Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

26 oct 2015

Los fotógrafos que tejieron la historia de la moda............................................... Elsa Fernández-Santos

Una exposición en el Museo Balenciaga reúne 86 imágenes de 50 autores clásicos que cambiaron el curso del género.

Mai-Mai, con un vestido de Fortuny. Imagen de George Platt. (1934)

La historia es legendaria: Martin Munkácsi no sabía una palabra de inglés cuando la editora de Harper’s Bazaar Carmel Snow le contrató para la revista.
 Corría el año 1933 y el joven fotógrafo húngaro llegó a Long Island para una producción de ropa deportiva y bañadores que protagonizó Lucile Brokaw, una it girlde la época, hija del patinador olímpico Irving Brokaw
. Cuando llegaron a la playa, el fotógrafo no sabía explicarse mientras la chica se moría de frío. Envuelta en una capa de gasa que desesperada le arrebató a Carmel Snow, Lucile Brokaw se puso a correr por la playa interpretando como pudo los gritos del fotógrafo, que sin mediar palabra la animaba a moverse libre y a su aire.
 Un instante de confusión gracias al cual Munkácsi captó la imagen, lejos de la quietud del estudio, más cerca de las nuevas emociones femeninas, que cambiaría el curso de la fotografía de moda.
La foto es una de las 86 obras que a partir del próximo viernes y hasta el 31 de enero colgarán en las paredes del Museo Cristóbal Balenciaga, en Getaria, Gipuzkoa, en la exposición About fashion, realizada a partir de los fondos de la coleccionista española Lola Garrido en colaboración con diChroma photography.
Lucile Brokaw en una imagen de Martin Munkácsi. (1933) / Martin Munkácsi
Garrido, que lleva años adquiriendo fotografía de moda, compila el trabajo de 50 clásicos, algunos apenas vistos en España. De Munkácsi a otros gigantes del género como Willy Maywald, George Hoyningen- Huene, Horst P. Horst, Germaine Krull, Alfred Eisenstaedt, Norman Parkinson, Helmut Newton, Cecil Beaton, Edward Steichen, Irving Penn, Louise Dahl Wolfe, Marcus Leatherdale, Inge Morath, Diane Arbus, Lillian Bassman, F.C. Gundlach, Cathleen Naundorf, William Klein o Frank Horvat.
Publicidad
Mientras hoy los fotógrafos de moda son celebridades lo cierto es que los que revolucionaron el medio llegaron ahí para ganarse la vida, y fue esta necesidad la que transformó la historia.
 Su curso, imparable en los últimos años, ha sido lento y a veces dramático.
Erwin Blumenfeld llegó a Estados Unidos huyendo del nazismo, su sangre dadaísta bombearía las portadas más míticas del Vogue, una audacia artística impensable en la actualidad.
 El caso de Munkácsi fue más sombrío.
 Arruinado, mendigó por comisiones de sus fotos en Harper’s Bazaar.
 De poco le sirvió que Richard Avedon confesara que la foto de la chica de la playa había sido una obsesión para él desde que la vio con 11 años o que Cartier-Bresson le debiera su vocación a otra imagen en movimiento del húngaro: la de unos niños negros bañándose desnudos en la orilla del mar. Sus archivos se perdieron después de su muerte, en 1963, y tuvieron que pasar décadas para que su figura fuese reivindicada.
Lilly Dache en una imagen de Alfred Eisenstaedt. (1937) / Alfred Eisenstaedt.
“Yo empecé comprando fotografía de moda en movimiento, no de estudio”, recuerda Lola Garrido, que en el Museo Balenciaga reúne cinco trabajos del húngaro y que en el último año ha expuesto una selección de sus fondos en el Pushkin de Moscú o dentro de los Encuentros de Arlés.
Me interesa la gran fotografía de moda pero reconozco que menos su evolución”, continúa la coleccionista
. “Hemos ido de la elegancia, de la búsqueda de belleza, ilusión y deseo que marcaron los años de posguerra, a un chic sucio, que es más contemporáneo y propio de los tiempos, pero que a mi no me interesa.
 La imagen de la mujer como muñeca o prostituta, o eso que yo llamo la estética del defecto, el gusto por lo friki y feista, donde la culpabilidad juega un papel muy importante, tampoco.
 Para mí queda Peter Lindbergh, que es el Irving Penn contemporáneo.
 Con él sí recupero la emoción.
 Trata a las mujeres como mujeres y lo hace desde el amor”.

