Un Blues

Un Blues
Del material conque están hechos los sueños

30 dic 2012

Felices Fiestas!!!!






La Copa del Amor.............Delmira Agostini

La copa del amor
¡Bebamos juntos en la copa egregia!
Raro licor se ofrenda a nuestras almas,
¡Abran mis rosas su frescura regia
a la sombra indeleble de tus palmas!
Tú despertaste mi alma adormecida
en la tumba silente de las horas;
a ti la primer sangre de mi vida
¡en los vasos de luz de mis auroras!
¡Ah! tu voz vino a recamar de oro
mis lóbregos silencios; tú rompiste
el gran hilo de perlas de mi lloro,
y al sol naciente mi horizonte abriste.
Por ti, en mi oriente nocturnal, la aurora
tendió el temblor rosado de su tul;
así en las sombras de la vida ahora,
yo te abro el alma como un cielo azul.
¡Ah, yo me siento abrir como una rosa!
Ven a beber mis mieles soberanas:
¡yo soy la copa del amor pomposa
que engarzará en tus manos sobrehumanas!
La copa erige su esplendor de llama...
¡Con qué hechizo en tus manos brillaría!
Su misteriosa exquisitez reclama
dedos de ensueño y labios de armonía.
Tómala y bebe, que la gloria dora
el idilio de luz de nuestras almas;
¡marchítense las rosas de mi aurora
a la sombra indeleble de tus palmas!

 

Boca a Boca.............. Delmira Agustini

Mi nostalgia ha pintado tu perfil wagneriano
sobre el velo tremendo de la ausencia..."

 Boca a boca
Copa de vino donde quiero y sueño
beber la muerte con fruición sombría,
surco de fuego donde logra Ensueño
fuertes semillas de melancolía.

Boca que besas a distancia y llamas
en silencio, pastilla de locura,
color de sed y húmeda de llamas...
¡Verja de abismos es tu dentadura!

Sexo de un alma triste de gloriosa;
el placer unges de dolor; tu beso,
puñal de fuego en vaina de embeleso,
me come en sueños como un cáncer rosa...

Joya de sangre y luna, vaso pleno
de rosas de silencio y de armonía,
nectario de su miel y su veneno,
vampiro vuelto mariposa al día.

Tijera ardiente de glaciales lirios,
panal de besos, ánfora viviente
donde brindan delicias y delirios
fresas de aurora en vino de poniente...

Estuche de encendidos terciopelos
en que su voz es fúlgida presea,
alas del verbo amenazando vuelos,
cáliz en donde el corazón flamea.

Pico rojo del buitre del deseo
que hubiste sangre y alma entre mi boca,
de tu largo y sonante picoteo
brotó una llaga como flor de roca.

Inaccesible... Si otra vez mi vida
cruzas, dando a la tierra removida
siembra de oro tu verbo fecundo,
tú curarás la misteriosa herida:
lirio de muerte, cóndor de vida,
¡flor de tu beso que perfuma al mundo!
 

"Biografía Delmira Agustini (Uruguay, 1886-1914)

 
una clase tan diferente, que una obra de la imaginación (por muy intensamente que la extraiga de la Vida) solo puede
 como máximo imitar débilmente una mínima parte de ella. "Biografía
Delmira Agustini (Uruguay, 1886-1914)
 Visión, de Los cálices vacíos " ¿Acaso fue en un marco de ilusión,en el profundo espejo del deseo,o fue divina y simplemente en vidaque yo te vi velar mi sueño la otra noche? 
En mi alcoba agrandada de soledad y miedo,taciturno a mi lado aparecistecomo un hongo gigante, muerto y vivo,brotado en los rincones de la nochehúmedos de silencio,y engrasados de sombra y soledad.
 Te inclinabas a mí supremamente,como a la copa de cristal de un lagosobre el mantel de fuego del desierto;te inclinabas a mí, como un enfermode la vida a los opios infaliblesy a las vendas de piedra de la Muerte;te inclinabas a mí como el creyentea la oblea de cielo de la hostia…gota de nieve con sabor de estrellasque alimenta los lirios de la Carne,chispa de Dios que estrella los espíritus.
 Te inclinabas a mí como el gran saucede la Melancolíaa las hondas lagunas del silencio;te inclinabas a míde mármol del Orgullo,minada por un monstruo de tristeza,a la hermana solemne de su sombra…te inclinabas a mí como si fuera
 mi cuerpo la inicial de tu destinoen la página oscura de mi lecho;te inclinabas a mí como al milagrode una ventana abierta al más allá¡
Y te inclinabas más que todo eso!Y era mi mirada una culebra
 apuntada entre zarzas de pestañas,al cisne reverente de tu cuerpo.Y era mi deseo una culebraglisando entre los riscos de la sombra¡a la estatua de lirios de tu cuerpo!Tú te inclinabas más y más…y tanto,