Un Blues

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Del material conque están hechos los sueños

6 feb 2012

La noche de Cibeles nos confunde

Quien se haya propuesto comparecer en todos los saraos de la semana de la moda de Madrid, con sus días y sus noches, precisará, como mínimo, de un tratamiento integral de oxígeno en tres fases, al estilo de las clínicas estéticas de lujo, para alcanzar la meta del domingo
. Acabamos de pasar el ecuador de la semana de marras y algunos ya no dan abasto
Recapitulemos.
El lunes, quienes saltaron de los salones del Palace (donde desfilaron Yono Taola y Nihil Obstat) al museo del Traje (sede del pujante Madrid Fashion Show) ya desembocaron en el Válgame Dios, el local de copas y confidencias de la Chueca no gay regentado por Santi Carbones (marido de Raquel Meroño).
El martes, el todo Madrid pijo, con Ana Botella al frente, se daba de empujones por copar la front-row de los Alvarno.
El dúo francoespañol ha hecho de la localización golosa y consistente su máxima baza para incrementar su número de VIPs por metro cuadrado. En esta ocasión convocaron en la residencia del embajador de Francia, el excelentísimo señor don Bruno Delaye
. Después de la copa con el embajador, el canalleo se instaló de nuevo en el Válgame Dios, centro nocturno neurálgico de un off Cibeles que se revela como una competencia desleal para lo que se avecinaba después con la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid.
Al menos en lo que a festejos se refiere.
El miércoles existían dos alternativas: la ultrarrestringida y la popular.
La primera se acogió a la discreción de la boutique de Carrera y Carrera, en la calle Serrano, donde Juan Duyos y la firma de alta joyería celebraban el éxito de su colaboración en una fiesta para 50 personas que no buscaba las caras VIP ni la asistencia de la prensa, sino a clientas selectas de ambas marcas, relaciones públicas del mundo de la moda, altas ejecutivas y políticos de incógnito
Por su parte, el Ramsés reavivaba su mecha estrenándose como punto ineludible en las noches de la Mercedes-Benz Fashion Week Madrid. La idea, según explican sus organizadores, es convertirlo en el sitio oficial durante estos días. Esa noche podía verse a Mario Vaquerizo sudándolo todo en la cabina y a la galerista Topacio Fresh o al cronista Josie (enfundado en un poncho de piel de elefante de Missoni) bailando a sus pies; a Carmen Lomana dándose besitos con su novio en la barra; a María Reyes embarazadísima y actores televisivos de todo pelaje (desde Javier Calvo, de Física o Química, hasta Pepón Nieto).
Aviso a navegantes cibelinos: esta noche es allí mismo la fiesta post-desfile de Amaya Arzuaga, mañana será la de Davidelfin, el sábado la de Maya Hansen y el domingo la de Rabaneda. Colarse es cuestión de morro y de superproducirse el look adecuadamente. Aunque esta noche la fiesta reina es la ya clásica de Yo Dona en el Villamagna, donde pincharán las adorabilísimas Brianda Fitz-James y Miranda Makaroff, existen alternativas. Como The Fashion Party, en La Turba, con los DJ Jaimote Island y Vicente Gallart.
Y los más avezados, probablemente, acabarán sumándose a la celebración del cumpleaños de Andrea Pascual, novia de Beltrán Gómez-Acebo, en el Maculato.
El viernes se producirá una extraña mezcla entre supervivientes cibelinos y guerreros de fin de semana en la cita obligatoria de la jornada: la de Aristocrazy, la línea joven de la joyería Suárez, en el sitio de moda, Luzi Bombón. Emiliano Suárez, su responsable, anuncia "fiestón" con barra de ostras y champán, sesión a cargo de la estilista e it-girl Natalia Ferviú y Vicente Gallart, photocall y, por supuesto, el vídeo del desfile proyectado a todo trapo.
El sábado, Juan Vidal desfila en el Centro Nacional de Danza, con cóctel después allí mismo.
Malas noticias: este año la desparramada fiesta de la revista V Spain se ha caído del cartel. Y el domingo, para la chavalada de El Ego, abren el Nasti de 23:30 a 5:30. Su oferta, precios populares y diseñadores en cabina. Dicen que solo se podrá acceder con contraseña... o con el look adecuado.

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