 

Chanel desfilará en Cuba por primera vez en su historia

La 'maison' francesa desfilará en La Habana el próximo mes de mayo para presentar su colección. Toda una declaración de intenciones ahora que el país inicia su apertura comercial.

chanel desfila en cuba
Karl Lagerfeld saludando después de su último desfile en París.
Foto: Getty
Miami, Venecia, Singapur, Dubái, Seúl y... Cuba. Desde el año 2000, las colecciones Crucero de Chanel han viajado por todo el mundo y por fin Karl Lagerfeld ha desvelado su próximo destino
. Tal y como han recogido numerosos medios internacionales, la casa de moda francesa realizará su primer desfile en Latinoamérica y Cuba es la localización elegida.
El próximo 3 de mayo, La Habana se convertirá en una pasarela de excepción no solo para los diseños de la propuesta Crucero 2016-2017, sino también para el séquito de famosos que acuden a cada uno de los shows de la maison.
 Además de convertir Cuba en el escenario de sus propuestas, Lagerfeld, que no da puntada sin hilo, inspirará su colección en los referentes estéticos y colores del país caribeño. "La riqueza cultural y la apertura de Cuba al mundo, hacen del país una fuente de inspiración para Karl Lagerfeld y para Chanel”, informa la marca a través de un comunicado.
La parada de Chanel en la capital cubana es toda una declaración de intenciones que se suma a las iniciativas que otras marcas como Louis Vuitton (realizó el patrocinio artístico de una muestra que tuvo lugar el pasado mes de mayo) están llevando a cabo aprovechando la apertura comercial que se ha iniciado en el país
. Recoredemos que hace unas semanas Proenza Schouler y Stella McCartney, con mayor o menor éxito y acierto, también presentaron sendas colecciones inspiradas en Cuba.

 

Comprad, malditos.......................................................................................... Patricia Soley-Beltran

¿Cómo lograr que la apertura de unos grandes almacenes sea noticia en medios de comunicación no especializados en moda?

La nueva tienda de Primark en Madrid. / S. Sánchez

¿Cómo lograr que la apertura de unos grandes almacenes sea noticia en medios de comunicación no especializados en moda?
 Conjunte una campaña de comunicación con consumidores dispuestos a colaborar desinteresadamente, haciendo cola y pagando ellos.
Tal es el hechizo de la mercancía.
 Y es que ha llovido mucho desde que en 1822 se abrieran en París las primeras galerías, poco más que pasajes cubiertos para interesar a los paseantes en las tiendas de novedades
. Pronto, en 1830 también en París, se inauguraron los primeros grandes almacenes, una variopinta amalgama de puestos de ropa unidos para atraer clientela.
 Aunque la indumentaria siguió siendo el producto principal, la gama se amplió a útiles de cocina, muebles y juguetes.
Según el historiador del consumo Peter Stearns, los grandes almacenes y las Exposiciones Internacionales intensificaron el consumismo que se expandía por Europa, Estados Unidos y Rusia desde mediados del siglo XIX en adelante.
 Crearon un ensueño de lujo material que, gracias a la profusión y la cantidad de objetos, captó las aspiraciones y las fantasías de la población urbana.
A diferencia de las tiendas tradicionales en las que se socializaba, en estos palacios del consumo los empleados tenían instrucciones de inducir a la compra sin familiaridades.
 A pesar del ambiente anónimo, o quizá gracias a ello, ver escaparates y admirar objetos brillantes, perfectos, idénticos, alineados con precisión mecánica, se convirtió en una actividad recreativa
. Un paseo gratuito por un mundo utópico donde, como señaló el filósofo Walter Benjamin, el universo adquirió el carácter de producto.
 Se dan los primeros casos de cleptomanía.
Del famoso "faltan X días para Navidad" de Selfridges al apremiante cronómetro virtual regido por los horarios de apertura, hoy incluso el tiempo late para la compra.
 Los templos del shopping amplían su abanico clientelar a poderes adquisitivos diversos.
 El éxtasis producido por un hermoso bolso, unos trajes a medida o una novedad asequible, tienta hasta el punto de arriesgar principios, reputación o unos sufridos euros
. Un paraíso a nuestro alcance
. Sabemos que es fugaz pero, ¿quién se atreve a tirar la primera prenda?
También sabemos que, demasiado a menudo, nuestras compras contribuyen a amasar unas pocas y glamurosas fortunas a costa de mantener a millones de personas en condiciones de esclavitud. ¿Podemos permitirnos ese lujo? NO.
 Los propios almacenes-marca dedican páginas enteras a lavar su ropa y a informar sobre sus códigos éticos y ecológicos.
 La resistencia es fértil. Quiero creer.

