatnik era el escenario propicio para acallar rumores sobre posibles malas relaciones entre doña Letizia y sus cuñadas, las infantas Elena y Cristina, primas del contrayente.
El sobrino de la Reina se casó ayer por la tarde con su novia en la iglesia de Spetses, una paradisíaca isla del golfo sarónico, ante la mirada de a 370 invitados y tras un verano sumamente extraño para la Corona española, en el que el Rey casi no apareció en Marivent y las infantas Elena y Cristina ni siquiera coincidieron con su cuñada Letizia en Mallorca. En un contexto así de complicado, nido perfecto para los rumores de desavenencias entre los hijos de los Reyes y sus parejas, llegó el día de la gran boda griega.
Y la tremenda crisis Griega ahí mientras se derrocha dinero de los Suegros con esos inmensos "posibles"
Como todo parece indicar que doña Letizia y las infantas se llevan de maravilla, podemos centrarnos en la primera boda real que acoge Grecia en 46 años. O casi, porque no se puede hablar de enlace real en toda regla, ya que la monarquía fue abolida en el país heleno en 1974 y los últimos en contraer matrimonio allí fueron los padres de Nicolás: Constantino, hermano de doña Sofía, y Ana María, en 1964.
Dos años antes, el rey Juan Carlos, entonces príncipe, había elegido también Atenas para casarse con Sofía de Grecia. Y así hasta ayer.
Vestida con un sobrio y elegante traje de novia, Tatiana Blatnik llegó a la iglesia en un carro tirado por caballos.
Allí le esperaban miembros de todas las casas reales europeas. No faltaron ni los recién casados Victoria y Daniel de Suecia, ni Guillermo y Máxima de Holanda, ni Haakon y Mette-Marit de Noruega. Rosario Nadal acudió sola y su ex marido, Kyril de Bulgaria, prefirió no asistir. Mary Donaldson, embarazada de gemelos, tampoco estuvo acompañada, pero la razón de su soledad no tiene misterios: su marido, Federico de Dinamarca, es miembro del COI y su presencia en una reunión del comité esta semana le hizo imposible ir a Spetses.
Doña Sofía apareció con Margarita de Dinamarca; el Rey sigue convaleciente de su operación.
Carlos Felipe de Suecia tampoco llevó a su novia, Sofia Hellqvist, una estrella de reality shows que poco a poco ha empezado a frecuentar actos oficiales de la familia real sueca. En esta ocasión, Magdalena, su hermana soltera, ejerció de pareja.
Pero la solitaria más original, con abanico y arte español incluidos, fue la infanta Elena.
Por lo visto sigue la moda de un titulo de la Nobleza pero sin posibles se case con alguien, fuera de la Nobleza con muchos posibles. Hasta ahora lo han hecho llos hijos del hermano de nuestra Reina y esa saga de K de Bulgaria, nada de posibles pero nada y casados con gente de muchisimos posibles y a tener hijos que da gusto.
Así las cosas Grecia está más en la Omda de una tragedia interpretada por Irene Papas y bailada en esos momentos de tristeza y esperanza , un hermoso Sirtaki al estilo de Zorba "El Griego".
No hay comentarios:
Publicar un comentario