6 jul 2010
SORPRESA
SORPRESA: Del francés meridional surprendre y, a su vez de sur (súper o sobre, lo mismo que en surrealismo) y prehendere (prender, agarrar, coger). Término de antiguo origen castrista que se utilizaba para designar la acción de coger desprevenido al enemigo en emboscada, de repente, de improviso. Surprise en francés, igual de desagradable porque servía para gravar impuestos extraordinarios. De ahí que, a muchas personas, las sorpresas no nos caigan bien pudiéndose traducir por causar alarma, intimidar, sobrecoger. Más tarde abandonó el significado castrense para indicar algo repentino o inesperado que puede tener valencia de neutral, agradable o desagradable, también. Aunque muchos son los que no incluyen la palabra en la lista de emociones, considerándola como una forma de reaccionar, sin más.
"Al día siguiente el Principito regresó.
- Hubiese sido mejor regresar a la misma hora – dijo el zorro. – Si vienes, por ejemplo, a las cuatro de la tarde, ya desde las tres empezaría a ser dichoso. Cuanto más avance la hora, más feliz me sentiré. Al llegar las cuatro, me agitaré y me inquietaré; descubriré el valor de la felicidad. Pero si vienes en cualquier momento, nunca sabré cuándo preparar mi corazón... Los ritos son necesarios."
Las sorpresas son confusas incluso en términos lógico-matemáticos, cuando un profesor advierte: " la próxima semana tendréis un examen sorpresa" , por ejemplo, se puede saber que no tendrá lugar el viernes, por ser el último día. Si dejara pasar toda la semana sin ponerlo, el viernes no sorprendería y , una vez sabido esto, por el mismo procedimiento tampoco podría ser el jueves ya que, en ese caso, pasaría a ser el último día y así sucesivamente. Claro que, hablando de exámenes, la palabra vuelve a tener acepción castrense. Y aun con este significado ¿se podría saber qué tiene que hacer un profesor para que su examen sea sorpresa? ¿o todos lo son? ¿o no pueden ser?
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