 

El fiscal rebaja la petición de pena para Muñoz por desviar dinero de Marbella.......................... Esperanza Codina

Anticorrupción también reduce sustancialmente su solicitud para José María del Nido.

 

Julián Muñoz sentado junto a José María del Nido, este lunes en Málaga. / j. zapata (EFE)

La Fiscalía Anticorrupción ha rebajado sustancialmente su petición de pena para el exalcalde de Marbella Julián Muñoz y para el que fue su mano derecha en este Ayuntamiento, José María del Nido, en el caso Fergocon, centrado en la supuesta contratación ilícita de obras en 2001 y 2002
. Los dos están en prisión y se enfrentaban inicialmente a 11 años de cárcel.
 El ministerio público, tras la vista oral, ha solicitado tres años y seis meses de reclusión para el exregidor y dos años y tres meses para el expresidente del Sevilla CF.
En sus conclusiones finales, Anticorrupción ha tenido en cuenta las dilaciones indebidas que se han producido, ya que el procedimiento se inició en 2003 y se ha juzgado en 2015.
 En cuanto al abogado sevillano, también ha valorado que esté reparando el daño económico que causó a las arcas municipales de Marbella, circunstancia que se aplica igualmente a su hermano Óscar, que se expone a una reclamación de condena similar.
 La fiscalía ha retirado los cargos para el tercer hermano Del Nido que se sentaba en el banquillo de la Audiencia de Málaga por estos hechos.
La rebaja también se sustenta en la eliminación del delito de fraude señalado inicialmente. Anticorrupción cree que estos tres acusados han sido autores de un delito de malversación en concurso con falsedad en documento oficial. Muñoz y José María del Nido están acusados, además, por prevaricación.
 La responsabilidad civil en este caso (perjuicio para las cuentas públicas) asciende a 1,45 millones de euros.
El juicio del caso Fergocon arrancó a principios de septiembre y este lunes ha llegado a su recta final. Las primeras sesiones sirvieron para comprobar el deteriorado aspecto físico que presenta Julián Muñoz, que padece varias patologías y está intentando, de momento sin éxito, seguir cumpliendo condena en tercer grado.
 El juez de Vigilancia Penitenciaria de Málaga le concedió el régimen de semilibertad a principios de agosto por enfermedad "grave e incurable", aunque la Audiencia revocó esta decisión unas semanas más tarde porque entendía que su estado "no es en absoluto terminal".

El exalcalde fue eximido por la Sección Octava, que enjuicia los hechos, de asistir a todas las sesiones de la vista oral tras pedirlo el propio afectado, que afirmó que no tenía fuerzas para aguantar los traslados desde el penal de Alhaurín de la Torre a la sala de vista.
Muñoz sí ha estado presente esta mañana en la lectura de las conclusiones de todas las partes. Previsiblemente, no volverá hasta que el juicio quede visto para sentencia y pueda hacer uso, si lo desea, de su derecho a la última palabra.
Anticorrupción afirma que Muñoz y los dos hermanos Del Nido se "concertaron" a finales de 2000 para obtener dinero público de Marbella de forma ilícita mediante la aparente ejecución de obras y servicios por parte de la empresa Fergocon.
 La adjudicación de los trabajos fue "directa y verbal", sin contrato, publicidad ni concurrencia. Según la fiscalía, la sociedad emitió entre mayo de 2001 y diciembre de 2002 un total de 502 facturas (el fiscal las tacha de "mendaces") por un importe de cinco millones de euros.
 El supuesto perjuicio al erario público se eleva a 1,45 millones de euros.
José María del Nido reconoció durante su declaración ante el tribunal "unos sobrecostes" de entre el 10% y el 15% en las cantidades que Fergocon facturaba al Ayuntamiento por unos trabajos que, en realidad, no existieron.
 Admitió que gracias a este sistema cobró entre 100.000 y 150.000 euros de forma fraudulenta.
 Según su versión, su hermano le daba un sobre con la cantidad consignada ilegalmente, que él dividía en tres partes: una para él, otra para la empresa y otra para el alcalde de turno.
 En 2001 era el fallecido Jesús Gil y en 2002, Julián Muñoz.
Este, por su parte, negó que hubiera recibido dinero ilícito por este mecanismo, aunque a lo largo de esta vista ha pedido perdón por primera vez a Marbella por los delitos que ha cometido.
 El juicio del caso Fergocon continuará mañana con la fase de informes.