41 muertos tras un aterrizaje de emergencia del Superjet-100 de la compañía Aeroflot.
Un pasajero pudo grabar unos segundos de cómo un Superjet-100 de la compañía rusa Aeroflot tuvo que aterrizar de emergencia en el aeropuerto de Moscú mientras se incendiaba. 41 de las 78 personas que viajaban a bordo perdieron la vida en el accidente. El Ministerio de Situaciones de Emergencia informó de que se tardó un
total de 18 minutos en extinguir las llamas del aeronave y de que
muchos pasajeros entorpecieron las labores de evacuación por tratar de
llevar consigo su equipaje.
"Es algo
que puede suceder en cualquier momento de la vida, a cualquier persona.
Me tocó a mí (...) Hay que sacar siempre una sonrisa en estos momentos",
ha dicho el portero en declaraciones a la prensa.
Iker Casillas, que ha estado desde el pasado miércoles hasta este lunes ingresado en un hospital de Oporto tras sufrir un infarto de miocardio,
ha recibido este mediodía el alta hospitalaria y ha abandonado el
centro médico. En una rueda de prensa en la entrada del hospital, el
exportero del Real Madrid ha dicho que aún no sabe cuál va a ser su
futuro, si va a estar semanas o meses descansando: "No sé cómo va a ser
mi futuro. Me encuentro mucho mejor, será un reposo de un par de
semanas, incluso de meses. Lo importante es estar aquí", ha dicho el
excapitán blanco visiblemente emocionado. "No sé lo que será el futuro,
pero creo que lo más importante era estar aquí y poder hablar
tranquilamente y transmitir este momento",ha añadido. "Es algo que puede suceder en cualquier momento de la
vida, a cualquier persona. Me tocó a mí (...) Hay que sacar siempre una
sonrisa en estos momentos".
Por la mañana, antes de recibir el alta, Casillas ha publicado en sus
redes sociales un mensaje en el que dice que tiene "el corazón
contento", acompañado de una canción del mismo título que compuso el
argentino Palito Ortega y que popularizó la española Marisol en 1968. "Buenos días!! Yo con el CorazónContento y vosotros?? Seguimos
mejorando!", reza su publicación, junto a dos emoticonos, uno de una
cara sonriente y otro de un brazo en un gesto de fuerza. Casillas, de 37 años,
fue ingresado de urgencia el pasado miércoles después de haber sufrido
un infarto agudo de miocardio durante el entrenamiento de su equipo en
el Centro de Entrenamiento y Formación Deportiva PortoGaia, en el
Olival. La sesión de trabajo fue interrumpida y el mostoleño fue
ingresado en el Hospital CUF Porto, donde fue sometido a un cateterismo. Ese mismo día, el exguardameta del Madrid mandó un mensaje de
tranquilidad desde el centro hospitalario. "Todo controlado por aquí. Un
susto grande, pero con las fuerzas intactas. Muchísimas gracias a todos
por los mensajes y el cariño", escribió entonces en su cuenta de
Twitter, donde ha vuelto a pronunciarse este lunes.
Protagonista
de una intensa vida social en las últimas décadas del siglo XX, estaba
retirada en su casa palacio de Madrid desde que falleció su marido, el
exembajador Mike Stilianopoulos.
Esperanza Ridruejo, más conocida como Pitita Ridruejo
ha fallecido la mañana de este lunes en su domicilio de Madrid a los 88
años de edad según ha informado su familia, que también ha indicado que
será enterrada este martes en Soria, donde nació el 17 de diciembre de
1930. La aristócrata, que se convirtió en una de las grandes damas de la
sociedad española durante décadas, estudió en el colegio de la Asunción
de Madrid y posteriormente cursó Literatura inglesa en Belmont, Gran
Bretaña, y en la Universidad de Ginebra. Contrajo matrimonio con el diplomático filipino de ascendencia griega
Mike Stilianopoulos el 24 de junio de 1957, y los padrinos de su boda
fueron los condes de Barcelona, padres de Juan Carlos I. El matrimonio,
que permaneció unido hasta la muerte de Stilianopoulos en noviembre de
2016, vivió durante varios años en Filipinas y después regresaron a
España en 1959. Pitita y Stilianopoulos tuvieron tres hijos Ana que
nació en 1964, Carlos, en 1966 y Claudia en 1973.
