10 jul 2010
No hay culpables.
Atados con el fino hilo de un sentimiento,
endeudados con amores que no fueron,
fuimos capaces de seguir nuestro camino,
a fuerza de sueños pasajeros
No te culpes, ni me culpes,por no haber sabido
dar rienda suelta a nuestro destino,
y pensar, que todo era imposible,
en vez de luchar por esto,que nos había sucedido.
Prisioneros de distancias terminamos siendo,
de todas las cosas que nos alejaban,
que cobardes a la hora de aprender,
que ni mares, ni ríos, ni montañas
pueden terminar así de pronto
con éste loco amor que nos atrapa.
Y me aterra suponer que los silencios,
son capaces de matar a las palabras,
necesito del imperio de tus labios,
y fugarnos en abrazos en las tardes.
En el eco de los vientos que desplazan,
los te amo que pronuncio en alabanza,
siente, que mi cuerpo te reclama
y mis ojos buscan el reflejo en tus aguas.
Ya el sol se está ocultando,
la noche envuelta en velo negro se prepara,
estoy aquí, perdida en añoranzas
de tenerte algún día cerca mío
y no que seas algo inalcanzable,
ésa, es mi esperanza.
Aline Bruzas
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