Pitita Ridruejo adoptó la nacionalidad de su marido pero siempre ha
estado unida a España. En 1973 su marido fue nombrado embajador de
Filipinas en España y durante esa etapa llegaron a acompañar a los
entonces príncipes, Juan Carlos y Sofía, durante su viaje por Filipinas.
Enamorada del arte en todas sus facetas, experimentó con muchas de
ellas. Comenzó a pintar cuando el trabajo de su marido la llevó a Roma
en 1967 y durante esa época consiguió que su producción protagonizara
varias exposiciones en la capital italiana. También hizo sus pinitos en
el mundo de la televisión y protagonizó dos películas para la televisión
alemana en 1970. Llegó a estar en contacto con el director italiano
Federico Fellini, quien en 1971 le hizo una pruebas para poder
participar en uno de sus proyectos, aunque un nuevo traslado de su
marido la obligó a abandonar la idea. Durante su etapa en Londres desarrolló una intensa actividad social y
entró en contacto con el mundo de la moda, al mismo tiempo que
comenzaba a interesarse por las filosofías orientales y se metió de
lleno a estudiar parapsicología, historia de las religiones y filosofías
orientales. En 1983 el matrimonio Stilianopoulos decidió abandonar la
carrera diplomática e instalarse definitivamente en España. Desde
entonces vivieron a caballo entre Madrid y Marbella y la pareja, pero
especialmente ella, era una de las figuras claves de los miembros de la jet-set
de la época, protagonistas de las crónicas sociales y personajes que
nunca faltaban en las fiestas más sonadas de aquellos años, cuando la
localidad andaluza reunía a lo más granado de la sociedad internacional
durante el verano. Pitita Ridruejo, era una mujer discreta y elegante,
que recibió numerosos premios como el Premio Paride, el del diario
Pueblo y varios del periódico ABC, según apunta la agencia EFE. Pero también fue muy conocida a finales de los años ochenta
cuando habló abiertamente de que tenía apariciones marianas.
Precisamente su veneración a la Virgen la llevó a estudiar en
profundidad sus apariciones por todo el mundo y presumía de haber
visitado "todos los lugares en los que se ha visto a la Virgen. Sus
conocimientos sobre el tema la llevó a ofrecer conferencias por todo el
mundo y ha escribir el libro La Virgen María y sus apariciones. Toda la actividad que caracterizó su vida quedó totalmente reducida
cuando falleció su marido: "Para mí lo era absolutamente todo, mi media
mitad, mi todo, el hombre más importante de mi vida", dijo después de su
muerte. Le despidió con mantilla y de riguroso luto y después se
refugió en su casa palacio del centro de Madrid donde ha fallecido esta
misma mañana.
Los investigadores no descartan ninguna hipótesis: desde la mala preparación del personal hasta el clima.
El impacto de un rayo en el avión fue lo que pudo causar la tragedia que este domingo costó la vida al menos a 41
personas en Moscú. Cuando todavía está en marcha la investigación
oficial del accidente, la tripulación y los pasajeros afirman que un
rayo alcanzó la aeronave minutos después del despegue. El capitán, Denis
Evdokimov, ha asegurado que ese impacto dañó el sistema y las
comunicaciones y forzó a volver a Sheremétevo, el principal aeropuerto de la capital rusa. Allí, tras el aterrizaje de emergencia, el Sukhoi Superjet 100 que iba
de Moscú a Murmansk (situado en el extremo noroccidental del país) se
incendió. Llevaba los dos tanques llenos de combustible, según fuentes
de la investigación. El comité creado para determinar las causas del accidente del vuelo
Su-1492 de la compañía rusa Aeroflot no descarta ninguna hipótesis: mala
preparación de la tripulación, los controladores y los inspectores
técnicos; las condiciones meteorológicas y razones técnicas. El ministro
de Transporte de Rusia, Yevgeny Dietrich, ha informado este lunes de
que se han recuperado los cuerpos de los 41 fallecidos. También las dos
cajas negras de la aeronave. Nueve personas siguen hospitalizadas,
algunas en estado muy grave.
Las autoridades han abierto una investigación penal por
incumplimiento de la normativa de seguridad con consecuencia de muerte
para dos o más personas. El organismo supervisor del transporte
(Rostransnadzor) ha anunciado también una inspección extraordinaria a la
aerolínea Aeroflot. Denis Evdokimov informó a los medios rusos que el Sukhoi Superjet 100
tuvo que hacer un aterrizaje de emergencia después de perder parte del
equipo del avión por el impacto de un rayo. "Debido a los rayos,
perdimos el contacto de radio y pasamos por un pilotaje mínimo (...) Es
decir, sin un ordenador como de costumbre, de manera directa", aseguró
el piloto en al diario ruso Komsomolskaya Pravda.
"Logramos restablecer el enlace a través de la frecuencia de
emergencia, pero fue corto y funcionó solo de manera intermitente.
Pudimos decir algunas palabras y luego el contacto desapareció", agregó
el capitán, que reconoció que la aeronave se incendió debido a que
llevaba los tanques llenos en el brusco aterrizaje. Los aviones pueden
atraer rayos, especialmente en el despegue y cuando atraviesan zonas de
tormenta, pero es raro que estos causen daños físicos significativos en
el aparato y no suelen afectar a la seguridad del vuelo, según la
Organización Internacional de Aviación Civil. La auxiliar de vuelo Tatyana Kasatkina también habla del impacto de
un rayo. "Despegamos y entramos en las nubes. Había granizo. Escuchamos
un ruido y vimos un destello, como eléctrico. Todo sucedió muy rápido",
ha declarado a la cadena de Rossiya 24. Dmitri Khlebushkin, uno de los
pasajeros que viajaba en la aeronave ha contado que vio "un destello de
luz blanca" durante el vuelo.
Evacuación con maletas
Tras el aterrizaje, los pasajeros fueron evacuados a través de un
tobogán en la parte delantera de la aeronave. En las imágenes de los
vídeos grabados por otros viajeros desde la pista y desde las
cristaleras del aeropuerto se ve a personas saltando mientras enormes
columnas salen de la parte trasera del avión, devorada por el fuego. Un
vídeo grabado en el interior de la cabina muestra las llamas fuera del
avión, junto al ala y se escuchan los gritos de pánico de los pasajeros.
"La evacuación comenzó tan pronto como el avión se detuvo. Empujé a
los pasajeros por el tobogán inflable", ha relatado la auxiliar de vuelo
Kasatkina, que ha explicado que pese a las instrucciones, muchos
pasajeros saltaron de sus asientos y se dirigieron a la salida tras el
aterrizaje forzoso, "aunque el avión se estaba moviendo a gran
velocidad", dijo. Entre los fallecidos hay otro auxiliar de vuelo. Sus
compañeros aseguran que murió por inhalación de humo tratando de sacar a
más pasajeros. Fuentes de la investigación y algunos viajeros han contado a los
medios rusos que el afán de muchos pasajeros de querer acarrear consigo
durante la evacuación sus pertenencias pudo ralentizar el proceso y
dificultarlo. En los vídeos emitidos por las televisiones rusas se ve a
algunos de ellos corriendo por la pista con mochilas o hasta alguna
maleta. Según los datos de aviación, se tardó 55 segundos en evacuar el
avión.
Este no es el primer accidente con muertos de un Sukhoi Superjet 100. Desde que comenzó a volar en 2008, este es el segundo accidente mortal
que involucra a esta clase de aeronave, de acuerdo con la base de datos
Aviation Safety Network. Además, el avión —el primero civil diseñado en Rusia
tras la caída de la Unión Soviética— ha tenido otros dos accidentes con
heridos. Este lunes, el ministerio de Transporte de Rusia ha afirmado
que no ve el motivo para suspender los vuelos de esta aeronave.